La derogación de la Ley de Lemas en Santa Cruz dio ayer un paso importante en la legislatura provincial. La Comisión de Asuntos Constitucionales logró emitir un dictamen de mayoría para el proyecto de Ley presentado por el Ejecutivo Provincial, a pesar del rechazo del diputado de Unión por la Patria, Eloy Echazú. Ahora, la propuesta continuará su tratamiento en comisiones este martes, con la intención del oficialismo de aprobarla en la próxima sesión, prevista para el jueves.
La Ley de Lemas, vigente desde hace más de tres décadas en Santa Cruz, ha sido objeto de críticas y cuestionamientos. Su derogación fue uno de los compromisos de campaña del gobernador Claudio Vidal. Este sistema electoral, oficialmente conocido como sistema de doble voto simultáneo y acumulativo, permite que cada partido o alianza constituya un lema, compuesto a su vez por sublemas o listas internas. En el escrutinio, se suma el total de votos de cada sublema, resultando electo el candidato del lema con más sufragios, lo que ha generado controversias al distorsionar, según sus críticos, la voluntad popular.
Durante la reunión de la Comisión de Asuntos Constitucionales, el proyecto recibió el respaldo de los diputados Fernando Españón, Piero Bofi, José Quiroga y Pedro Muñoz. Sin embargo, Eloy Echazú, presidente del Bloque de Unión por la Patria, no acompañó la iniciativa. El dictamen aprobado propone derogar la Ley Provincial N° 2.052 y sus modificatorias, y adherir al Código Electoral Nacional y a la Ley Nacional N° 26.571.
Claudio Vidal ha criticado duramente el sistema electoral vigente. “Hemos visto cómo se ha ido derrumbando el sistema de representación democrática, cuyo objetivo fundamental parecía ser la perpetuidad en el poder, desvirtuando el sistema de representación directa y la participación ciudadana en los partidos políticos”, señaló el gobernador. Además, sostuvo que “se trata de un sistema distorsivo de la voluntad popular, que ha mutado a medida de los dirigentes y partidos políticos, degradando el proceso electivo hasta convertirse en una estafa para los votantes santacruceños”.
El diputado Pedro Muñoz, de la Coalición Cívica ARI, afirmó que la derogación de la Ley de Lemas “marcará el fin definitivo de esta práctica que ha generado corrupción y desconfianza en el sistema electoral de nuestra provincia, y es un triunfo de toda la ciudadanía”.
La Ley de Lemas no solo ha sido cuestionada por la oposición, sino que también fue denunciada por su inconstitucionalidad. Incluso llegó a la Corte Suprema de Justicia, que evitó expresarse argumentando que se trataba de una norma que debía resolverse por los canales institucionales de la provincia.
Lejos de ser una prioridad para todos los sectores políticos, algunos dirigentes han expresado que acompañarán la derogación pese a sus reservas. Según declaraciones de Fabián Leguizamón, vicegobernador de Santa Cruz, tras el dictamen favorable, “algunos nos creyeron y otros no tanto, pero cumplimos con el compromiso de terminar con la Ley de Lemas. Asumimos en campaña junto al gobernador Claudio Vidal, derogarla sin especulaciones y hoy se inició el camino. Con la mayoría de los Diputados de Santa Cruz lograremos poner fin a este sistema electoral”.
El proyecto de derogación deberá pasar por las comisiones de Asuntos Municipales y Legislación General antes de llegar al recinto. La intención del oficialismo es tratarlo en la próxima sesión legislativa. Según indican fuentes cercanas al proceso, esta derogación no solo responde a un compromiso de campaña, sino también a un acuerdo programático firmado por los diversos sectores que integraron el Frente Electoral que llevó a Vidal a la gobernación.
El oficialismo tiene como objetivo terminar con un sistema que, según sus detractores, ha distorsionado la voluntad popular y permitido que resulten electos candidatos que no han alcanzado la mayoría de los votos. De concretarse, Santa Cruz adheriría al Código Electoral Nacional y a la Ley Nacional N° 26.571 de Democratización de la Representación Política, Transparencia y Equidad Electoral. La aprobación de esta derogación significaría un cambio significativo en el panorama político y electoral de la provincia.