El presidente Javier Milei vetó la ley que establecía la movilidad para las jubilaciones y pensiones que fue aprobada por los dos tercios tanto en la Cámara de Diputados como de Senadores. No sólo eso, sino que en las últimas horas se refirió a que lo haberes de la tercera edad “está volando” y que en dólares están ganando.
El veto, firmado el viernes a la noche y publicado hoy en el Boletín Oficial, es total; sin embargo, la ley establece que los legisladores pueden insistir con la aprobación de la norma: tienen que obtener nuevamente los dos tercios en ambas cámaras para que se convierta en ley sin la posibilidad de que el Ejecutivo la pueda vetar.
En ese contexto, los bloques opositores empezaron las conversaciones en busca del número mágico para insistir con la ley, pero la reunión del viernes entre el PRO, el MID y el bloque libertario con el Presidente marcó un nuevo límite.
La Cámara de Diputados cuenta con 257 miembros, por lo que los dos tercios se conforman con 172 votos. Claro que el número cambia según las presencias. En la votación en la que se le dio media sanción, la oposición obtuvo 160 votos positivos, 72 en contra y 8 abstenciones. Esa sesión hubo 16 ausentes.
La reunión del viernes con el presidente Milei marcó un nuevo piso respecto de la negativa. Si el PRO, el MID y LLA sientan a todos sus diputados juntan 77 votos. Si se suman los bloques Buenos Aires y Producción y Trabajo suman 81. El bloque Creo de Paula Omodeo llegan a 82. Con 3 votos más termina bloqueando los dos tercios de la oposición. Si Ricardo López Murphy, de Encuentro Federal, mantiene su voto negativo queda apenas a 2 votos si hay asistencia perfecta a la sesión.
La oposición está transitando este proceso con pie de plomo en busca de los 172 votos. Para que eso suceda tiene que asegurarse el apoyo y la presencia de la totalidad del resto de la Cámara. Unión por la Patria tiene 99, el radicalismo 34, Encuentro Federal 16, Innovación Federal 8, la Coalición Cívica 6, 2 por Santa Cruz, 1 del Movimiento Popular Neuquino. A este grupo se le sumaría el bloque de la Izquierda, que en la votación original se abstuvo y ya adelantó que votará contra el veto de Mieli. Al igual que la diputada del bloque FE, Lourdes Arrieta quien, habiendo votado en contra, ahora dice que votará a favor. En total, suman 172 votos para insistir.
Las dudas en la oposición radican en varios legisladores del peronismo, el radicalismo y Encuentro Federal que responden directamente a gobernadores que son cercanos a la Casa Rosada.
En este grupo aparecen en duda los tres diputados de UP que responden a Osvaldo Jaldo, de Tucumán, los otros tres Catamarqueños que responden a Raul Jalil. Por el lado de Encuentro Federa,l además de López Murphy, hay dudas sobre Francis Morchio de Entre Ríos y Jorge Ávila de Chubut -dos provincias con gobernadores del PRO-, que estuvieron ausentes en la votación original.
Algo similar sucede en el bloque de la UCR , en el que conviven 4 sectores diferentes. Por un lado están los radicales cercanos a los gobernadores -como los mendocinos que responden a Alfredo Cornejo-, que son los comandados por Rodrigo De Loredo. Luego los que responden a Facundo Manes, los que están con Martín Lousteau y los “sueltos”.
Hasta ahora el único que se pronunció es el presidente de la UCR y senador Lousteau, quien dijo hoy que va a “insistir con la ley en defensa los adultos mayores”. Y remató con una crítica al oficialismo: “Ante un gobierno insensible, los argentinos no podemos darle la espalda a nuestros jubilados”.
En este escenario es poco probable que se busque insistir esta semana en el recinto. A esto se le suma que el miércoles está programada la visita del Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, para realizar su informe de gestión. “Hoy no está el número seguro y nadie va a ir al recinto a perder. Hay que tener los 172 sí o sí para ir”, explicó un diputado de UP. “El plan “b” es derogar el DNU que estableció la fórmula de Milei, para eso solo hace falta mayoría simple y ahí sí llegamos”, agregó.
Si eso sucediera, se volvería a aplicar la fórmula de la administración de Alberto Fernández que ajustaba por la inflación del trimestre anterior.