Masiva marcha de estudiantes y docentes: reclamaron fondos para las universidades públicas

La ex presidenta salió de su despacho y cantó la marcha peronista desde el primer piso del Instituto Patria, ubicado a pocos metros del Congreso de la Nación. Fue luego de la masiva manifestación universitaria, en la que decenas de miles de estudiantes y docentes le exigieron al Gobierno que garantice los fondos para el funcionamiento de las universidades públicas.

Minutos antes, la ex mandataria se había definido como “hija y tributaria de la universidad pública, nacional y gratuita”.

También resaltó que “vamos a volver a conquistar” la movilidad social ascendente.

“La universidad pública, base de la democracia y el desarrollo social, lucha por su supervivencia” es el título del documento de tres páginas que se leyó en el cierre del acto central de la Marcha Federal Universitaria, en la Plaza del Congreso. La lectura estuvo a cargo de Piera Fernández de Piccoli, presidenta de la Federación Universitaria Argentina (FUA), quien ya había ocupado ese lugar en la movilización del pasado 23 de abril.

En la ciudad chubutense, miles de estudiantes y profesores se sumaron a la Marcha Federal Universitaria.

Partieron desde la Universidad Nacional de la Patagonia hacia la Plaza San Martín.

La rectora de la casa de estudios, Lidia Blanco, fue una de las oradoras del acto: “Es un error entender como casta a las universidades. En los países desarrollados invierten dos o tres veces más que la Argentina en estas áreas porque saben que el diferencial para crecer depende de cuánto más y cuánto mejor se hagan las cosas allí”, manifestó.

La líder del espacio condujo al grupo de legisladores y dirigentes que, junto a ella, se pronunciaron en contra del veto.

“Hoy marcho en defensa de la educación pública de la que soy parte como alumna y profesora titular desde hace 52 años”, posteó Carrió en sus redes.

La vicepresidente Victoria Villarruel se expresó a través de su cuenta de X mientras se desarrollaba el acto de cierre de la marcha en defensa del financiamiento de las universidades públicas.

“Todo lo que se financia con los impuestos, tasas y contribuciones del pueblo argentino trabajador puede y debe ser auditado para recibir fondos del Estado. Debemos cuidar lo que es de todos y dejar de proteger los negocios de los gerentes de los agujeros negros fiscales”, introdujo la presidenta del Senado.

“Siempre mi apoyo a la universidad pública y de calidad, pero sin los parásitos que hacen negocios con ella”, cerró, con una imagen que exhibió números de financiamiento de la Universidad Nacional de Madres de Plaza de Mayo, comparado con el bajo número de egresados.

En la misma dirección, el Ministerio de Justicia apuntó contra la institución. A través de sus redes sociales, la cartera que conduce Mariano Cúneo Libarona mostró datos oficiales sobre esta casa de estudios.

“Entre 2020 y 2023, esta cartera entregó $1.500 millones de pesos en concepto de presupuesto a la Universidad Nacional de Madres de Plaza de Mayo”, precisaron.

Según el Ministerio, en esos 4 años “se recibieron 16 alumnos”. Cuatro de ellos egresaron en 2022, mientras que los otros 12 lo hicieron en 2021.

En 2020 y 2023 no tuvieron nuevos recibidos.

Quince minutos antes de las 17, desde el escenario montado frente al Congreso, comenzaron a nombrar a las numerosas instituciones y agrupaciones políticas que manifestaron su apoyo a la movilización.

La marcha es multitudinaria. En forma masiva acudieron a la manifestación personas en defensa del financiamiento de la educación universitaria. La imagen se replicó en distintos puntos del país.

Diez minutos antes de las 17 sonaron las estrofas del himno nacional. En los bares de los alrededores del Congreso se observaron aplausos para los manifestantes.

“Las fuerzas del cielo te están diciendo que defiendas la educación, porque vox populi, vox dei”, dijo a su turno uno de los oradores. La plaza de los dos Congresos está repleta de manifestantes y la marcha se replica en distintos puntos del país.

Los sindicatos agrupados en la CGT se hicieron presentes de manera dispar en la Marcha Federal Universitaria. Algunos salieron a la calle con columnas más numerosas y otros, con una participación “testimonial”. Es otro de los reflejos de una división sindical que se manifiesta en un ala dialoguista que selló un acuerdo con el Gobierno y otra combativa, que resiste sus políticas con protestas.

El presidente de la Unión Cívica Radical estuvo al frente del grupo que partió de la esquina de Tucumán y Callao.

Junto al senador estuvieron también el vicepresidente del radicalismo, Luis Naidenoff, el senador Pablo Blanco y el presidente del radicalismo porteño, Martín Ocampo, entre otros.

El senador Maximiliano Abad, en tanto, llegó junto a otros dirigentes de la UCR a la convocatoria en el Congreso, desde donde ponderó la masividad de la marcha: “Una multitud, en todo el país, salió a la calle a defender su derecho a aprender, a enseñar, a progresar, a vivir en una Argentina que invierta en el futuro”.

“Es mucho más que una movilización sectorial, es la declaración de principios de un pueblo unido: la educación no se veta”, afirmó Abad.

Facundo Manes, por su parte, confrontó con la idea de desfinanciar a las casas de estudio: “El veto es un ataque a la identidad, al ADN argentino de ascenso social, de aspirar a una vida mejor a través de la educación que, por otra parte, en el mundo que vivimos hoy, es lo que marca la economía. Ya que habla tanto de economía el presidente, la educación es la economía del siglo XXI”, remarcó el neurocientífico.

Consultado por los cuestionamientos del oficialismo a la condición política de la protesta, Manes contestó: “Creo que esta marcha no se la puede atribuir a nadie. Es la sociedad argentina que está reaccionando y poniendo un límite a la crueldad del presidente de atacar la identidad de nuestra sociedad”.

Y se mostró confiado sobre qué pasará en el Congreso con la insistencia sobre la Ley de Financiamiento: “Yo creo que esta vez sería trágico que muchos de nuestros partido voten en contra de la universidad. Es una de las banderas, es una de las causas que tiene hoy el radicalismo. Así que yo soy muy optimista de que aunque el presidente quiera vetar esto, de diputados lo impidamos”.

Además, completó: “Por eso es muy importante que la gente, aunque no esté relacionada con la universidad, esté acá. Es muy importante que la gente le diga al presidente que no estamos discutiendo solamente sobre el PBI o un sector de la sociedad, estamos discutiendo sobre el futuro de nuestra nación”.

La ex presidenta se encuentra a una cuadra del Congreso, en la sede del Instituto Patria, desde donde volvió a manifestarse en contra del veto presidencial y el ajuste a las universidades.

“Mi viejo era trabajador, después fue comerciante, siempre muy laburante, mi mamá también. Y tuvo una hija abogada, otra médica, y bueno esa es la movilidad social ascendente que nos permitió ser una argentina diferente, otrora. Pero que vamos a volver a conquistar”, sentenció la ex mandataria.

“La importancia de la marcha es acompañar a los chicos que vienen a defender su futuro, yo no soy protagonista, son ellos”, dijo el líder del Frente Renovador, caminando entre la multitud que se dirige hacia el Congreso en defensa del financiamiento a las universidades públicas.

El dirigente evitó extenderse en las declaraciones y el contacto con los medios, manifestando su intención de acompañar sin cobrar protagonismo. La movilización fue masiva en el centro de la Ciudad de Buenos Aires y en distintos puntos del país.

Este miércoles a las 14 tendrá lugar una nueva y masiva Marcha Federal Universitaria. En esta oportunidad, la movilización se llevará a cabo en rechazo del veto por parte del presidente Javier Milei de la ley que recompone el presupuesto a las entidades educativas. Además, se suman otros reclamos por los gastos de funcionamientos y el salario tanto de los docentes como de los que lo son. A poco tiempo de desplegarse esta convocatoria, las figuras del mundo del espectáculo expresaron su postura a través de las redes sociales.

Desde el corazón de la protesta, la directora teatral se pronunció sobre el reclamo de las universidades: “La Ley de Financiamiento venía a resolver la crisis de este año y el veto amenaza esa posibilidad de solución”, consideró.

