Petri desactivó la reforma del kirchnerismo que pretendió “democratizar” los Liceos Militares

El ministro de Defensa Luis Petri firmó una resolución que dio marcha atrás con la reforma que impulsó el kirchnerismo con el objetivo de “democratizar” los Liceos Militares, entidades educativas secundarias que dependen de las Fuerzas Armadas, y restableció programas educativos y de formación necesarios para que los egresados puedan integrar la Reserva del Ejército, la Armada Argentina y la Fuerza Aérea.

Según se informó en un comunicado, a partir de la nueva decisión, “estas instituciones educativas vuelven a cumplir con su misión primordial, que es proporcionar una educación integral que combina la formación académica de excelencia con la instrucción militar, inculcando valores cívicos y patrióticos, formando líderes que aprendan a tomar decisiones, a motivar y dirigir a otros y asumir responsabilidades en diferentes contextos”.

De acuerdo con el texto, al que accedió Infobae, se procedió a derogar resoluciones que habían introducido cambios que afectaban notoriamente la educación de los Liceos Militares, reduciendo su formación militar y desvirtuando el espíritu fundacional por el cual fueron creados. Cuando se puso en marcha la reforma, en el gobierno de Cristina Kirchner y que se profundizó en la gestión de Alberto Fernández, que pretendía “democratizar” esas instituciones, la comunidad de egresados y familiares que tuvieron paso por esas casas de estudios cuestionaron con dureza la decisión.

“Esta resolución recupera la esencia militar distintiva de estos institutos en el nivel medio, buscando desarrollar habilidades académicas, inculcar disciplina, potenciar la formación física y militar promoviendo el patriotismo y preparando a los jóvenes para la vida democrática. Además le otorga una mayor autonomía a las Fuerzas Armadas para definir aspectos como la estructura organizativa de los Liceos y los regímenes internos de los cadetes”, se indicó.

En ese sentido, uno de los factores clave que involucra esta medida es que se restablece el otorgamiento del Estado Militar para los cadetes de los dos últimos años y el régimen disciplinario tradicional en las formaciones los Liceístas, requerido por la nueva política de la Defensa, “asegurando así la formación de ciudadanos comprometidos con la defensa de la Nación y preparados para los desafíos del futuro”, se indicó.

El ministro de Defensa afirmó en un mensaje publicado en su cuenta oficial de X que “los Liceos Militares recuperan la excelencia educativa, la disciplina militar y la formación de líderes y futuros Oficiales de Reserva del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea. Además de mejorar su instrucción, con el Plan Liceos 2030 también lo adecuamos a las nuevas necesidades del sistema de defensa, sumando orientaciones como pilotos de drones o ciberdefensa”.

“Queremos que más jóvenes de nuestro país elijan formarse en los liceos y que tengan siempre las puertas abiertas de nuestras instituciones para servir a la Patria. El destrato también se termina en los Liceos”, consideró el funcionario.

La medida firmada por Petri tiene 10 artículos, incluido uno de forma, siete páginas en total, las seis primeras con los considerandos que detalla el recorrido que tuvo la avanzada del kirchnerismo contra los Liceos Militares. Desde eliminar prácticas de tiro, reemplazar el sistema disciplinario, establecer planes de estudios sin participación de las Fuerzas Armadas, cambiar el régimen de internado y sacar el Estado Militar o la integración de los egresados de la Fuerzas de Reserva, fueron algunas de las decisiones que se implementaron en el gobierno de Cristina Kirchner y que continuó Alberto Fernández.

Se trata de una reforma que se aplicó con el argumento de respetar los Derechos de Niños, que tuvieron críticas y la resistencia de la comunidad liceísta de todo el país, tanto las instituciones que dependen del Ejército, la Armada o la Aviación.

En la resolución que firmó Petri se estableció que “es necesario recuperar y asegurar la calidad educativa, sobre todo en lo referente a la formación e instrucción militar, adecuándose a la evolución de la tecnología y de los conocimientos” de esas instituciones, “por ello es necesario adaptar el sistema educativo para brindar a los cadetes de los Liceos Militares aquellos saberes que deberán dominar al momento de su egreso, como así también, aquellos conocimientos técnicos-profesionales, habilidades y destrezas que los capaciten para integrar la Reserva de las Fuerzas Armadas”.

“Es necesario recuperar los pilares fundacionales sobre los cuales, durante muchos años, se construyó la excelencia de la educación académica y militar de los Liceos Militares. El Estado Militar de los cadetes en los últimos años de formación, la adecuada y necesaria instrucción militar para asegurar sus competencias como Oficiales de la Reserva, la formación en valores éticos y ciudadanos propios de los hombres y mujeres que sirven a su Nación, el sentido de la responsabilidad y la disciplina en la ejecución de sus actos como norma de apego a la ley, constituyen ejes rectores a restablecer o preservar”, se indicó.

Y por eso se dispuso “dejar sin efecto el Plan Pedagógico 2030, y avanzar con un Proyecto Educativo Institucional reparador y superador para los Liceos Militares, que contemple una mejora en la calidad educativa sobre la base de lo anteriormente expuesto y que, por lo expresado hasta aquí, resulta evidente y de fácil comprensión que los Liceos Militares son institutos que en relación a sus educandos pertenecientes al nivel medio de formación que son identificados como cadetes, tienen dos objetivos principales, el primero es brindar los conocimientos necesarios y adecuados a un nivel secundario caracterizado por la excelencia educativa que prepare a sus cadetes para afrontar con éxito la próxima etapa de educación universitaria o terciaria y que el segundo de ellos es proporcionar los saberes, habilidades y destrezas que requieren las competencias que debe poseer la primera jerarquía de un Oficial que se integrará a la Reserva”.

Por eso, según la resolución, “es necesario y conveniente que los cadetes posean Estado Militar a partir del inicio del penúltimo año y hasta su egreso de estos institutos como Subtenientes, Guardiamarinas o Alféreces de la Reserva, según el Liceo Militar en el que hayan cursado su etapa de educación media, y que serán aplicables las normas generales propias del ámbito militar a casos concretos en los términos que fijan el plexo normativo jurídico vigente con las adecuaciones propias en lo relacionado con el comportamiento de los cadetes”.