La situación diplomática entre Venezuela y Argentina llevó a su pico de máxima tensión. La relación entre ambos países está virtualmente rota, aunque en lo formal hay un hilo que habilita comunicaciones mínimas e indispensables. Mediante esos canales, Nicolás Maduro, líder del régimen chavista, ordenó a la Casa Rosada retirar los diplomáticos en la Embajada de Argentina en Caracas en un lapso de 72 horas. Eso generó presión para los seis venezolanos ligados a María Corina Machado asilados en la Embajada argentina en Caracas. Es que al quedar cerrada la sede diplomática, los dirigentes opositores deben irse. Es por eso que por estas horas, el Gobierno negocia una alternativa para trasladarlos a un país aliado.
Diana Mondino, canciller, y Leopoldo Sahores, vicecanciller, lideran las gestiones diplomáticas para destrabar la situación de los seis asilados en la residencia de la Embajada de Argentina en Caracas. Esta tarde se conoció un documento del régimen chavista en el que dio un plazo de 72 horas que que los diplomáticos argentinos se retiren de Venezuela.
Andrés Mangiarotti, encargado de Negocios de Argentina en Caracas, es quien lidera la delegación oficial que incluye cinco diplomáticos de carrera y dos agregados. El funcionario ultima detalles por estas horas para organizar el viaje y el cierre de la Embajada en el país caribeño. De no mediar inconvenientes, el jueves llegarían a Buenos Aires de regreso.
Maduro apeló a esa jugada para forzar el cierre de la Embajada de Argentina. A partir de esa situación, los seis venezolano asilados deben retirarse. Los dirigentes opositores asilados son Pedro Urruchurtu Noselli, Humberto Villalobos, Claudia Macero, Omar González, Fernando Martínez y Mottola Magalí Meda. Se trata de personas ligadas al equipo de campaña de los referentes opositores a Maduro, María Corina Machado y Edmundo González Urrutia.
Por estas horas, la Cancillería analiza dos escenarios. Evalúan la posibilidad de que los asilados sean recibidos por las embajadas de Paraguay o El Salvador, dos aliados de Argentina. El presidente Javier Milei tiene excelente relación con sus pares Santiago Peña y Nayib Bukele y hay comunicaciones con ambos países. En caso de no ser factible, el Gobierno explorará una tercera vía, con otra nación que pueda resguardar a los opositores venezolanos.
El Palacio San Martín se basa en las directivas de la Convención de Asilo Diplomático que establece cómo proceder en estos casos. Negocian por estas horas con los países miembros de ese organismo para coordinar un traslado de los asilados. La dificultad reside en que Maduro rompió relaciones con seis de las naciones integrantes. Entre ellas, Costa Rica, Panamá, Perú, República Dominicana y Uruguay.
El resto de los miembros que suscribieron esa Convención son la propia Venezuela, sede de la primera reunión en 1954, Guatemala, Haití, México, Brasil El Salvador y Paraguay. Los tres primeros son aliados de Caracas, mientras que el Palacio del Planalto tiene una postura equidistante. Si bien Lula Da Silva aún no se expresó públicamente sobre la transparencia de las elecciones del domingo, evita ejecutar un movimiento diplomático que lo deje plegado a Milei.
La Cancillería realizó gestiones ante Itamaraty para que Celso Amorín, enviado de Lula como “veedor” a las elecciones en Venezuela, interceda para lograr que Maduro aplaque el asedio sobre la sede de la Embajada argentina en Caracas. No obstante, Brasilia no dará asilo a los dirigentes ligados a Machado que son resguardados por el Gobierno libertario.
El artículo 19 de la Convención de Asilo Diplomático. Allí, se establece que “si por causa de ruptura de relaciones el representante diplomático que ha otorgado el asilo debe abandonar el Estado territorial, saldrá aquel con los asilados”. Es decir, la delegación argentina debe dejar la Embajada junto con los opositores venezolanos. Pero para se debe coordinar la logística.
En la segunda parte del mismo artículo, la Convención detalla cómo ejecutar ese procedimiento en cada escenario. “Si lo establecido en el inciso anterior no fuere posible por motivos ajenos a la voluntad de los asilados o del agente diplomático, deberá éste entregarlos a la representación de un tercer Estado Parte en esta Convención, con las garantías establecidas en ella. Si esto ultimo tampoco fuere posible, deberá entregarlos a un Estado que no sea Parte y que convenga en mantener el asilo. El Estado territorial deberá respetar dicho asilo”, dispone el articulado.
Mientras tanto, Mondino se prepara para volar esta noche a Estados Unidos, para participar en la sesión de la Organización de Estados Americanos (OEA) con objeto de tratar la situación de Venezuela. La canciller irá a desconocer el resultado de las elecciones, despotricará contra Maduro y exigirá transparentar el escrutinio. En Washington se sumará Sonia Cavallo, la representante de Argentina en ese organismo internacional.
Por el plazo que dispuso Caracas para retirar a los diplomáticos argentinos, el Gobierno tiene hasta última hora de mañana para resolver qué hacer con los seis venezolanos asilados.
Cabe recordar que en medio de la tensión entre Milei y Maduro, líder del régimen de Venezuela, el Gobierno caribeño comenzó ayer un asedio a la residencia de la Embajada de Argentina en Caracas. Como contó Infobae, uno de los asilados denunció esta mañana que les cortaron el suministro eléctrico como forma de amedrentarlos.
“URGENTE!!! Funcionarios de Corpoelec acaban de cortar el suministro eléctrico en la residencia de la embajada de Argentina en Caracas, donde nos encontramos los 6 asilados” de la oposición, denunció Pedro Urruchurtu Noselli, coordinador nacional de campaña de Macharo y González Urrutia, a través de sus redes sociales.
Respecto a los asilados por Argentina, el Gobierno de Milei les dio resguardo político en marzo. Los dirigentes venezolanos habían recibido amenazas de Maduro. Desde entonces, no se pueden mover de la sede diplomática argentina. Desde hace meses, la Cancillería negocia un “salvoconducto” para poder sacar del país a esas personas. Pero el chavismo lo rechazó una y otra vez. El último intento fallido lo hizo Mondino el fin de semana.
Mientras tanto, los referentes de la oposición venezolana que residen en Argentina organizaron una movilización para hoy a las 19. Será frente a la Embajada de Venezuela en Buenos Aires, en el barrio de Palermo, con el formado de Asamblea ciudadana. Fue convocada por dirigentes como Adriana Flores Márquez, Elisa Trotta, ex embajadora de Juan Guaidó, y Richard Blanco, diputado de la Asamblea Nacional asilado en Argentina.