“Antes de votar en contra de los jubilados o de la educación pública me voy a mi casa”. Esa declaración a Infobae proviene de un senador radical, que no responde al liderazgo de Martín Lousteau, indignado con el accionar de sus correligionarios en la Cámara de Diputados ante la posibilidad de apoyar el veto presidencial a la reforma previsional. La foto de un grupo de legisladores boinas blancas con Javier Milei encendió las redes sociales, indignó a dirigentes históricos que lanzaron una juntada de firmas y provocó una reunión de urgencia de las autoridades de la Convención Nacional.
Con la firma de Gastón Manes, presidente de la Convención, y la de Hernán Rossi, secretario general, el organismo emitió un comunicado en el que hizo un fuerte llamado para que los diputados del partido centenario “sean coherentes” con su votación en la sesión de este miércoles. “Es una cosa de locos. El proyecto lo presentó su propio partido, votaron a favor y ahora van a apoyar el veto presidencial”, expresaron indignados los integrantes de la mesa del organismo.
“Por los principios históricos de nuestro partido, esta Convención Nacional rechaza el veto presidencial, hace un llamamiento a los diputados y diputadas para que sean coherentes con la iniciativa que nuestro mismo partido había presentado y con sus propios votos que la habían apoyado, y pide enfáticamente que preservemos los valores de la Unión Cívica Radical hacia la dignidad de nuestros jubilados”, expresa el comunicado.
Por último, los integrantes de la Mesa de la Convención Nacional votaron de forma unánime una fuerte advertencia: “En caso de un eventual incumplimiento a lo resuelto se dará inmediato traslado de lo acontecido al Tribunal Nacional de Ética de la UCR para el tratamiento de la conducta de sus afiliados que incurrieran en tal actitud”.
El Tribunal Nacional de Ética se terminó de conformar a fines del mes de junio con Ricardo Barrios Arrechea, Alicia Tate y Juan Pedro Tunessi, quienes responden a Facundo Manes, Lousteau y Gerardo Morales. Es el órgano que, por ejemplo, expulsó a Julio Cobos en 2008 por su alianza con el kirchnerismo. De hecho, hace varias semanas analizan las más de 20 presentaciones que se hicieron contra Luis Petri tras integrar el Gabinete libertario.
La reunión de la Mensa de la Convención Nacional se gestó de urgencia ante el inminente aviso de un grupo de diputados radicales de que apoyarán el veto presidencial. De hecho, esta mañana trascendió una foto de Javier Milei junto a Martín Arjol, Luis Picat, José Federico Tournier, Mariano Campero y Pablo Cervi en la Casa Rosada. Lo que más indignó a las autoridades partidarias es que la mayoría de ellos no responde a un gobernador.
“¿En nombre de quién fueron?”, expresó indignado Gastón Manes en diálogo con este medio, y agregó: “Me preocupa como ciudadano decente. ¿Qué fueron a negociar?”. Para el presidente de la Convención Nacional la situación es alarmante y preocupante porque, según consideró, “esta votación no es ‘darle herramientas al Gobierno’”. Una frase que suelen utilizar los radicales cercanos a La Libertad Avanza.
Rossi, a su turno, adelantó que, en caso de que estos cinco diputados voten a favor de sostener el veto, la UCR entera “no va a parar hasta echarlos del partido” ya que “de la foto en la Casa Rosada y de la traición a los jubilados no se vuelve”.
Como adelantó este medio, con el apoyo de este grupo de radicales Milei logra asegurarse el veto a pesar de que el presidente del partido, Martín Lousteau, y el presidente de la UCR bonaerense, Maximiliano Abad -ambos senadores y dos de las autoridades máximas de la UCR- le pidieron a los diputados de boina blanca que voten la insistencia.
Durante la tarde de este martes, más de 700 radicales de todo el país firmaron un documento que expresó: “Hacemos un llamado urgente a todos los legisladores, especialmente a los radicales, dado que el proyecto nació de nuestro partido, pero también a todos los y las legisladores que lo votaron y apoyaron: honren su voto, respeten su palabra. Cumplan con el mandato de defender a nuestros jubilados/a, como lo hicieron cuando aprobaron esta ley”.
“A tan solo un día de la nueva votación, ya vemos cómo algunos legisladores comienzan a retroceder, a adoptar posturas ambiguas, sin explicación alguna. Eligen resignar un aumento de apenas $14.000 para los jubilados, uno de los sectores más castigados por la crisis. Todo esto, para no incomodar al gobierno. Peor aún, muchos están considerando adherir al veto presidencial sobre un proyecto que ellos/as mismos impulsaron. ¿Dónde están sus convicciones?”, agregaron.