La nueva estructura que el Gobierno piensa a largo plazo para la Jefatura de Gabinete

Las autoridades creen que el organismo “está mal diseñado desde la nefasta reforma constitucional” y planean una modificación a futuro para que las personas en ese cargo tengan menos funciones

Guardar

Nuevo

El oficialismo quiere que el jefe de Gabinete tenga un rol diferente (iStock)
El oficialismo quiere que el jefe de Gabinete tenga un rol diferente (iStock)

La visión que tiene el actual Gobierno respecto de todas las funciones del Estado es radicalmente diferente a la de las anteriores gestiones, partiendo de la base de que Javier Miei es el primer presidente libertario de la historia y considera que la administración pública es, por definición, siempre ineficiente y se debe limitar a aspectos muy reducidos de la organización social o, incluso, desaparecer.

Bajo esa premisa, las autoridades nacionales vienen llevando adelante un plan a corto y mediano plazo para achicar la estructura del Poder Ejecutivo, que comenzó con la eliminación de varios Ministerios y Secretarías, así como también de entidades descentralizadas y la unificación de otras.

Más recientemente, y tras la salida de quien era el jefe de Gabinete Nicolás Posse y la asunción den su reemplazante, Guillermo Francos, Milei comenzó un proceso de reorganización que involucra a todos sus funcionarios y que va a culminar con el ingreso a la Casa Rosada de Federico Sturzenegger, que será el encargado de llevar adelante la desregulación de la economía.

Para las autoridades nacionales, la Jefatura de Gabinete es una cartera que “está mal diseñada desde que se creó, a partir de la nefasta reforma de la Constitución de 1994″, según explicó un estrecho colaborador del Presidente.

Sturzenegger se sumará próximamente al Gobierno (REUTERS/Matias Baglietto)
Sturzenegger se sumará próximamente al Gobierno (REUTERS/Matias Baglietto)

Según la Carta Magna, a la persona que ocupe ese cargo, la cual tendrá “responsabilidad política ante el Congreso de la Nación”, le corresponden, entre otros puntos, “ejercer la administración general del país”, “efectuar los nombramientos de los empleados de la administración” y “hacer recaudar las rentas de la Nación y ejecutar la ley de Presupuesto”.

Sin embargo, en el Gobierno consideran que en los últimos años, e incluso durante la gestión de Posse, el jefe de Gabinete tuvo aún más atribuciones de las que se establecieron constitucionalmente, ya que también tenía bajo su ala distintas secretarías, organismos y empresas públicas.

A partir de la jura de Francos en su nuevo rol, el Presidente ordenó que la cartera deje de tener tanto poder y que muchas de las tareas que tiene hasta el momento pasen a los Ministerios a los que correspondan, con el objetivo de agilizar el trabajo.

Sin embargo, y a pesar de esta idea, el nuevo jefe de Gabinete seguirá teniendo el control de los asuntos vinculados con Interior, con la ayuda de Lisandro Catalán, y de las cuestiones políticas, asistido por José “Cochi” Rolandi, quienes fueron designados vices jefes de Gabinete.

Asimismo, si bien todavía se está analizando la nueva estructura que tendrá el Estado, en principio el funcionario continuará al mando de las empresas públicas hasta que se logren privatizar, como así también de algunas áreas y organismos.

Guillermo Francos reemplazó a Nicolás Posse (REUTERS/Agustin Marcarian)
Guillermo Francos reemplazó a Nicolás Posse (REUTERS/Agustin Marcarian)

A largo plazo, el objetivo del Gobierno es que el jefe de Gabinete se ocupe pura y exclusivamente de coordinar el trabajo de los ministros y ser un interlocutor entre ellos y el Presidente, además de rendir cuentas periódicamente ante el Congreso y todas las demás obligaciones que marca la Constitución.

De esta manera, todo aquello que no figure como un mandato para la persona que esté en ese puesto, será trasladado a los sectores que correspondan, como es el caso de inteligencia, que volverá a responder al mandatario nacional.

Esta decisión se dio también luego del supuesto espionaje a miembros del Poder Ejecutivo por parte de Posse y del ex interventor de la AFI, Silvestre Sívori, que en la Casa Rosada no niegan, pero tampoco afirman: “Es algo que tendrá que investigar la Justicia y lo que ellos digan, será lo que habrá pasado”, argumentó un importante referente de esta administración.

Por lo pronto, en las próximas horas se anunciará en el Boletín Oficial la designación al frente de la agencia de inteligencia de Sergio Neiffert, un dirigente del municipio de Malvinas Argentinas que se desempeña como representante del Poder Ejecutivo ante la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR),

Cercano a Santiago Caputo, el futuro interventor de ese organismo volverá a reportar al Presidente, algo que técnicamente también ocurría con Sívori, quien, sin embargo, en la práctica se reunió siempre con Posse, aquel que lo incorporó a las filas de La Libertad Avanza en el 2023.

El interventor de la AFI volverá a reportar directamente al Presidente
El interventor de la AFI volverá a reportar directamente al Presidente

Con todas estas medidas, y las que podrían venir, el Gobierno quiere que la Jefatura de Gabinete tenga funciones mucho más limitadas, aunque Francos continúa resolviendo varios de los problemas cotidianos de la gestión y mostrándose como la figura política del oficialismo.

De hecho, este martes almorzó con la cúpula de la Unión Industrial Argentina (UIA), encabezada por Daniel Funes de Rioja, que le expresó el apoyo del sector a la Ley Bases y le reclamó por iniciativas que ayuden a las pymes y a recuperar la actividad y aumentar las exportaciones industriales con valor agregado.

En tanto, este miércoles tiene previsto recibir a un gobernador patagónico, en el marco de la expectativa por la votación en el Senado de las reformas enviadas por el Poder Ejecutivo, que Milei considera fundamentales para poder avanzar con mayor rapidez en su plan económico.

Cuando todavía era ministro del Interior, Francos ya se había puesto a la cabeza de las negociaciones con la oposición para intentar que el Congreso apruebe tanto ese proyecto como el paquete fiscal, algo que seguirá haciendo desde su nuevo rol. Incluso, el jefe de Gabinete no tiene pensado mudarse a la oficina que ocupaba Posse en el segundo piso de la Casa Rosada, sino que se quedará en su actual despacho, en la planta baja, frente al Patio de las Palmeras.

Guardar

Nuevo

Últimas Noticias