Cristina Kirchner desembarcó en el conurbano bonaerense en forma inesperada. Después de mucho tiempo de no hacer actividades concretas, más allá de las conferencias habituales que ha dado en localidades como Merlo, se volcó al territorio y abrió un abanico de especulaciones sobre su rol político y electoral.
La ex presidenta visitó la parroquia San José, que conduce el padre Nicolás Angelotti, a quien todos conocen como “Padre Tano”, que está ubicada en La Matanza. El encuentro fue durante el mediodía y no tuvo un anuncio previo. Se concretó al día siguiente que Axel Kicillof viajó a México a la asunción de la presidenta electa Claudia Sheinbaum.
Ese solo movimiento abrió un puñado de especulaciones, ya que la relación que une a ambos no está en el mejor momento, pese a que siguen teniendo contacto. Al día siguiente que el Gobernador decidió viajar afuera del país, la ex mandataria pisó el conurbano, al que hubiese sido extraño que fuera sin la presencia del mandatario provincial. En el Instituto Patria descartan cualquier tipo de acto deliberado en perjuicio de Kicillof.
En la jerga política, CFK bajó al territorio, lo que comenzó a generar un sinfín de suspicacias sobre su futuro electoral, ya que desde el kirchnerismo duro anhelan que el próximo año sea candidata a legisladora nacional. Sea o no ese su futuro, su presencia en la localidad más poblada del conurbano se convirtió en un dato político trascendente para el peronismo.
La ex mandataria no informó en sus redes sociales la actividad, tal como suele hacer en la mayoría de las oportunidades que se mueve del Instituto Patria. Por eso su aparición en suelo matancero fue sorpresiva, incluso para los vecinos que se acercaron a saludarla cuando la vieron junto al sacerdote que forma parte del grupo de curas villeros.
En el mundo K le piden a la ex vicepresidenta que asuma la reorganización del espacio político y se ponga al frente del proceso electoral. Exactamente lo contrario a lo que impulsan sectores vinculados a Kicillof, que pretenden que el Gobernador sea quien tome mayor protagonismo en el territorio y conduzca el proceso político y electoral el próximo año.
Según pudo saber Infobae, el municipio que conduce Fernando Espinoza no había sido notificado de la visita. Se enteraron en el momento que la hizo. Tampoco hubo una reunión entre el intendente y la ex vicepresidenta. Todo el movimiento buscó ser sorpresivo y parece ser el puntapié inicial de una nueva etapa de la ex presidenta, que viene enviando mensajes críticos hacia el interior del peronismo, respecto a la necesidad de discutir nuevamente la representación de los trabajadores.
Durante la visita la ex vicepresidenta resaltó la tarea del padre Tano en la parroquia y escuchó de los vecinos un pedido uniforme: “Volvé Cristina”. La ex presidenta tiene un gran acompañamiento popular en la tercera sección electoral de la provincia de Buenos Aires, bastión del peronismo y, en los últimos veinte años, del kirchnerismo.
“No conocía al padre Tano pero me decían las cosas que hacían en el barrio, en el centro de jubilados, y todo lo que hace para que no avance el narco, producto del Estado se retira. Les quiero decir que siempre voy a estar ustedes. Estamos en la segunda mitad de la vida pero con mucho para ofrecer a todos. Les pido que sigan trabajando y organizándose. Es lo importante”, le dijo.
La recorrida duró 2 horas y media, y tuvo cuatro paradas. Primero fue a un natatorio, luego se subió a una camioneta del Padre Tano y recorrió los barrios Puerta de Hierro, San Petersburgo, 17 de Marzo y 17 bis, y destacó la urbanización que viene llevando adelante la provincia de Buenos Aires. Luego fue un centro de jubilados y más tarde a la parroquia.
”Al lugar que la inviten CFK va a tratar de ir“, aseguraron desde el Instituto Patria. ¿Será candidata? ¿Tendrá la lapicera? ¿Alguien se la disputará? El regreso de Cristina Kirchner al territorio va a multiplicar los interrogantes y sacudirá al peronismo. Una vez más.