Uno de los mapuches que a fin de mes ocupará uno de los banquillos de acusados en el juicio por la usurpación de lotes en Villa Mascardi, fue detenido este miércoles en la localidad santacruceña de Las Heras, de acuerdo a información que distribuyó el Ministerio de Seguridad de la Nación.
Se trata de Gonzalo Coña, a quien le endilgan un espacio de conducción a la par del recientemente liberado Facundo Jones Huala, conductor de la violenta Resistencia Ancestral Mapuche (RAM).
Es la segunda vez en el año que le colocan los grilletes y en ambas oportunidades fue en la provincia de Santa Cruz. Es que, según su abogado defensor Gustavo Franquet, Coña se desempeña laboralmente en esa provincia, aunque en un sitio rural remoto, donde “es difícil encontrarlo”.
Este miércoles el letrado anticipó a Infobae que su cliente se presentaría en las próximas horas en una dependencia de Gendarmería Nacional.
La Cámara Federal de Casación Penal anuló la ‘probation’ concedida a la mano derecha de Jones Huala y ordenó su captura. Se lo acusa por usurpación en concurso ideal con atentado a la autoridad agravado por haber sido cometido con armas.
A fin de mes, el mapuche ocupará uno de los ocho lugares previstos en el área de los acusados, en el juicio por la causa madre de Villa Mascardi.
Entre los oyentes se espera a Jones Huala, quien mantiene lazos cercanos con varios integrantes de la extinta agrupación Lafken Winkul Mapu, a la que pertenecía Coña antes del desalojo masivo del 4 de octubre de 2022.
La información que emitió la cartera que conduce Patricia Bullrich da cuenta de un “arduo trabajo” de Gendarmería Nacional.
En enero de este año, el mapuche fue detenido aunque luego obtuvo la libertad a partir de una probation, beneficio que quedó sin efecto en julio, momento desde el que se convirtió en prófugo para la Justicia.
“No se le atribuye a Coña un simple hecho de usurpación, sino que debe analizarse en su contexto, como parte de una serie de hechos vandálicos perpetrados a lo largo de más de cinco años por la agrupación que integra, la Lof Lafken Winkul Mapu, consistente en daños, incendios, intimidaciones, usurpaciones masivas, etc., encausadas en diversos expedientes tramitados en esta Justicia Federal, que han generado un quiebre a la convivencia pacífica del lugar y una conmoción a la sociedad civil local y nacional que requiere el descubrimiento de la verdad y la aplicación de una sanción penal”, dijo la fiscalía al oponerse a la probation, en julio pasado.
Ese fallo fue rubricado por el el juez Diego Barroetaveña de la Sala I del máximo tribunal, quien hizo lugar al recurso de casación interpuesto por el Ministerio Público Fiscal contra la decisión del juez federal subrogante de Bariloche, Hugo Greca, quien otorgó la suspensión del proceso penal a prueba a Coña y ordenó su liberación.
Los hechos imputados a Coña consisten en haber participado de la usurpación a los lotes de Parques Nacionales ubicados en Villa Mascardi, desde noviembre de 2017 hasta abril de 2019. Según la causa, el ahora detenido habría atacado a los funcionarios judiciales con piedras, lanzas y armas de fuego, logrando el repliegue de las fuerzas de seguridad.
Se abrió una causa por usurpación en concurso ideal con atentado a la autoridad agravado por haber sido cometido con armas. Coña fue citado a juicio, pero el imputado no compareció por lo que fue declarado rebelde. Se desconocía su paradero hasta que fue detenido cuando tenía en su poder, sin autorización legal, varias armas de fuego y municiones. Fue el 12 de enero de 2024, más de un año después de su fuga. El Ministerio de Seguridad a cargo de Patricia Bullrich dio la noticia y la funcionaria lo celebró en sus redes. “Ley y orden: el que las hace, las paga”.
Desde el entorno del mapuche aseguran que presta servicios rurales en un campo que queda en un sitio inhóspito. De hecho, cuando fue detenido en enero, estaba acompañado por sus empleadores.
“No se ocultaba, pero se le hacía imposible presentarse ante la Justicia” lo excusaron.