El presidente Javier Milei volvió a reunirse a solas con su antecesor Mauricio Macri, aunque esta vez fue luego de que el PRO votara por primera vez en contra del oficialismo, al rechazar el Decreto de Necesidad y Urgencia que aumentó el presupuesto de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
De acuerdo con lo que precisaron a Infobae fuentes cercanas a los protagonistas, el encuentro se realizó en la Quinta de Olivos el miércoles por la noche, poco después de que en la Cámara de Diputados se rechazara la medida que había sido impulsada en buena parte por Santiago Caputo.
Con el estratega del Gobierno lejos de Buenos Aires, los líderes políticos conversaron sobre la relación entre La Libertad Avanza y el partido de la oposición “dialoguista”, que suele acompañar los proyectos parlamentarios que envía el Poder Ejecutivo.
Además, el cónclave surgió tras las fuertes críticas de Macri al círculo íntimo de Milei y, particularmente, al asesor presidencial, al que acusó de no aceptar que ex funcionarios de Cambiemos se sumen a las segundas y terceras filas del actual Gabinete.
En este contexto, el ex jefe de Estado encabezó el mismo miércoles un zoom con los principales referentes del PRO, en el que estuvieron la vicepresidenta y el secretario general del espacio, Soledad Martínez y Facundo Pérez Carletti, respectivamente; el jefe del bloque en Diputados, Cristian Ritondo, y sus compañeros de banca María Eugenia Vidal y Diego Santilli, entre otros.
Durante esa charla virtual, el líder del partido amarillo bajó la orden de votar en contra del mencionado DNU, pero con Ritondo fuera del país, no hubo consenso en la bancada y solamente algunos de sus integrantes cumplieron el pedido, aunque alcanzó para que el Decreto sea rechazado en el recinto.
Esta fue la tercera vez que Milei y Macri compartieron una comida en la Quinta de Olivos en poco menos de un mes, por lo que se intensificó el contacto entre ambos, tal como precisó este medio, aunque al igual que en las ocasiones anteriores, el contenido de la charla quedó bajo un fuerte hermetismo.
La decisión de mejorar la comunicación entre ellos se dio después de los duros cuestionamientos públicos del ex presidente a Santiago Caputo, al que responsabilizó por supuestas fallas en la gestión que en la Casa Rosada niegan.
“Hemos hablamos hasta febrero o marzo, pero la realidad es que al principio le echaba la culpa a (el ex jefe de Gabinete, Nicolás) Posse y la realidad es que ahora es él el que ha tenido la responsabilidad y no hemos logrado avanzar en estas conversaciones constructivas, que no son de poder”, sostuvo al respecto el líder del PRO.
Por su parte, el asesor de Milei se reunió este mes en Balcarce 50 con Ritondo para tratar de recomponer la relación con el partido y acordar avanzar en una serie de iniciativas legislativas, aunque el oficialismo viene sufriendo varias derrotas en el Congreso.
Además del rechazo del DNU que otorgó USD 100 millones de gastos reservados a la SIDE, este jueves el Senado aprobó la ley de movilidad jubilatoria gracias a los votos de Unión por la Patria, la Unión Cívica Radical y, nuevamente, el PRO.
Si bien ahora el Presidente analiza vetar la norma, bajo el argumento de que atenta contra el equilibrio fiscal, la sanción de la misma mostró una vez más que el partido de Macri dejó de estar alineado a La Libertad Avanza.
Asimismo, el Poder Ejecutivo no logró imponer a su candidato para encabezar la Comisión Bicameral de Fiscalización de los Servicios de Inteligencia, que terminó quedando en manos del radical Martín Lousteau, uno de los dirigentes más críticos de esta gestión.