Javier Milei recibió durante una hora esta tarde en la Casa Rosada al presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, que había deslizado incomodidad con el faltazo de su par argentino al encuentro de los mandatarios del Mercosur en el inicio de este mes. El encuentro bilateral, donde estuvieron a solas, se llevó en buenos términos, aunque la conversación se mantuvo estricto hermetismo y la Presidencia demoró en publicar una foto.
En la previa, el vocero presidencial, Manuel Adorni, había desestimado durante su conferencia de prensa de la mañana que hubiera motivos de resquemor entre ambos por un comentario que emitió el mandatario uruguayo hace diez días, cuando Milei decidió no asistir a la Cumbre del Mercosur en medio de las tensiones con el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva. “Acá deberíamos estar todos los presidentes (...) No solo importa el mensaje, es muy importante el mensajero”, había dicho el jefe de Estado vecino.
En la Casa Rosada negaban que el enfrentamiento con Lula hubiera provocado la ausencia de Milei en la cumbre del bloque regional. Aunque quizá el remedio haya sido peor que la enfermedad, porque deslizaban que en realidad faltó porque el Mercosur “lo tiene sin cuidado” y no lo considera determinante para las relaciones internacionales y comerciales de la Argentina.
El tema de la relación de Milei con los socios regionales era uno de los que estaban en la agenda para el encuentro de hoy, pero en Gobierno no informaron qué se dijeron por esa preocupación. Tampoco el mandatario uruguayo hizo mayores comentarios, y al dejar Balcarce 50, sólo deslizó: “Nos fue muy bien”. Había llegado acompañado por el embajador, Carlos Enciso, que sin embargo lo esperó afuera mientras hablaba con Milei en su despacho.
Poco después del final del encuentro diplomático, pasadas las 17, el gobierno de Lacalle Pou difundió una imagen que los muestra a ambos durante la charla, donde se ve al par oriental descontracturado, y a Milei muy serio. La Presidencia tardó bastante más en entregar una foto a la prensa. Eligieron una composición informal, que los exhibe en movimiento, por saludarse.
Esta fue la primera reunión bilateral entre ambos jefes de Estado, y se gestó por pedido del gobierno uruguayo. La canciller, Diana Mondino, no sólo no participó, sino que no intervino para que se generara la reunión. “No hacía falta, era obvio que si venía a la Argentina iba a reunirse con Javier”, dijeron en el Palacio San Martín.
Lacalle Pou viajó al país para participar del encuentro internacional se realizará en el hotel Hilton de Puerto Madero desde hoy por los 30 años del atentado a la AMIA. Y Milei también participará de esa ceremonia que organiza la DAIA -junto con su jefe de Gabinete, Guillermo Francos- por lo que volverá a cruzarse allí con su par uruguayo. Antes de ver al jefe del Partido Nacional, Milei había recibido las Cartas Credenciales de la Embajadora de la República del Paraguay, Helena Felip, en el Salón Blanco de la Casa Rosada. Y, según pudo confirmar Infobae, en el Hilton el jefe de Estado argentina tendrá una reunión bilateral el paraguayo Santiago Peña.
Más que con los países vecinos, hasta ahora Milei mostró mayor interés por su relación con los de otros continentes. Viajó reiteradas veces a Estados Unidos, estuvo en Israel, y en distintos países de Europa, mientras los socios argentinos reclaman mayor compromiso con la región. Se verá si el novedoso acercamiento de hoy con uno de los líderes relativamente afines a sus ideas liberales, así como la charla con Peña sirven a los fines de mejorar la predisposición del Presidente en ese sentido.