En diálogo con Infobae, Torlucci resaltó la necesidad de que se garantice la sustentabilidad económica de las casas de estudio de forma permanente: “También venimos a pedir que el Presupuesto del año que viene permita que el sistema funcione correctamente”, dijo.

En paralelo, Infobae dialogó con el secretario general de la Unión de Personal Civil de la Nación (UPCN), Andrés Rodríguez: “No admitimos en absoluto que se desfinancie a la universidad y que se desarme la educación pública”, afirmó el líder sindical.

Fotos: Adrián Escandar, Mario Sar, Maximiliano Luna, Gastón Taylor, Jaime Olivos y Leo Galletto

El diputado nacional Florencio Randazzo manifestó su apoyo a la marcha universitaria. “Debemos seguir siendo un país que incluye a partir de un sistema universitario gratuito y de calidad que, administrado con responsabilidad y transparencia, permita el ascenso social y el desarrollo de nuestro país desde cada provincia”, escribió en una publicación realizada en su cuenta de Instagram.

El legislador de Hacemos Coalición Federal se manifestó en sus redes sociales a minutos de que inicie el acto.

Se desplazan mayoritariamente por Avenida de Mayo. Hay una imagen repetida, la de familias de tres generaciones juntas, para describir en persona el paso por la universidad pública. Por otro lado, muchos estudiantes advierten que son la primera generación de graduados en su familia.

Se observan muchos carteles hechos a mano. También numerosas maestras con guardapolvos blancos.

Además hay grupos de jubilados con sus carteles de las marchas de los miércoles. Haciendo su reclamo y apoyando este.

Los pañuelos se venden a 2.000 pesos. El más vendido es el azul, con puño que aprieta un lápiz. La inscripción dice “yo defiendo la universidad pública”.

Por otro lado, hay puestos de comida distribuidos a lo largo de la plaza y en los alrededores. Un choripán cuesta 4.000 pesos. Un paty con huevo y cebolla tiene el mismo valor. También se consiguen panchos y hamburguesas veganas.

En el escenario montado para realizar el acto previsto para las 17 se leerá un documento. En la antesala de ese momento, la Plaza de los dos Congresos fue llenándose de gente.

Pasado el mediodía, en los subtes, sobre todo en la línea B, se notó que la mayoría de los pasajeros se dirigían a la marcha a la marcha. Algunos en columnas de docentes de todos los niveles educativos, otros, en familia o con amigos. Varios estudiantes de escuelas secundarias privadas salieron más temprano para ir con sus mamás. Se escuchó con insistencia el canto “universidad de los trabajadores, y al que no le gusta, se jode, se jode” en los vagones. Van contagiando de un vagón al otro.

Callao y Corrientes fue un punto de encuentro para familias y amigos, hubo desde estudiantes primarios hasta gente de más edad, en un entorno similar al de la la marcha de abril.

Encabezados por el vicerrector Emiliano Yacobitti, integrantes de la Universidad de Buenos Aires (UBA) caminan desde Plaza Houssay, en las inmediaciones de la facultad de Medicina, hacia el Congreso, donde esta tarde tendrá lugar el acto de cierre de la protesta.

Docentes y estudiantes despliegan una bandera con la leyenda: “defendamos la UBA”.

En medio de un fuerte operativo, siete colectivos fueron interceptados en distintos retenes y se les impidió la llegada hacia el centro de la Ciudad de Buenos Aires. Todas las persona que se trasladaban allí se dirigían a la marcha universitaria.

Según información a la que accedió Infobae, los colectivos transportaban personas desde la Facultad de La Plata.

En otro control, se verificó una unidad de larga distancia con 50 manifestantes del Sindicato de Camioneros en destino al Congreso. Las mismas fuentes informaron que se hallaron dentro de las unidades “varias deficiencias de seguridad: tacógrafo defectuoso, faltantes de martillos, escotilla sellada, sin matafuegos y parabrisas trizado”.

