Luego de que la interna libertaria en la Cámara de Diputados sumara un nuevo capítulo marcado por los gritos y las acusaciones cruzadas que desencadenaron en la formulación de una denuncia por agresión y violencia de género de parte de Lourdes Arrieta contra Nicolás Mayoraz, el diputado Alberto “Bertie” Benegas Lynch arremetió contra la diputada mendocina al plantear que la actitud que ha tenido desde que fue acusada por participar de la visita a genocidas en el penal de Ezeiza demostraba su falta de calificación para asumir la presidencia de La Libertad Avanza (LLA) en Mendoza.
“Más infantil no se me ocurre”, disparó el legislador al apuntar contra las declaraciones y denuncias que Arrieta realizó desde que se conoció la foto que se tomó junto a los represores detenidos y los demás diputados que participaron de la actividad. En este sentido, aseguró que las explicaciones que ofreció su par le resultaron “pobres” al ironizar: “Explicó que se quedó dormida en la combi, la despertó Astiz y se sacó una selfie. Una cosa insólita”.
El escándalo oficialista estalló durante la reunión que el bloque de diputados de LLA había pactado en el Salón Blanco para este miércoles, con la intención de debatir sobre la denuncia penal que la mendocina había formulado para pedir que se investigue la visita a los represores detenidos, por los presuntos engaños y mal uso de los fondos públicos. La olla se destapó cuando le tocaba exponer al diputado santafesino, lo que desató una pelea a los gritos entre el presidente del bloque, Gabriel Bornoroni, Arrieta y Mayoraz.
La contienda verbal provocó que la diputada sufriera un ataque de nervios y decidiera denunciar a su par santafesino por presunta agresión y violencia de género. Un movimiento que fue criticado por Benegas Lynch, quien no dudó en respaldar a Mayoraz durante una breve entrevista que brindó al programa A dos voces, emitido por TN.
“No fue agresivo, no fue violento”, ratificó el diputado bonaerense al señalar que la diferencia entre el discurso del santafesino con el resto de los diputados que opinaron sobre la visita fue que éste había dado un mensaje “potente, directo y personal”. Pese a que comprendió el estado de nerviosismo en el que se sumergió Arrieta al ser señalada por su accionar, el también economista desacreditó las acusaciones al remarcar que “ni siquiera estuvo cerca físicamente porque fue del otro lado de la sala”.
Como respuesta, denunció el ingreso de una persona ajena al bloque durante la discusión, a la cual tildó de violenta porque habría increpado a varios de los diputados presentes. Aunque reconoció que el tercero señalado no habría intentado golpear a nadie, acusó: “tuvo una cosa casi de tribuna del ascenso, cosa que no corresponde y tampoco estaba admitido -en la reunión-”.
Por este motivo, Benegas Lynch sentenció que “esta denuncia también es victimizarse y no estar a la altura de un debate político sobre las diferencias políticas”, al sumar a la discusión a la diputada santafesina Rocío Bonacci, una de las participantes de la visita a los genocidas, por haber defendido a la mendocina en los medios de comunicación. “Se victimizó de algo que se tiene que hacer responsable de haber estado ahí en la foto”, sentenció.
A raíz de esto, el diputado fue contundente al reflexionar sobre el rol que le habían otorgado a Arrieta como presidente de La Libertad Avanza en Mendoza. “Tenía todo para ganar y hace estos desastres demuestra que no está calificada”, analizó al diferenciarse sobre los objetivos que pudiera tener a futuro, ya que consideró que se habría unido al partido para construir una “carrera política y no por convicción”.
“Que haga una reconsideración de donde está parada y qué quiere hacer, y que si eventualmente quiere vender su alma y está pensando solamente en un cargo perfectamente la pueden recibir en Unión por la Patria”, disparó al hacer referencia a la desconfianza que se despertó por parte del bloque sobre su supuesto acercamiento al kirchnerismo.
Las mismas se suscitaron por su vínculo con el abogado Yamil Castro Bianchi, quien formuló la denuncia contra Gerardo Milman en la causa que investiga el atentado contra la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, y por las supuestas conversaciones que un asesor de ella habría mantenido con las autoridades de UxP, según confirmaron fuentes oficiales a Infobae.
Por el momento, Arrieta y Bonacci ratificaron su pertenencia al espacio y su fidelidad al presidente, Javier Milei, sin embargo, dentro del bloque analizarían la idea de expulsarlas. La votación fue propuesta por Lorena Villaverde para definir la expulsión se realizará la semana que viene.