Bajo un manto de tensión que se extenderá hasta el último minuto, las comisiones de Legislación General; Presupuesto y Hacienda; y Asuntos Constitucionales del Senado reanudarán, durante la tarde de hoy, los debates de la Ley Bases y el paquete fiscal, con un oficialismo que sueña con firmar dictámenes y una oposición dialoguista que continuaba anoche con bandejas de indefiniciones aún no saldadas.
El primer asunto a tratar por el plenario será la Ley Bases, desde las 15. En tanto, dos horas más tarde se espera que la de Presupuesto y Hacienda, que comanda el jefe del oficialismo en la Cámara alta, Ezequiel Atauche, intente avanzar con el despacho del paquete fiscal.
La reactivación de las discusiones se dará luego de la cumbre de ayer entre la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel; y el flamante jefe de Gabinete, Guillermo Francos, con los jefes de bloque de la oposición “dialoguista”.
En el convite se blindó un entendimiento sobre modificaciones que se aplicarán en ambas iniciativas. No obstante, las frenéticas bilaterales que tuvieron lugar durante la tarde de ayer dejaron en claro que un puñado de legisladores con firmas clave en las comisiones no dieron por cerrado ningún acuerdo y se alejaban anoche de un entendimiento final, como detalló Infobae.
Alertas y guiños
De cara al plenario de este miércoles, hay varios ítems en puja. Por caso, hay una reciente alarma por una potencial definición nueva que aparece en el capítulo laboral y que quitaría, como protección, a los convenios colectivos de trabajo. Algunos interpretan que ello fomentaría una precarización encubierta.
Por otra parte, la puja por el Monotributo Social quedaría atada a la moneda al aire de la reglamentación de la ley, lo cual genera desconfianza. También hay quejas por haber disminuido, de cinco a tres, la posibilidad de tener colaboradores sin que los mismos estén en relación de dependencia.
La reinstauración de Ganancias está al borde del nocaut, aunque el mejor escenario es que la misma no sea rechazada con dos tercios de los votos y que su suerte sea repensada, en una segunda revisión, en Diputados. Algunas mejoras a favor de la industria protegida de Tierra del Fuego y deducciones de créditos hipotecarios amortiguarían el golpe.
En cuanto al blanqueo, aún no hay respuestas sobre extranjeros, aunque aterrizaron guiños sobre familiares y la imposibilidad de criptomonedas, entre otras cuestiones. Todavía restan pulir artículos aceitosos que podrían generar inconvenientes.
Un área compleja en las negociaciones es la del Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI): un puñado de concesiones para el plano local apaciguarían críticas, pero persisten artículos que son rechazados no sólo por el kirchnerismo, sino por varios dialoguistas.
Entre las observaciones sin solución posible se encuentran la eventual privatización de Aerolíneas Argentinas y Correo Argentino; las facultades delegadas, el capítulo que reformula los procedimientos administrativos; y la desactivación de la moratoria previsional.
Números y firmas
*La comisión de Presupuesto y Hacienda (Atauche) tiene 17 integrantes, de los cuales 10 son del oficialismo y la oposición dialoguista; el resto, del kirchnerismo.
*Misma situación corre la de Legislación General -cabecera de debate de la ley Bases-, que maneja el presidente provisional de la Cámara alta, Bartolomé Abdala.
*La de Asuntos Constitucionales está liderada por el peronista disidente Edgardo Kueider y cuenta con 19 integrantes: 11 del oficialismo y la oposición dialoguista, y ocho kirchneristas.
Para que un dictamen pueda convertirse en tal, se precisan las firmas de la mitad más uno de los integrantes de cada una de las comisiones. No hace falta que sean sobre el mismo texto, ya que pueden haber varios despachos.
En el caso de la Ley Bases, al tratarse de tres comisiones, podría no haber mayoría en cada una de las mismas y pasar a una sumatoria de firmas para dirimir el asunto. Todas estas opciones se estudiaron en las últimas 72 horas. Ahora, volvamos a cada comisión:
*En Presupuesto, la firma imposible es la del radical y titular del centenario partido, Martín Lousteau. No se lo vio este martes en el Senado por molestias físicas y se cree que, en el mejor de los casos, presentaría un dictamen propio.
Pese a lo negativo, ayudaría al resto por blanquear una rúbrica, aunque el oficialismo necesitará sí o sí al resto de la oposición dialoguista, por más que sea en disidencia. Por caso, en dicha comisión se encuentra Guadalupe Tagliaferri (Pro). Espera más respuestas del Ejecutivo y funcionarios la visitaron en su despacho en las últimas horas.
*A Lousteau también se lo descarta, claro está, en Legislación General. Además, allí aparece el santacruceño José María Carambia, que ahora pretende modificaciones mineras de fondo en la Ley Bases; y Kueider, sobre quien se debe esperar hasta último momento para saber qué hará. Por ende, varios cabos sueltos.
*En la de Asuntos Constitucionales, de 19 integrantes, están Kueider, Tagliaferri y el radical bonaerense Maximiliano Abad, a quien se lo vio enojado esta tarde en pasillos de la Cámara alta.
Según lo registrado, la posibilidad de no contar con una sola firma no es fija en ninguna comisión, y los grifos abiertos son varios todavía. Incluso, si legisladores como Lousteau y Carambia presentaran dictámenes propios. El primero estudió por completo las iniciativas y estaría en condiciones de hacerlo; el segundo, no tanto.