El martes por la tarde, el flamante jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se reunió a solas en la Casa Rosada con su antecesor, Nicolás Posse, para iniciar el proceso de transición y comenzar a analizar la nueva estructura que tendrá el área, como así también los funcionarios que continuarán en esta nueva etapa y aquellos que serán reemplazados.
El ex ministro del Interior venía de reunirse ese mismo día, pero en el Senado, con la vicepresidenta Victoria Villarruel y con los jefes de los bloques “dialoguistas” en esta Cámara, con el objetivo de tratar de destrabar la discusión por la Ley Bases y el paquete fiscal.
A pesar de estar ahora en un nuevo rol, el funcionario tiene previsto mantenerse al frente de las negociaciones parlamentarias por estas iniciativas, así como también impulsar las futuras reformas que enviará el oficialismo al Congreso, como parte del perfil político que intentará que tenga la Jefatura de Gabinete.
En este sentido, como ya anticipó Infobae, en las próximas semanas Francos intentará construir una impronta diferente a la que tenía Posse y planea llevar adelante toda una reestructuración del Gobierno para mejorar la organización de la administración nacional.
Para esto, será clave la llegada de Federico Sturzenegger, que se incorporará con un Ministerio “que cooperará en las cuestiones más técnicas” de la gestión, mientras que en Francos seguirá recayendo la labor de relacionarse con la oposición y los gobernadores.
De hecho, el nuevo jefe de Gabinete ya les envió a los líderes de los distintos partidos los últimos borradores de la Ley Bases y del paquete fiscal, y confía en que los textos tienen el consenso necesario como para que se firmen los dictámenes correspondientes.
Los textos comenzaron a circular entre los dirigentes de la oposición poco después de la reunión que mantuvieron con el funcionario, Villarruel, el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala, y el jefe de la bancada de La Libertad Avanza, Ezequiel Atauche.
En aquel encuentro, el Gobierno buscó limar asperezas y fue la Vicepresidenta la que les reclamó a los senadores “dialoguistas” un “gesto de buena voluntad hacia el Poder Ejecutivo”, que luego de seis meses de gestión no logró que le aprueben ni una sola ley en el Congreso.
“Venimos teniendo reuniones, hubo encuentros en las que se han tomado muchos puntos que plantearon los senadores, muchos puntos que fueron planteados también por las distintas entidades que vinieron al Senado durante todo este mes. Y me parece que hemos llegado a una posición ya avanzado el periodo de tratamiento, con bastante consenso como para emitir dictamen”, sostuvo Francos al respecto.
De acuerdo con lo que precisaron a Infobae fuentes parlamentarias, las diferentes partes se pusieron de acuerdo sobre los artículos vinculados con el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) y con el blanqueo de capitales.
En cuanto al impuesto a las Ganancias, si bien en los últimos días se especuló con la posibilidad de que se excluyera del pago del gravamen a los que están inscriptos en el régimen especial de Tierra del Fuego, “por el momento van a estar todos adentro”.
Asimismo, las autoridades nacionales ratificaron que no se van a eliminar Aerolíneas Argentinas y el Correo de la lista de empresas a privatizar, lo cual habría sido aceptado por los senadores, bajo el argumento de que es preferible esto a que las compañías se cierren.
En este contexto, en la Casa Rosada confían en que ya están las firmas como para que los dos proyectos del Gobierno obtengan este miércoles dictamen, preferentemente de mayoría, lo que habilitaría que pasen a votación el miércoles de la próxima semana.
“Una vez que estén la Ley Bases y el paquete fiscal, se firmará el Pacto de Mayo con los gobernadores, se conformará el Consejo de Mayo y se avanzará con las reformas que están pendientes”, remarcó una importante figura del Poder Ejecutivo, de estrecha relación con el presidente Javier Milei.
En cuanto al futuro de la administración, todavía es incierto qué funcionarios de la Jefatura de Gabinete continuarán y cuáles serán removidos. Por el momento, el único que tiene el puesto asegurado es José “Cochi” Rolandi, que fue uno de los actores clave en las negociaciones por las iniciativas legislativas.
“Fue el propio Francos el que le pidió (al secretario ejecutivo) que se quedara, por obvias razones”, detallaron fuentes vinculadas a Posse, poco después del encuentro entre ambos, que marcó el inicio formal de la transición.
Por lo pronto, a fines de esta semana, el ya ex ministro del Interior se mudará de oficina y pasará a ocupar la del jefe de Gabinete, en el primer piso de la Casa Rosada, cerca del despacho del Presidente y de la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei.