En su viaje a Francia, el presidente Javier Milei llevará adelante una amplia agenda de asuntos para conversar con su par de ese país, Emmanuel Macron, entre los cuales están las posibles inversiones en la Argentina, pero también las denominadas Sociedades Anónimas Deportivas (SAD), que permiten que los clubes de fútbol pasen a estar manejados por el sector privado.
Además, el encuentro, a las 6 de la mañana de Argentina, se da en el marco de las conversaciones que la Casa Rosada viene manteniendo con los principales organismos multilaterales, como el Banco Mundial, el Club de París y el Fondo Monetario Internacional, en los que el gobierno francés tiene influencia.
El líder libertario será uno de los pocos privilegiados que recibirá Macron de manera personal en el marco de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos, a la cual asistirán cerca de 170 jefes de Estado de distintos países.
El presidente francés, a quien ya vio en la cumbre del G7, en Italia, viene de sufrir una dura derrota en las elecciones legislativas de este año, en las que su partido terminó en segundo lugar, por detrás del Nuevo Frente Popular (NFP) pero logrando superar a Agrupación Nacional (RN), de Marine Le Pen.
A pesar de las diferencias ideológicas, los gobiernos de ambos países mantienen una buena relación, en gran medida por el embajador de la administración libertaria en París, Ian Sielecki, quien trabajó en la campaña que llevó a Macron al poder.
De hecho, en el marco de este viaje, Milei le pidió a su anfitrión que lo lleve a ver un partido del Olympique de Marsella, del cual es hincha el líder europeo, aunque finalmente no ocurrirá esa actividad por problemas de agenda.
Uno de los puntos que tratarán los mandatarios durante su encuentro del próximo viernes serán las inversiones: el gobierno argentino confía en que se incrementen a partir de la sanción de la Ley Bases y, sobre todo, del RIGI.
El lunes, el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, mantuvo un encuentro en la Embajada de Francia en Buenos Aires con un importante grupo de empresarios franceses que invierten en diferentes sectores en el país. “Excelente reunión”, resumió el funcionario al respecto.
A principios de este mes, sin ir más lejos, la filial local de la compañía Eramet inauguró junto a una firma china la planta de producción de litio del proyecto Centenario Ratones, ubicado en Salta, para la que desembolsaron unos 800 millones de dólares.
Para seguir con este objetivo de las inversiones, sin embargo, será importante el resultado que puedan llegar a tener las negociaciones por el eventual acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea, al que Macron se opone públicamente.
Si bien su par libertario no mira con buenos ojos al bloque regional sudamericano, al que incluso cuestionó en alguna oportunidad, la firma de ese arreglo de libre comercio es algo con lo que su administración no está en desacuerdo.
Por otra parte, la bilateral se dará luego de que la Argentina haya pedido incorporarse formalmente a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y, más recientemente, a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), dos instituciones en las cuales Francia es un actor relevante.
De acuerdo con lo que precisaron a Infobae fuentes oficiales, el Presidente partirá el miércoles por la noche a las 22.30 en un avión privado y acompañado de su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei. Una vez allá, se encontrarán con el secretario de Ambiente, Turismo y Deporte, Daniel Scioli.
Quien no participará del viaje es la canciller, Diana Mondino, en medio de los rumores sobre su continuidad en el Gabinete que, no obstante, es negada por los principales colaboradores del mandatario nacional.
Si bien la agenda completa sigue siendo reservada, se espera que Milei pueda dialogar también con Macron sobre la deuda que la Argentina tiene con el Club de París, o los avances técnicos para préstamos con el Banco Mundial y el FMI.
El libertario se reunió con las máximas autoridades de estos dos últimos organismos multilaterales de crédito en la Cumbre de Líderes del G7, que se realizó a mediados de junio en el complejo hotelero Borgo Egnazia, en el sur de Italia.
