El bloque de La Libertad Avanza busca dar por cerrada la discusión por la visita de seis diputados a represores a la cárcel de Ezeiza, pero la falta de respuesta del oficialismo y los dichos de algunos de los miembros de esa gira al penal reavivaron el repudio de diferentes sectores de la oposición que entienden que debería haber alguna sanción para los seis legisladores.
Ayer hubo una reunión de bloque de LLA en la que se buscó unificar un discurso y cerrar el debate. Sin embargo, los dichos de Lourdes Arrieta y Rocío Bonacci, dos de las diputadas que participaron del encuentro con Alfredo Astiz junto a Beltrán Benedit, Guillermo Montenegro, María Fernanda Araujo, y Alida Ferreyra, rompieron esa estrategia.
La primera hizo referencia a que nació a principios de los 90 y que no sabía quién era Astiz, pero luego avanzó con que la idea de esa visita fue para “conocer de primera mano” lo que sucedió en la última dictadura militar. Bonacci, por su parte, dijo que entendía que “Martín Menem y la Casa Rosada habían dado el ok” para ese encuentro.
En el caso del presidente de la Cámara, aseguró que desconocía esa visita y la Casa Rosada no dijo nada al respecto.
Esto hizo que el tema volviera a surgir en los bloques que reclamaban que la Presidencia de la Cámara aplique algún tipo de castigo. Y ante el silencio de las partes, ahora debaten si apoyan un proyecto de Unión por la Patria para sancionarlos.
El bloque radical ya definió su postura al señalar que si UP avanza en un apartamiento de reglamento en la próxima sesión -el miércoles 7 de agosto- con el fin de tratarlo, “seguramente se acompañará”.
Con los votos de UP -99 legisladores- más los 34 de la UCR y los legisladores del bloque de la izquierda ya tienen el número suficiente. Pero podría sumar más votos, mucho más teniendo en cuenta que el tema está resuelto.
Buena parte de los 16 diputados de Hacemos Coalición Federal también se sumaría, los de la Coalición Cívica lo están deliberando y en PRO la discusión está dividida. Buscarán una única posición de cara a la sesión del miércoles que viene y la pista la dio el jefe del bloque, Cristian Ritondo, quien primero pidió que sea el propio bloque el que sancione a los 6 legisladores y que, frente a la ausencia de algún tipo de medida, hizo saber que “no se va a proteger a nadie”.
Hay dos detalles a tener en cuenta. El primero es que UP si quiere avanzar tiene que pedir la conformación de la comisión, sin hacer referencia al expediente del proyecto de ley que presentó para sancionar a los libertarios. “Si piden por el expediente se entierran porque como no pasó por las comisiones no va a prosperar. Y ahí se dilata. Tienen que hacer como fue con el caso de Carlos Vivero y Fernando Iglesias”
En 2021, Iglesias denunció que Vivero lo quiso agredir en medio de una sesión. En ese momento se formó una comisión que investigó el caso y unos días más tarde dictaminó que Vivero tenía que pedir disculpas públicas por ese hecho.
Se evalúa nombrar una comisión que analizará el accionar de los diputados libertarios y si se les debe imponer una sanción. Este grupo debe tener cinco integrantes, en base al tamaño de los bloques.
“El problema va a ser que en se van a tirar con todo. Mientras el bloque de UP va a pedir sanción para los seis diputados, desde LLA seguro les van a responder con las elecciones de Venezuela. Se va a poner picante”, señaló un legislador de otra bancada.
El miércoles se definirá si hay sanciones o no y, en el caso de que existan, si son sólo suspensiones o hay alguna expulsión. UP busca castigar con mayor fuerza a Beltrán Benedit y Guillermo Montenegro, los organizadores de la visita a los represores. El reglamento prevé hasta la expulsión de la Cámara.