Luego de varios idas y vueltas, el presidente Javier Milei participará del tedeum del 25 de mayo en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires y no en la Catedral de Córdoba, tal como había trascendido días atrás para aprovechar la presencia de los gobernadores en el marco de la firma del “Pacto de Mayo”.
“Siempre se pensó hacerlo acá”, señalaron fuente oficiales a Infobae, en referencia a la Ciudad de Buenos Aires. El Arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, encabezará así la ceremonia litúrgica en el histórico recinto porteño. La misma fuente gubernamental agregó que luego del oficio religioso, el Presidente volará a Córdoba para rubricar el pacto político.
Hace algunos días había trascendido que el tedeum en conmemoración de la fecha nacional argentina se iba a llevar a cabo en la provincia de Córdoba, mudándola desde su lugar habitual en Buenos Aires y aprovechando celebrar en dicho territorio el acuerdo nacional que el Presidente lanzó el 1 de marzo. La ceremonia iba a estar presidida por el arzobispo de Córdoba, el Cardenal Ángel Rossi, quien fue elevado en jerarquía por el papa Francisco a fines de septiembre del 2023.
Pero no será así. El oficio religioso en la sede porteña, que comenzará entre las 10 y las 11 de la mañana, contará con la comitiva de ministros del presidente para luego partirá hacia el otro compromiso oficial. En horas de la tarde, en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio de Justicia de Córdoba, los gobernadores aguardarán por Milei para rubricar el Pacto de Mayo.
Luego de la firma del acuerdo nacional, el jefe de Estado les entregará la Orden de Mayo a los mandatarios provinciales, una condecoración otorgada “a quienes con su esfuerzo contribuyen al progreso, al bienestar, a la cultura y al buen entendimiento y solidaridad ‘internacionales’ en la República Argentina”.
La Iglesia, cara a cara con Milei
La anterior visita del Presidente a la Catedral Metropolitana ocurrió hace cinco meses, en la tarde del 10 de diciembre, día de la asunción presidencial del líder de La Libertad Avanza. Milei llegó a la sede eclesiástica apenas unos minutos pasadas las 19:30, luego de unir caminando junto a su gabinete el trayecto que separa la iglesia de la Casa Rosada.
En aquella ocasión, García Cuerva -con quien el Presidente volverá a verse cara a cara este 25 de mayo- enunció que “habrá tormentas inesperadas como fue, por ejemplo, la pandemia de covid que aún hoy nos duelen tanto sus consecuencias, pero tenemos que advertirnos de las tormentas que nosotros mismos podemos crear, y con la que hacemos tambalear la casa, nuestro querido país”.
Y agregó: “Son las tormentas de la intolerancia, de sentirnos dueños de la verdad, los oportunismos políticos, los mensajes de desesperanza y pánico, el creer que cuánto peor, mejor. Un vendaval de conflictos y enfrentamientos que nos urgen a la reconciliación y la paz”.
Además, el arzobispo de Buenos Aires hizo hincapié en un mensaje del papa Francisco para hablar sobre el rol de la libertad, tan utilizado por Milei. “Un Dios que, libres, nos impulsa a comprometernos especialmente con los que más sufren. Como nos dice el Papa Francisco: la verdadera libertad se expresa plenamente en la caridad. No hay libertad sin amor. (…) Sabemos que una de las concepciones modernas más difundidas sobre la libertad es esta: “mi libertad termina donde empieza la tuya”. ¡Pero aquí falta la relación, el vínculo! Es una visión individualista”, afirmó.
En aquella ocasión, también participaron el arzobispo griego, Iosif Bosch; el Obispo anglicano, Brian Williams; el representante de ACEIRA, pastor Christian Hooft, el rabino Shimon Axel Wahnish y Sheij Salim Delgado Dassum, representante de la comunidad islámica. Cada uno de ellos se expresó en el altar y frente al Jefe de Estado, que se sentó solo y pasó casi toda la ceremonia apoyado sobre el bastón de mando.