Aún con precios más bajos, las mineras de litio informaron “sólidos resultados” y ganancias millonarias

El “derrumbe” del precio internacional del litio informado en los últimos días no significa que la actividad haya dejado de ser un próspero negocio para las mineras que extraen el mineral en el norte argentino.

La clave son sus bajos costos. Producir una tonelada de carbonato de litio cuesta entre 3.500 y 4.000 dólares según el consenso de todas las mineras y especialistas del sector consultados por Infobae.

El precio de mercado de ese producto, en contrapartida, promedió los 20.000 dólares en el primer trimestre del año y bajó a 17.200 dólares en el segundo, de acuerdo al informe de resultados de Arcadium Lithium, la minera de litio más grande de la Argentina, que explota los salares de Catamarca y Jujuy.

Cabe recordar que en 2023 la cotización promedio del producto fue de 43.000 dólares y un año atrás había tocado picos de 90.000 dólares, en lo que fue el boom del mineral tras el parate obligado de la producción de autos por la pandemia.

Esos años de rentabilidad inédita para las mineras se distendieron estos días. En el mes de agosto, la cotización de una tonelada de carbonato de litio se ubicó en 10.800 dólares, según el último informe publicado por la Secretaría de Minería de la Nación, a cargo de Luis Lucero.

En ese marco, la diferencia entre lo que cuesta producir el elemento clave para el funcionamiento de las baterías de automóviles eléctricos, celulares y laptops, y su valor de mercado es lo que permitió a las mineras reportar resultados positivos a sus accionistas en la primera mitad del año.

Dos informes de resultados de Arcadium Lithium dan cuenta de ello. Mientras que en el primer trimestre de 2024 la firma - de capitales estadounidenses y australianos recientemente fusionados - reportó “sólidos resultados”, en el segundo tercio comunicó que obtuvo ganancias brutas de 99,1 millones de dólares y netas de 85,7 millones de dólares, sobre un volumen de ventas de 255 millones de dólares. La producción del primer semestre fue de alrededor de 20.000 toneladas del mineral que obtienen del subsuelo de los salares en Catamarca y Jujuy.

Arcadium Lithium es una de las tres mineras que cuentan con proyectos en producción, y la que mayores volúmenes extrae. Las otras dos son Exar (de capitales chinos) y Eramine (capitales franceses y chinos). Esta última comenzó a producir en el mes de julio.

“Los márgenes siguen siendo positivos. Catamarca tiene la mina más antigua del país que inició sus operaciones cuando el precio internacional del litio no superaba los 8.000 dólares por tonelada”, comentó el senador nacional de la UCR, Flavio Fama.

“Es cierto que ha habido una caída en el mercado, pero el precio todavía es sustentable”, explicó el legislador catamarqueño, que en 2022 denunció a la minera por subfacturar el valor sus exportaciones.

Según cálculos realizados por el diputado provincial de izquierda en Jujuy, Gastón Remy, aún con los precios en baja, la principal minera de litio del país contó con un margen de rentabilidad del 40% en la primera mitad del año.

Por el lado empresario, Franco Mignacco, presidente de la Cámara de Empresas Mineras (CAEM) y presidente de la minera Exar, se refirió a la baja en la cotización como una cuestión circunstancial. “Estamos atravesando un momento de bajas de los precios internacionales. Hubo un sobre-stock de productos y los miedos a las recesiones de las principales economías del mundo como China y EEUU contrajeron el desarrollo de la electromovilidad”, dijo recientemente en diálogo con La Gaceta de Tucumán.

“Lo vemos como algo estacionario y coyuntural. La tendencia a nivel mundial en cuanto a las energías renovables sigue siendo el litio”, subrayó Mignacco.

El secretario de Minería de la Nación, Luis Lucero, también pronosticó un mediano plazo con expectativas. “El litio se convertirá en el “principal mineral exportado del país. Argentina tiene las condiciones para superar entre finales de 2025 e inicios de 2026 una producción de 200.000 toneladas de LCE y, de esta manera, acercarse al tercer puesto de países productores de litio”, señaló Lucero en una entrevista reciente con la agencia internacional de noticas Reuters.

A pesar de las expectativas, el diputado provincial de la UCR en Catamarca, Alfredo Marchioli, remarcó que la meseta en el precio ha generado que las mineras frenen inversiones, con su consecuente impacto local. “Freezaron ampliaciones, pararon exploraciones y se despidió gente en Catamarca”, comentó el legislador.

A pesar de la caída que observa por estos días el precio del litio, las inversiones del sector son de las más robustas de la economía argentina. La incursión de los capitales que desembarcaron en la región norte del país se caracterizan por una planificación de largo plazo, con proyectos que apuntan a desarrollarse a lo largo de 20 y 25 años.

Las inversiones, en tanto, oscilan entre los 250 y 1.000 millones de dólares, según la ubicación en donde se encuentren los yacimientos.

De acuerdo a un relevamiento realizado por la Secretaría de Minería de la Nación, existen 50 proyectos en la actualidad que tienen como objetivo extraer e industrializar litio. Pertenecen a 32 empresas de capitales de distintos orígenes: asiáticos, europeos, norteamericanos, latinoamericanos y argentinos.

Los proyectos que se encuentran en producción son sólo cuatro: Olaroz perteneciente a la empresa Arcadium Lithium, Cauchari Olaroz, de Exar - Gangfeng, en la provincia de Jujuy; Fénix (Arcadium Lithium) en la provincia de Catamarca y Centenario Ratones (de Eramine) en la provincia de Salta.

Además, hay seis proyectos que se encuentran en etapa de construcción, es decir, comenzarán a producir carbonato e hidróxido de litio en el mediano plazo. Se trata de Sal de Oro, de la empresa coreana Posco, situado en territorio compartido por Catamarca y Salta, en el límite de ambas en Salar de Hombre Muerto; Sal de Vida (Arcadium Lithium) y Tres Quebradas (de Zijin Mining Group Ltd.) en Catamarca;; Rincón (Argosy Minerals), Sal de los Ángeles (Revotech Asia) y Mariana (Gangfeng Lithium), en la provincia de Salta.

Las condiciones objetivas que motivaron las inversiones se asientan en algunos datos esenciales. Según los estudios geológicos publicados por la Secretaría de Minería, la región cuenta con 106 millones de toneladas de reservas, de las cuáles sólo se extrajeron alrededor de 100.000 en los últimos años. El objetivo es que esa producción crezca hasta que el país se ubique entre los principales productores mundiales, que actualmente son Australia, China y Chile.

Por otro lado, los objetivos de reducción de carbono en pos de proteger el planeta implican que el parque automotor del mundo mute en el uso de automóviles eléctricos. Para el año 2030 la mitad de los vehículos deberán contar con motores eléctricos. Es por ello que las proyecciones indican que la demanda de carbonato de litio, el elemento clave, crecerá.