Por ese motivo, los efectivos que participan del operativo labraron actas correspondientes a la Comisión Nacional Reguladora del Transporte (CNRT) con retiro de servicio. Los pasajeros se retiraron del lugar sin novedades, indicaron.

Las organizaciones sindicales, sociales y políticas tomaron la delantera para conseguir un lugar frente al Congreso, mientras paulatinamente crecía la presencia de personas y manifestantes de a pie a la zona.

La Avenida 9 de Julio y la Avenida de Mayo se encontraban libres para circular hacia las 14 horas, aunque algunos colectivos se desviaban a la altura de la calle San José. Las calles cercanas a la concentración registraban poco tránsito con el fin de evitar complicaciones.

El escenario del acto central se ubicó frente a Plaza Moreno, la última de las áreas públicas que conforman la Plaza de los Dos Congresos.

El Gobierno retuvo a tres colectivos en “situación irregular”, durante uno de los controles implementados por la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT).

Según indicaron desde el Ministerio de Seguridad de la Nación, una de las unidades llevaba a 40 personas del Sindicato de Camioneros, y el otro con 16 personas pertenecientes a la agrupación “La Patria es el Otro”, que tiene como principal referente al ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés “Cuervo” Larroque.

Los colectivos, informaron las fuentes, estaban “sin autorizaciones” y “sin papeles”, por lo que fueron retenidos y trasladados a depósito.

Poco antes del mediodía, estudiantes de la Federación Universitaria de La Plata (FULP) llegaron a la estación de Constitución para participar de la Marcha Federal Universitaria.

Las columnas partieron desde la capital bonaerense a partir de las 9 en tren, encabezadas por el Frente Gremial Universitario, que está integrado por los sindicatos y organizaciones gremiales ADULP y ATULP.

“Por la Universidad Pública, que nos enorgullece y nos hace mejores”, dice la convocatoria oficial de la entidad estudiantil, con la consigna “Que no nos veten el futuro”.

En medio de los recortes presupuestarios a las universidades y a horas de la protesta frente a Congreso, el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, criticó al gobierno de Alberto Fernández por las partidas otorgadas a la Universidad Nacional Madres de Plaza de Mayo, que recibió $1.500 millones y “solo un 0,62% de los alumnos se recibieron entre 2020 y 2023″. “Cada uno nos salió $100.000.000″, aseguró.

Según el funcionario, la alta casa de estudios contaba con un total de 2.564 matriculados, de los cuales en 2021 se egresaron 12 y en el 2022 tan solo 4. Además, Cúneo Libarona cuestionó que el gobierno anterior haya cedido el inmueble que -depende de la cartera de Justicia- donde está ubicada la universidad, en Defensa 119.

“Esto es una muestra más del desastre que dejaron los gobiernos anteriores en materia universitaria y del gasto público”, subrayó Cúneo Libarona, y concluyó: “El único motivo de la marcha de hoy es lo político”.

El presidente Javier Milei enfrentará este miércoles una nueva y masiva Marcha Federal Universitaria, la segunda en sus casi diez meses de mandato. La movilización se enmarca en el rechazo al veto presidencial de la ley que recompone el financiamiento de las casas de altos estudios, pero también en medio del reclamo por el ajuste en gastos de funcionamiento y en el salario tanto de docentes como de no docentes.

Los trabajadores del subte definieron liberar los molinetes en la estación Federico Lacroze de la línea B, entre las 12 y las 13 hs, en el marco de la Marcha Federal Educativa. Los usuarios pudieron viajar gratis durante una hora en apoyo a la lucha por la educación pública, entre otras medidas.

La medida se aplicó solo durante ese horario y en esa estación, como muestra de apoyo a la convocatoria que impulsan las universidades. Pero también como forma de visibilizar la falta de inversión en la línea B y otros reclamos laborales vinculados al asbesto.

“Estamos al borde de una tragedia, tanto para los usuarios como para los trabajadores. Seguimos exigiendo al Jefe de Gobierno Porteño que tome medidas urgentes”, afirmó Claudio Dellecarbonara, secretario ejecutivo del sindicato del subte, quien invitó a todos los sectores a unirse a la movilización por una “educación pública, laica y gratuita”.

