En menos de una semana, la relación entre el presidente Javier Milei y su vice, Victoria Villarruel, volvió a mostrar importantes fisuras, en medio de una fuerte interna de La Libertad Avanza que se cristalizó en ambas Cámaras del Congreso, donde el Gobierno intenta imponer su agenda legislativa, por el momento sin mucho éxito.
A lo largo de los últimos días, hubo pases de factura cruzados entre la Casa Rosada y el Senado por la responsabilidad sobre las derrotas parlamentarias del oficialismo, que no logró ni que sus propios integrantes se alineen a la hora de votar.
El conflicto entre los distintos sectores libertarios terminó de explotar en la última reunión del bloque de diputados, en el que la mendocina Lourdes Arrieta, que hasta hace poco respondía políticamente a Karina Milei, discutió a los gritos con su compañero de espacio Nicolás Mayoraz, al que ahora analiza denunciar por agresión y violencia de género.
Todo surgió luego de que la dirigente, junto a Rocío Bonacci, también miembro de esta bancada, fueran cuestionadas por el resto de LLA porque habrían posibilitado el quórum este miércoles para que se trate el Decreto de Necesidad y Urgencia 565/2024, que aumentó los fondos reservados destinados al funcionamiento de la SIDE, una medida que Santiago Caputo estaba muy interesado en que sea aprobada.
Con el asesor presidencial desde el lunes alejado no solo de Balcarce 50, sino de Buenos Aires -estaría en el sur junto a su familia-, la Cámara baja debatió la validez de la iniciativa y el oficialismo perdió con los votos de una parte del PRO y de la UCR.
“El DNU de fondos para la SIDE es para cuidar a los argentinos. Los diputados que votaron junto al kirchnerismo su rechazo, eligieron ponerse del lado de las mafias, los narcos y el terrorismo. ¡Ahora deberán hacerse cargo!”, comentó al respecto la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, a través de un mensaje que compartió en su cuenta de X.
Ahora, el aumento para la secretaría de inteligencia pasaría a ser debatido en el Senado, donde el Gobierno dependerá en buena parte del trabajo de Villarruel para lograr el consenso necesario y evitar que sea el primer Decreto en la historia argentina en ser rechazado en ambos recintos parlamentarios y, de esa manera, dejado sin efecto.
Sin embargo, esto se da en un contexto de tensiones en la cúpula libertaria, ya que en el entorno del Presidente cuestionan algunas actitudes de la vice, quien se mantiene firme en sus posiciones y acusa a la Casa Rosada de no involucrarse en los problemas del Congreso.
De hecho, en la Cámara alta señalaron a Infobae que las autoridades nacionales no intervinieron ante la situación que se generó entre Arrieta y Mayoraz en Diputados, aunque no es una crítica nueva, ya que suelen protestar por la falta de diálogo entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo.
De la vereda de enfrente, en tanto, hay quienes le recriminan a Villarruel cierta injerencia en la postura del senador Francisco Paoltroni, quien ya anticipó que va “a hacer lo imposible” para impedir que avance el pliego del juez Ariel Lijo a la Corte Suprema de Justicia.
“Es verdad que son parte de la misma fuerza política. Pero no puede ser que se vean conspiraciones ante las opiniones en disidencia, en las cosas que se envían a paquete cerrado y sin explicación”, respondió al respecto a Infobae una fuente de La Libertad Avanza en el Senado.
La interna también complicó el impulso de la Boleta Única, que ya tiene media sanción de Diputados y el Gobierno quiere debatir lo antes posible, tal como lo expresó el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán, en una reunión que encabezó el martes con los referentes de los bloques de la oposición “dialoguista”.
El funcionario aceptó el pedido de algunos partidos provinciales de modificar el diseño de las papeletas para que no haya posibilidad de votar lista completa, lo cual podría llegar a perjudicar en las siguientes elecciones a aquellos espacios que no presenten candidatos a presidente o gobernador.
A pesar de las negociaciones, las autoridades nacionales no consiguieron que el proyecto sea incluido en la lista de temas a tratar en la sesión del Senado convocada para este jueves, lo que representó un nuevo traspié legislativo.
En Balcarce 50 generó sorpresa esto, ya que confiaban en que el texto se iba a agregar a la orden del día, pero en el entorno de Villarruel se desligaron de la cuestión y aseguraron que no hubo acuerdo porque la propuesta que realizó el Poder Ejecutivo no convenció a los bloques.
En una reciente actividad en el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires, la titular de la Cámara alta reconoció sus diferencias con Milei: “Por supuesto que tenemos nuestros acuerdos, puede haber algunos desacuerdos, pero yo tengo muy en claro que soy la vicepresidente de su gobierno y, por ende, mi apoyo y mi lealtad hacia el Presidente son totales, lo cual no significa que tenga divergencias y que las pueda expresar en ejercicio del derecho a la libertad que tanto declamamos todos nosotros”