El presidente Javier Milei y su círculo más íntimo ven que el conflicto planteado en Aerolíneas Argentinas, donde los pilotos y otros gremios aeronáuticos presionan con paros salvajes por una recomposición salarial, entró en un laberinto. Por eso, están decididos a avanzar para que otra empresa aérea latinoamericana se haga cargo de las operaciones de la línea de bandera, al menos en las que son de cabotaje.
Además, apoyarán en el Congreso un proyecto de ley que impulsa el diputado Hernán Lombardi (PRO), para concretar la privatización que quedó fuera de la Ley Bases.
“Le queremos transmitir a los gremios que no hay chances de que ganen esta discusión”, confesó alguien muy cercano al Presidente en los pasillos de la Casa Rosada, luego de la reunión que se hizo en la Jefatura de Gabinete en la que se decidió adoptar medidas urgentes con el objetivo de terminar de raíz con el tema.
Allí estuvieron, además del jefe de Gabinete, Guillermo Francos; la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei; el presidente de Aerolíneas, Fabián Lombardo; el ministro de Economía, Luis Caputo; el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán; el vocero presidencial, Manuel Adorni, y el asesor presidencial, Santiago Caputo. La reunión no se convocó de urgencia, estaba planificada hace un par de días.
“Le damos tiempo a que los gremios arreglen la paritaria hasta mediados de octubre, porque no hasta el 17 de octubre. Se puede llamar presión, les estamos diciendo que no es una amenaza vacía, te la vamos a poner”, afirmó sin eufemismos la misma fuente, dejando en claro que irán a fondo para terminar con los paros que últimamente dispusieron los gremios y que perjudicando miles de pasajeros con cancelaciones y reprogramaciones.
¿Por qué ese plazo? El 17 de septiembre renunciaron los gerentes de operaciones y de seguridad operacional de Aerolíneas y el Estado tiene un plazo de un mes para nombrar a sus reemplazantes. La empresa quedaría sin operar y allí entraría a tallar una empresa para ocuparse de ese tema. “No sé los detalles jurídicos, cuál es la figura legal, pero no es una concesión”, apuntaron en Balcarce 50 con cierto misterio.
La última oferta del Gobierno como mejora salarial rondó el 11%, mientras los trabajadores reclaman una suma cercana al 80%. No parece fácil de resolver la cuestión ante tanta diferencia entre el reclamo y lo que se ofrece. Hasta el momento de los cinco gremios, dos aceptaron: UPSA (Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales) y APTA (Asociación Personal Técnico Aeronáutico), que agrupan a cerca del 30% de los empleados.
Desde el Ejecutivo afirman que son varias las empresas que se mostraron interesadas en asumir el desafío, que estaría restringido solamente a los vuelos dentro del país. No quieren confirmar de qué países son (¿Brasil? ¿Chile? ¿México?) pero sí que se avanzó en las conversaciones por la extensión de la puja con los sindicatos y porque pretenden que sirva de “modelo” ante situaciones similares en otros ámbitos. “Para los vuelos internacionales, los usuarios pueden buscar otras compañías”, acotaron.
Por otro lado, en Casa Rosada relativizaron que el ex presidente Mauricio Macri haya publicado esta mañana un extenso texto en su cuenta de X (ex Twitter) en el que planteaba cuál es la solución que propone para Aerolíneas. Allí esbozó que se debían adoptar tres pasos. “1. Iniciar un proceso de quiebra, que permite dos opciones, la continuación de la empresa luego de reestructurarla (no se trasladan al adquirente los viejos convenios colectivos) o la realización de sus bienes. 2. La escisión de la empresa en dos (o tres) nuevas, una aérea y otra de servicios en tierra, también con nuevos convenios colectivos. 3. La rápida reducción de la empresa y la liquidación de sus activos por separado: los aviones a las nuevas ingresantes del mercado, los simuladores, el área de mantenimiento y la empresa de rampa por otro”.
Afirman que esa publicación de Macri no los condicionó. Y están convencidos de que el proyecto de ley que impulsa Lombardi les servirá para reinstalar el tema a nivel legislativo. Los legisladores “dialoguistas”, que en las últimas dos semanas se reunieron con funcionarios por otros temas que deben avanzar en el Congreso, presentaron una carpeta que están dispuestos a respaldar. “Todavía no se sabe cuándo se puede llegar a tratar”, dijo un funcionario con acceso al despacho presidencial.
Mientras tanto, la medida que dispusieron los empleados que están nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), que prestan tareas en la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), que se realizó entre las 6 y las 12, no afectó el normal desenvolvimiento de los aeropuertos y de los vuelos. Retomarán esa protesta a partir de las 17.
En los gremios de pilotos y de aeronavegantes están decididos a resistir el anuncio del Gobierno. Este mediodía, antes de que se reúnan en asamblea las cúpulas de ambos sindicatos encabezados por Pablo Biró (pilotos) y Juan Pablo Brey (aeronavegantes) se lanzó con otras entidades sindicales una nueva Mesa Nacional del Transporte para enfrentar las políticas de la administración de Javier Milei.