Cada vez más alumnos de cuarto grado, durante el acto de jura de fidelidad a la Bandera Nacional, deciden sumar a la ceremonia la “wenufoye”, el emblema mapuche, como símbolo de interculturalidad.
En más de 50 establecimientos educativos de Río Negro y en unos 30 de Neuquén, la “Wenufoye” fue presentada durante los actos conmemorativos en el aniversario de la muerte del general Manuel Belgrano.
Aunque no se trata estrictamente de una jura a la bandera mapuche, es evidente la intención de equiparación, alentada además por grupos que, con el argumento de la “preexistencia” mantienen un discurso de desconocimiento y hasta de desafío a la soberanía del Estado argentino.
Buscando minimizar esto, Orlando Carriqueo, referente de la Coordinadora del Pueblo Mapuche en Río Negro, dijo que se trataba de una demostración de “interculturalidad”. “Tiene que ver con una cuestión identitaria, que está presente en la Constitución nacional”, agregó.
Carriqueo dijo que de este modo “se plantea que hay otras identidades que son innegables en el país, tal como lo establecen las leyes educativas nacionales y provinciales”.
La inclusión de la “wenufoye” forma parte de la celebración del año nuevo mapuche, conocido como Wüñoy Txipantü, en el marco de la cual se realizan otras actividades que se extienden durante varios días.
En Bariloche, la bandera mapuche ocupa espacios preponderantes en distintos actos gubernamentales, a partir de que la ciudad fue declarada en 2015 como “municipio intercultural”.
Sin embargo, la inclusión de la bandera mapuche en los actos patrios ha sido objeto de muchos cuestionamientos; entre otros argumentos, porque implica una “desvalorización de la insignia nacional”.
En 2021, hubo una polémica de alcance nacional cuando en Neuquén las autoridades educativas de la escuela 182 incluyeron la bandera mapuche durante la ceremonia de jura a la bandera. El entonces concejal de la ciudad petrolera Marcelo Bermúdez expresó su indignación luego del acto y argumentó que “no son banderas equivalentes, ya que la Argentina representa al Estado Nacional y la mapuche a su pueblo”.
La presentación de la bandera mapuche sí es habitual en colegios interculturales insertos en contextos rurales de Río Negro, aunque en los últimos años se sumaron otros establecimientos ajenos a esa modalidad. Alumnos de Ingeniero Jacobacci, Viedma, Bariloche, General Roca, Maquinchao y Cervantes la exhibieron durante el reciente acto patrio.
En 2022, en Bariloche, hubo una polémica similar cuando agrupaciones mapuches – conformadas por docentes, alumnos y personal administrativo - izaron la bandera mapuche en la sede local de la Universidad Nacional del Comahue. El acto, incluso, tuvo el acompañamiento de las máximas autoridades de la casa de estudios. La ceremonia incluyó discursos en mapuzungun –lengua mapuche- y fue considerada como una “provocación”, teniendo en cuenta que tuvo lugar cuando promediaba el conflicto de Villa Mascardi, donde agrupaciones autoproclamadas mapuches usurpaban tierras fiscales y vandalizaban propiedades públicas y privadas.
Horacio Antillanca, trabajador no docente de la Universidad, tomó la palabra para defender la causa y recordar que la bandera los representa. “No le pedimos permiso al papá Estado para darle sentido a este símbolo político del pueblo mapuche de un lado y del otro de la cordillera. Somos una nación preexistente al estado nacional argentino”, justificó desafiante.
El entonces Auditor General de la Nación y actual diputado nacional, Miguel Ángel Pichetto, criticó la convocatoria ala que calificó de flagrante acto de provocación al territorio nacional argentino. “Repudio fuertemente las acciones de la Universidad Nacional del Comahue. Realizarán un ‘acto de soberanía política-cultural’ de un país mapuche. Izarán la bandera con la que se identifican estos grupos. Es una provocación a la soberanía de la Argentina”, publicó en las redes sociales.
Las autoridades de la casa de estudios decretaron dos días de asueto para permitir que quienes están identificados con el pueblo mapuche puedan participar de los festejos por el año nuevo, de acuerdo a lo que establece una ordenanza firmada en 2019.
En aquel entonces el legislador rionegrino Juan Martín denunció a las autoridades universitarias ante la Justicia Federal por el respaldo institucional “al reclamo separatista del Wallmapu”. Para el legislador, que radicó su presentación en la Fiscalía Federal de Primera Instancia de la ciudad de General Roca, los denunciados habrían cometido los delitos de mal desempeño de sus funciones, malversación, incumplimiento de los deberes de funcionario público y conspiración.
En su denuncia, Martín subrayó: “Esto constituye ni más ni menos que un intento de establecer un país independiente dentro de la Argentina, algo que atenta contra nuestro territorio y nuestra soberanía, y que de ninguna manera puede admitirse, mucho menos apoyarse desde una institución estatal”.
Asimismo, afirmó que “la Universidad Nacional del Comahue, copada por elementos de ultraizquierda, está usando el dinero de los argentinos para promover una reivindicación contraria a los intereses nacionales que, como vemos en Chile, incluso puede llegar a la insurrección armada”.