Las conversaciones en el oficialismo en busca de organizar el debate del Presupuesto 2025 comenzaron hoy en la Casa Rosada y, en paralelo, la oposición empieza a transitar el mismo camino.
Excluidos de cualquier tipo de negociación con el Gobierno, el bloque de Diputados de Unión por la Patria se reunirá esta tarde para empezar a desglosar el proyecto de ley que ingresó al Congreso el pasado domingo.
La intención del bloque que conduce Germán Martínez es no esperar señales del oficialismo respecto de los plazos y comenzar con el trabajo. Por eso, esta tarde se reunirán los integrantes de UP de la Comisión de Presupuesto para empezar con el desagregado del documento.
La reunión de hoy va a estar conformada por las mismas personas que estuvieron presentes el domingo pasado en la presentación que hizo el Presidente Javier Milei frente a un semi vacío recinto en la Cámara de Diputados.
En total, UP tiene 20 miembros sobre un total de 48 en la comisión. El sector que hoy conforma un bloque oficialista está conformado por 15 en donde hay 6 de LLA, 7 del PRO y 2 del MID. Entre los radicales en donde hay 6 miembros, hay dos cercanos a la Casa Rosada. Los provinciales de Innovación Federal suman otros dos al igual que Encuentro Federal.
Con un solo representante quedan la Coalición Cívica, el Frente de Izquierda y Producción y Trabajo. Aunque todos los legisladores pueden participar de la Comisión, solo los miembros pueden votar. Para poder tener un dictamen de mayoría el oficialismo va a tener que apelar a los bloques provinciales y a seguir resquebrajando el bloque de la UCR.Uno de los puntos que analizarán esta tarde tiene que ver con algo que adelantó Milei respecto al déficit fiscal.
El proyecto señala que si caen los ingresos el Ejecutivo ajustará en la misma medida para mantener el déficit en cero. Esto es algo que ya utilizó el ex ministro Domingo Cavallo en 2001.
Otro punto que también analizará hoy UP, pero que ya comenzó a trascender las disidencias, es la suspensión del artículo 9 de la Ley de Financiamiento Educativo, que garantizaba un presupuesto mínimo del 6% del PBI para las provincias.A esto se le suman los recortes en términos reales de subsidios al transporte para las diferentes provincias y la inflexibilidad del gasto público.
El lado B del debate del presupuesto es la posibilidad de que no sea aprobado. El primero en hacer referencia a esto fue el vocero Manuel Adorni quien dijo que sería la primera vez que el Congreso deje sin presupuesto a un gobierno “por dos años consecutivos”, algo que no es cierto porque para este año LLA no presentó ningún proyecto de ley al respecto.
Según el Instituto Consenso Federal, que avanza en la Casa Rosada, la idea es ser inflexibles en las negociaciones con el fin de bloquear modificaciones y de esa manera no conseguir el número necesario para su aprobación. Si eso sucediera, debería reconducir el Presupuesto 2023 con las ampliaciones parciales de 2024, con ingresos a precios de 2025. Es decir, dispondrá de total discrecionalidad para administrar recursos con “gastos viejos” pero “recaudación nueva”.
El Instituto que conduce el ex diputado Alejandro “Topo” Rodríguez señala que con esa estrategia, ya este año -sólo por usar un presupuesto viejo- terminará ajustando por una suma equivalente a 35,000 millones de dólares, sumando todas las partidas.
Un dato no menor tiene que ver con que en la reunión de esta mañana en la Casa Rosada, los presidentes de las comisiones de Presupuesto de Diputados y Senado, los libertarios José Luis Espert y Ezequiel Atauche, con el Jefe de Gabinete Guillermo Francos y Luis Caputo. Del encuentro también participó el presidente de la Cámara Baja, Martín Menem. La intención es llamar a la comisión para la semana que viene y que vaya el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo.