El Gobierno celebró en las últimas horas el dato de inflación de abril, que según el Indec fue del 8,8%, ratificando una desaceleración del aumento de precios, y bajando a un dígito por primera vez desde octubre del año pasado. Incluso el presidente Javier Milei lo calificó como un “gol” y respaldó fuertemente al ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo.
Más allá del dato, uno de los funcionarios que quedó en el centro de los comentarios en redes sociales fue el vocero presidencial, Manuel Adorni, ya que el año pasado, al conocerse el índice de inflación de octubre, que fue del 8,4%, publicó un duro mensaje en las redes sociales contra el entonces Gobierno de Alberto Fernández.
“El nivel de decadencia es tal que el gobierno festeja una inflación mensual del 8,4%, la misma inflación que los países de la región tardarán 3 años en acumular. Fin”, fue el mensaje entonces del actual portavoz, quien ayer, también en las redes, celebró el índice de 8,8% correspondiente a abril.
Hoy, durante la habitual conferencia de prensa brindada en la Casa Rosada, Adorni fue consultado sobre sus diferentes miradas sobre dos índices similares, y su respuesta fue categórica: “Hay una gran diferencia entre festejar un 8,4% viendo por delante una hiperinflación que festejar un 8,8% con una expectativa a la baja. El 8,4% estaba bien medido en términos metodológicos, pero se toqueteaban los precios. Había un montón de precios de la economía que estaban pisados, entonces esa inflación hubiera sido mucho más alta”, comenzó.
Enseguida, no dudó en apuntar contre la gestión de Alberto Fernández por la alta inflación que aún registra el país: “No tengo más que asignarle toda la responsabilidad inflacionaria al Gobierno anterior. Por una cuestión de política monetaria, y por la dinámica que había de política fiscal, de las cuentas públicas, ponele el rótulo que quieras, del otro lado estaba compensada con emisión monetaria descontrolada, que hoy es lo que estamos pagando”, afirmó.
Enseguida, dijo que le parecía “muy divertido el juego en las redes” respecto de la comparación de sus dos mensajes, pero insistió con que “nada tiene que ver la situación de noviembre con la de hoy”.
“En noviembre del año pasado, cuando tuitée, lo que se estaba haciendo en Argentina era devastador, repudiable, y le hizo muchísimo daño a la Argentina. A los que fueron parte de la gestión anterior, los llamaría a la reflexión porque son parte del esquema que generó esto que nos está pasando hoy. Nada tiene que ver aquel 8,4% con este 8,8%”, subrayó.
Adorni también explicó el mensaje en redes del Presidente, quien una vez conocido el dato de abril, escribió ¡¡¡“GOOOOOOOOOOOOOL...!!!”, junto a una foto con Caputo durante la Asamblea Legislativa.
“El tuit del Presidente, o si se quiere, el festejo del Presidente, me parece que no fue un festejo, sino fue simplemente una expresión de satisfacción por un trabajo que se viene haciendo que es muy laborioso, que está a cargo de un equipo económico absolutamente maravilloso y que, además, está dando resultado. Lo que viene ocurriendo es que de un contexto que uno estaba inmerso en un túnel hiperinflacionario, a 9% para redondear, cuando además alimentos y la núcleo está por debajo, son cosas que absolutamente nos tenemos que dar la posibilidad de decir ‘sí, absolutamente estamos haciendo un buen trabajo’”, afirmó Adorni.
Ayer, el Indec informó que la inflación fue de 8,8% en abril y así volvió al terreno de un dígito mensual después de medio año. El organismo agregó que el IPC interanual fue de 289,4% y que en los primeros cuatro meses del 2024 la suba de precios acumula un 65%. El Gobierno apuesta a una desinflación rápida y, por esa razón, apuró en las últimas semanas una reducción en las tasas de interés de referencia del Banco Central.
Sin contar la suba de tarifas, el alza de los precios muestra una desaceleración notable. Así surge del dato de la inflación núcleo, que se derrumbó de 9,4% en marzo a solo 6,3% en abril. Y todo indica que este mes podría incluso perforar el nivel de 5%.
Así, es la primera vez desde octubre que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) baja de las dos cifras mensuales. Es una tendencia que no pudo romperse desde octubre pasado, cuando la inflación fue del 8,3%. Posteriormente en medio de las elecciones presidenciales aceleró a 12,8% en noviembre y luego de la devaluación del tipo de cambio se aceleró a 25,5% en diciembre, 20,6% en enero, 13,2% en febrero y 11% en marzo. Ahora bien, para abril el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que realiza el Banco Central indicaba una inflación del 9 por ciento.