El senador nacional y presidente de la UCR, Martín Lousteau, instó a que todos los legisladores del radicalismo “tienen que estar presentes” en la marcha universitaria, votar en favor del proyecto de financiamiento y en contra del futuro veto por parte del presidente Javier Milei.

“Hoy la sociedad les va a demostrar a todos los que especulan con un futuro cerca de La Libertad Avanza, o un cargo, o alguna posibilidad de estar en una lista, y que en esa especulación se llevan puesta las universidades, cuán importante son para la Argentina”, aseguró en radio Continental.

El dirigente porteño remarcó que Milei “detesta la educación pública” y sostuvo que el Gobierno nacional tiene una “visión de odio” sobre el tema. “El gobierno desfinancia a las universidades, hay mentiras de todo tipo y color y buscar excusas distintas por las cuales entra en un conflicto, eso tenemos que defender hoy”, remarcó.

El rector de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Ricardo Gelpi, se refirió a la marcha federal universitaria que se llevará a cabo esta tarde. Aunque se manifiesta a favor y es uno de los convocantes a la protesta, el directivo de la alta casa de estudios expresó su pesar por la necesidad de llevarla a cabo.

“No estoy contento con esta marcha, para mí es un día muy triste. Un tema de educación superior, como son los salarios docentes y la investigación científica, tenga que discutirse o pelearse en la calle lo veo absurdo y ridículo”, afirmó Gelpi en declaraciones a Radio Rivadavia.

Según Gelpi, las universidades como la UBA “quedaron conformes” en abril pasado, durante el diálogo con el Gobierno nacional, tras la última marcha masiva que destrabó un aumento de los gastos de funcionamiento. “Nos dijeron que en poco tiempo más iban a mejorar los salarios. Eso fue en abril. Estamos terminando septiembre y nunca nos llamaron. La semana pasada ofrecieron algo del 6% por única vez, cuando el atraso es del 40 y 50 por ciento”, lamentó.

El vicerrector de la UBA, Emiliano Yacobitti, aseguró hoy que los docentes y no docentes, residentes e investigadores de las universidades públicas tuvieron, en lo que va del año, “una caída gigantesca del poder adquisitivo del salario, que ronda el 40%”. “Esto provoca que muchos tengan que bajar su dedicación o aceptar ofertas de universidades privadas”, sostuvo en diálogo con Radio Mitre.

El dirigente radical, además, aseguró que el Gobierno “miente” cuando destaca que el aumento salarial en la administración pública general en el año, y hasta octubre, llegó al 68,2%, mientras que el de los docentes universitarios fue de 81,4%, algo que informó el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, en las últimas horas.

“Lo que me preocupa es que la sociedad está empezando a perder una de las pocas cosas que el Gobierno brinda como servicio de calidad por los impuestos que pagamos todos”, agregó Yacobitti, y aclaró: “Todas las movilizaciones son políticas, (esta) no es partidaria”.

En tanto, para el subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, “la política metió la cola”, con relación a aquellos dirigentes que convocan a la movilización. “Es una causa noble, pero hay sectores opositores que permanentemente están buscando con qué tema se le puede hacer daño al Gobierno, y esto es aprovechado, lamentablemente”.

A su vez, y también diálogo con Radio Mitre, sostuvo que hay rectores de universidades públicas que ganan entre cinco y ocho millones de pesos, y agregó: “El 80% de la masa salarial (del Estado), de los aumentos que se vinieron dando, están por debajo de los docentes universitarios. O sea, recibieron por encima del promedio de la masa general del Estado. La oferta que hicimos, de 6.8, era para equiparar los salarios docentes con los que mejores aumentos tuvieron del Estado”.

“Estamos haciendo un gran esfuerzo, empujar los salarios docentes para equipararlos con el mejor aumento que tuvo el Estado. La rechazan porque los dirigentes sindicales vinculados al radicalismo tenían la orden de romper la reunión para apoyar la marcha”, completó.

El centro de estudiantes de la Escuela Superior de Comercio “Carlos Pellegrini”, que depende de la Universidad de Buenos Aires (UBA), convocó anoche una vigilia y pernocte que fue votada en las asambleas de los alumnos.

“Entendemos que la universidad pública está siendo amenazada. Esta vez, ante una nueva marcha que se espera más multitudinaria, tenemos la responsabilidad que llegue a más gente. Decidimos hacer una movida y una medida de fuerza más fuerte, pero sin interrupción de clases”, sostuvo en declaraciones a TN Violeta Presta, presidenta del Centro de Estudiantes del Carlos Pellegrini (Cecap).

Los alumnos de la institución, junto a las organizaciones estudiantiles de colegios preuniversitarios como el Nacional Buenos Aires y el ILSE, marcharán esta tarde al centro porteño. Las autoridades de estos establecimientos dictaron la suspensión de las clases en los turnos tarde y vespertino para que la comunidad educativa pueda participar de la convocatoria.

El Congreso de la Nación apareció esta mañana del miércoles rodeado con un vallado de seguridad, las pancartas, carteles y el escenario desde el que se pronunciarán los discursos de la marcha federal en “defensa de la universidad pública y del sistema científico”.

El vallado colocado frente a la sede del Poder Legislativo y sus adyacencias corresponde al primer anillo de seguridad en la zona, que depende del Ministerio de Seguridad de la Nación por tratarse de objetivos federales.

La protesta se convocó ante el anuncio del presidente Javier Milei de dictar un “veto total” a la Ley de Financiamiento Educativo, que garantiza una actualización de las partidas del presupuesto universitario y un aumento salarial al personal ajustado por inflación.

“La universidad no es el problema, es parte de la solución”, es el lema que utilizará la comunidad educativa de las universidades públicas. La convocatoria principal se llevará a cabo a las 17 en la plaza del Congreso y tendrá réplicas en las principales ciudades de todas las provincias del país.

La marcha universitaria del miércoles 2 de octubre repetirá mucho de la forma y el contenido que tuvo la primera movilización de fines de abril. Cinco meses después, las reivindicaciones llevadas hasta las puertas de la Casa Rosada, lejos de haberse resuelto, se agravaron. De aquel pedido de más presupuesto, los mismos convocados llevarán reclamos aun más contundentes dirigidos al Gobierno pero también a los diputados. En la Plaza de los Dos Congresos, reclamarán al presidente Javier Milei que no vete la ley que les dio más fondos a las universidades y a los legisladores les reclamarán que defiendan esa norma aprobada por amplia mayoría. Pero también, que se frene la “campaña de desprestigio” contra las universidades.

A pesar de las constantes negociaciones que continuaron hasta última hora para tratar de llegar a un acuerdo, aunque sin una propuesta superadora a los reclamos salariales del sector, el Gobierno se enfrentará este miércoles a una nueva Marcha Federal Universitaria que promete ser todavía más masiva que la anterior, en rechazo del veto que el presidente Javier Milei firmará para frenar el proyecto de financiamiento de las casas de altos estudios.

Rectorados, gremios universitarios, sindicatos, movimientos sociales y organismos de derechos humanos, organizaciones piqueteras marcharán en contra del anunciado veto de Javier Milei contra la Ley de Financiamiento Educativo.

Pasaron 162 días desde la primera Marcha Federal Universitaria, que el pasado 23 de abril movilizó en todo el país a estudiantes, egresados, docentes y familias en contra de los recortes al presupuesto para la educación superior. Aquella marcha consiguió que, en mayo, el Gobierno nacional aprobara una actualización del 270% en los gastos de funcionamiento, así como un 300% en los fondos para los hospitales universitarios, en línea con la inflación acumulada desde 2023.

En la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), la más antigua de la Argentina y una de las primeras de América, hay docentes jóvenes que empiezan a cambiar horas de enseñanza al frente de un aula por horas dedicadas a otros trabajos. Es porque, a cambio de diez horas semanales junto a los alumnos -y todas las horas invisibles que lleva preparar una clase, seguir formándose, corregir lo que haya que corregir- perciben entre 150.000 y 225.000 pesos mensuales, según el cargo que ostenten.