En los últimos días, Javier Milei abrió dos nuevos focos de tensión diplomática por repudiar “la falsa denuncia de golpe de Estado” en Bolivia realizada por Luis Arce, y ratificar sus calificativos de “corrupto” y “comunista” contra su par de Brasil, Lula da Silva. Ahora, en las últimas horas, el Presidente replicó las críticas con una publicación en las redes sociales que tituló como “El perfecto dinosaurio idiota”.
“Se conoce el fraude montado en Bolivia y el perfecto idiota, en lugar de aceptar su error, me critica por dejar su estupidez a la vista”, sostuvo Milei. A su vez, agregó: “Luego de las agresiones de Lula (en especial su fuerte interferencia en la campaña electoral y apoyo sólido a la campaña más sucia de la historia) se queja porque le respondo con verdad (ha estado preso por corrupción y es comunista)”.
En el caso de Bolivia, el pasado fin de semana la Casa Rosada se alineó al exmandatario Evo Morales, quien manifestó que el alzamiento militar del destituido jefe militar Juan José Zuñiga contra el gobierno boliviano fue un “autogolpe”. “La Oficina del Presidente repudia la falsa denuncia de golpe de Estado realizada por el gobierno de Bolivia el día miércoles 26 de junio, y confirmada como fraudulenta en el día de la fecha”, se señaló en el texto.
Este posicionamiento hizo que Luis Arce llame a consultas a su embajador en Argentina, Ramiro Tapia. El gobierno boliviano condenó por “inamistosas y temerarias” las declaraciones de Casa Rosada y denunció “un negacionismo inaceptable”. A su vez, la ministra y portavoz de la presidencia, María Nela Prada, convocó al representante diplomático argentino, Marcelo Massoni.
En relación con Brasil, Milei mantiene un enfrentamiento ideológico con Lula, a quien criticó en reiteradas oportunidades, inclusive antes de asumir como Presidente. En las últimas horas, el mandatario argentino desistió de participar de la cumbre del Mercosur, que se realizará en Asunción el próximo lunes 8 de julio, para evitar un cruce con un par brasileño, que le había exigido “disculpas por decir tonterías”.
En su lugar, ayer se confirmó que el Presidente sí viajará a Brasil, pero para participar de un evento junto a Jair Bolsonaro. Se trata de la Conferencia de Acción Política Conservadora, CPAC, en la ciudad balnearia de Camboriú.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, confirmó ayer que “por cuestiones de agenda no va a ir a la cumbre del Mercosur, como tenía previsto días atrás”, para evitar “una sobrecarga en la agenda”. Es que el lunes próximo está previsto el inicio, a la medianoche, de la vigilia previa al Pacto de Mayo, que se firmará en Tucumán.
El hijo de Bolsonaro, Eduardo, también confirmó el viaje del mandatario argentino: “Conversé ahora con el presidente de Argentina, Javier Milei, quien confirmó que vendrá al CPAC (Conferencia de Política de Acción Conservadora) de Brasil”, indicó en sus redes, y anticipó que es muy probable que se reúna con Jair. También compartió la imagen oficial que ratifica la presencia del Jefe de Estado en el mencionado evento.
Entre los oradores del encuentro, que empezará el sábado y concluirá el domingo, participarán como oradores gobernadores, diputados y líderes brasileños, pero también dirigentes de derecha de América Latina, como el mexicano Eduardo Verásategui y el chileno José María Kast.
Milei ya ha viajado a otros congresos conservadores, entre ellos uno en Estados Unidos, donde conoció al expresidente y ahora precandidato a ocupar la Casa Blanca Donald Trump.
También asistió a otro organizado en España por el partido ultraderechista VOX, en el que acabó criticando al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y a su esposa, Begoña Gómez, lo cual generó una crisis diplomática entre ambos países.
Sería la primera visita de Milei a Brasil desde que asumió el poder, en diciembre del año pasado. El líder libertario no ha tenido hasta ahora ningún encuentro privado con Lula da Silva, con quien ni siquiera ha conversado por teléfono.