El Palacio del Elíseo tiene gran influencia en ambas entidades, pero también tiene intenciones de que la Casa Rosada cumpla con los pagos al Club de París como hizo en mayo pasado para cancela el swap de monedas con el Banco Popular de China.
Luego de ese encuentro con el presidente galo, a las 6.50 de nuestro país (5 horas más en París) Milei se reunirá con empresarios franceses. A la tarde participará de una recepción que brindará Macron y por la noche será parte de la inauguración de los Juegos Olímpicos. El sábado emprenderá el regreso a Buenos Aires en un vuelo que hará escala en Asunción y que arribará a las 21.
Las Sociedades Anónimas Deportivas
Otro de los asuntos que se tratarán durante la reunión del viernes, de acuerdo con lo que pudo saber Infobae de fuentes calificadas, tiene que ver con una iniciativa que el Gobierno está intentando instalar en la agenda local: las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD).
En una reciente conferencia de prensa que dio en la Casa Rosada, el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, puso como uno de los ejemplos de éxito de este sistema al Paris Saint-Germain (PSG), equipo que juega, justamente, en la League 1 francesa y cuyo presidente es el empresario catarí Nasser Al-Khelaïfi.
Este conjunto, en realidad, es propiedad de Qatar Investment Authority, un fondo de inversión que lo adquirió en el 2011, cuando la escuadra venía de atravesar una crisis financiera y deportiva que casi la llevan al descenso unos años antes.
Hace una semana, la Inspección General de Justicia (IGJ) autorizó la transformación de las instituciones deportivas en Sociedades Anónimas, desestimando así algunas quejas presentadas por distintas organizaciones en contra del Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 de desregulación de la economía, que Milei firmó apenas asumió en el Gobierno y que ya permitía la entrada de capitales privados en el fútbol.
De esta manera, a partir del próximo 1 de noviembre, los clubes tendrán la posibilidad de elegir si cambiar o no sus estatutos para que las empresas puedan adquirir acciones, algo que el titular de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio “Chiqui” Tapia, ya cuestionó.
“Si la AFA se opone a las Asociaciones Anónimas Deportivas, ¿por qué motivo permite que el plantel titular provenga de estas sociedades? ¿Acaso será que los resultados son importantes y las SADs tienen a los mejores? No más socialismo pobrista en el fútbol”, respondió Milei al respecto.
En ese mensaje, que publicó en su cuenta de X, el mandatario nacional compartió una imagen en la que se ve que los principales jugadores del plantel campeón del Mundo y, más recientemente, de la Copa América, provienen de instituciones con fondos privados.
Este será uno de los principales temas de los que conversará el Presidente en su reunión del próximo viernes con Macron, ya que en Francia desde hace décadas rige un sistema similar al que quiere implementar la administración libertaria en la Argentina.
Puntualmente, en ese país se admiten tres modelos, la Sociedad deportiva unipersonal a responsabilidad limitada; la Sociedad anónima con objeto deportivo (SAOS) y la Sociedad anónima deportiva profesional (SADP), aunque esta última fue la más utilizada.
En rigor, esa figura permite una “co-gestión”, de manera tal que la asociación civil que dio origen al club continúe ejerciendo cierta autoridad, pero delegue en el sector privado la cuestión profesional y comercial.
El presidente Milei no podrá ver el partido del Olimpique de Marsella junto a Macron porque el evento deportivo está previsto para el sábado al mediodía, pero el jefe de Estado tiene previsto regresar a Buenos Aires antes del domingo, para poder brindar un discurso en el acto de la Exposición Rural.
Por último, la visita llegará tan solo unos días después del conflicto diplomático que se desató por un comentario que hizo en las redes sociales la vicepresidenta, Victoria Villarruel, y que motivó el malestar en la Casa Rosada con la titular del Senado.
“No fue un tuit oportuno, y mucho menos sabiendo que está a punto de ir a París a reunirse con Macron”, señaló un colaborador de extrema confianza del jefe de Estado, quien, no obstante, sostuvo que el problema ”ya pasó”.