Una vez más las negociaciones entre los policías acuartelados y el Gobierno de Misiones fracasaron, se mantiene el reclamo en el Comando Radioeléctrico y crece la tensión.
La cuarta jornada de conflicto culminó con una oferta del Poder Ejecutivo provincial que fue rechazada por los efectivos que continúan manifestándose en horas de la noche.
Este lunes por la tarde, el ministro de Gobierno, Marcelo Pérez, anunció a través de su cuenta de X un “aumento del personal policial”. “Conforme lo adelantado en estos días, el Gobierno provincial anuncia un nuevo aumento correspondiente al mes de mayo para el personal que tiene estado policial”, indicó el funcionario. “Así, por ejemplo, el sueldo de un Suboficialmayor, que en enero cobraba $510.941,10, pasará a percibir $853.748. Un comisario mayor en enero $553.103,5 en mayo cobrará $965.782,94″, adelantó.
“Estos montos corresponden a zona capital y son mayores para las otras zonas. Estos aumentos también impactan en horas extras y adicionales. Dicho incremento se verá reflejado en la liquidación correspondiente a este mes de mayo”, explicó Pérez. “Seguiremos trabajando para que los misioneros puedan ir recuperando su poder adquisitivo ante el difícil escenario de crisis nacional, bregando siempre por la armonía, el trabajo y la responsabilidad en el manejo de la cosa pública”, concluyó su mensaje en redes sociales.
Sin embargo, el reclamo policial frente al Comando Radioeléctrico, ubicado en avenida Uruguay de la capital misionera, no solo persiste, sino que se intensificó, especialmente con la llegada del personal del 911 y de Despacho, informó el portal Misiones Cuatro. El video que ilustra esta nota da cuenta del estado de situación anoche a última hora.
En este marco, Ramón Amarilla, quien oficia de vocero de los policías, desestimó el anuncio de Pérez y contestó: “Están mandando fruta”. Desde un móvil con medios locales, señaló que no aceptarían la nueva oferta del Gobierno de Misiones. Consideran que se trata de una estrategia para disolver el acampe que continúa e incluso creció en tamaño al sumarse más efectivos policiales de otras áreas de la fuerza y localidades de la provincia.
El portal El Territorio precisó que además del corte sobre avenida Uruguay, hubo interrupción del tránsito sobre la ruta nacional 12, a la altura del peaje de Santa Ana. Allí estuvo una parte del sector docente con carteles expresando el reclamo salarial. No obstante, durante este lunes también se llevaron adelante diferentes reuniones que tuvieron como eje la cuestión salarial en el marco de un anuncio del Gobierno provincial de aumento a todas las áreas estatales.
Si bien horas más tarde el gobernador de Misiones, Hugo Passalacqua, alcanzó un acuerdo con los gremios docentes y anunció un aumento salarial, fracasó la negociación con los delegados de la policía local.
“La propuesta que nos ha traído el Gobierno es irrisoria, no han mejorado nada ni hubo acuerdo. No va a haber acuerdo porque no hay voluntad en lo político de resolver esto”, dijo Amarilla.
El vocero de la policía advirtió que “acá se viene algo muy grave, todos los sectores están reclamando y nosotros no somos la excepción. Es una vergüenza lo que nos vinieron a ofrecer, ni siquiera se asemeja a lo que necesita un policía para pasar la línea de pobreza”.
Además, hizo hincapié en que “a esta gente se le va a incendiar la provincia, no han resuelto nada con ningún sector. Nos quisieron apretar para que firmemos hoy, para que impacte a fin de mes. Pero nosotros queremos que esté cubierta la canasta básica para los policías.
“Estamos al borde de una huelga policial en la provincia. Nosotros no somos piqueteros, somos profesionales que nos preparamos para hacer el trabajo policial y penitenciario. Pero con estos sueldos de hambre, es imposible trabajar. Ya estamos jugados. La gente va agarrando más bronca y vamos a tener más acompañamiento. Acá tenemos más de 15 mil personas”, argumentó frente a la prensa en Misiones.
A su vez, Amarilla anticipó cuáles serán los próximos pasos en el conflicto: “Seguimos con el acampe y, lamentablemente, vamos a seguir hasta las últimas consecuencias”, y agregó que “las negociaciones siempre estuvieron cortadas, nosotros tuvimos que estar ocho días ahí para que nos atiendan. No hay voluntad política. Este gobernador, en su momento, también había destruido la mesa de diálogo. No quieren escuchar la verdad”.
Para finalizar, el vocero policial de Misiones descartó una posible fecha nueva de reunión: “Estamos esperando a que ellos tomen verdadera conciencia de esto. Se les planteó lo que podía suceder, porque acá hay muchos sectores que están viniendo, no solo la policía. Esto va a estar muy jodido”.