Algunos de los principales referentes de las fuerzas opositoras manifestaron públicamente este martes su descontento por la aprobación de la Ley Bases en la Cámara de Diputados tras una maratónica jornada de debates. En ese sentido, también llamó la atención el silencio de varias figuras importantes, sobre todo del kirchnerismo, que de momento han optado por no transmitir sus opiniones.
Desde el kirchnerismo, encabezó las protestas el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien se refirió al proyecto oficialista como “una ley espantosa”.
Durante un acto en Berazategui, el mandatario provincial apuntó: “Vamos a hacer fuerza para que en el Senado la ley no pase y el DNU/70 maldito se caiga”.
Luego, en una extensa publicación en la red social X, Kicillof consideró que “es una ley que institucionaliza la deserción del Estado Nacional de sus obligaciones más elementales, que consagra privilegios, deteriora derechos, resigna soberanía y profundiza la desigualdad”
“La ley de Milei sienta las bases para desintegrar el Estado y que en Argentina impere la ley de la selva. Lo que pretenden es legalizar los destrozos que ya están haciendo: caída récord de salarios y jubilaciones, recesión, despidos y desempleo, paralización de la obra pública, atropello a las provincias, tarifazos despiadados y entrega del patrimonio nacional”, indicó.
Por otro lado, dijo que “no es buena idea darle superpoderes a un presidente tan alejado de la realidad, que no es capaz ni de gobernar sus propios impulsos que descarga sobre cualquiera que manifieste una crítica”.
La principal figura de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, por su parte también se expresó en redes sociales sobre lo que cree que “es una matriz de saqueo a la Nación”, y adjuntó un video en el que desglosa sus principales críticas a la Ley Bases. Además, celebró que “la votación se hizo nominal y no a mano alzada”, como creía que sería en un principio.
El gobernador de La Rioja, Ricardo Qintela, lamentó lo que considera un “enorme retroceso que tendremos como Nación con la aprobación de la Ley de Bases”.
“Esta imposición del Ejecutivo Nacional solamente propone beneficios para los grupos económicos más poderosos de Argentina, dejando de lado todos los derechos que los trabajadores y trabajadoras han obtenido a lo largo de nuestra historia, dejando en el desamparo absoluto a la clase trabajadora y legitimado las prácticas ilegales de los empleadores que no cumplen con sus obligaciones, por citar solamente un ejemplo. En más de 200 años de historia logramos un país donde las mujeres tienen derecho a una jubilación después de toda una vida trabajando en los cuidados familiares sin recibir una remuneración por su dedicación, donde las infancias, las juventudes y las personas adultas mayores están protegidas por un Estado que les garantiza el acceso a la salud y la educación”, analizó el único mandatario provincial peronista que se manifestó al respecto, además de Kicillof.
Desde adentro del recinto también se movieron fuerte en redes sociales los diputados. Myriam Bregman, ex candidata presidencial del Frente de Izquierda, mientras se llegaba a la definición manifestó: “Están votando que se puedan despedir miles de personas y quien que aceptemos sin chistar todas sus trampitas”.
“Todos los que se llenan la boca con su capacidad de movilización o convocatoria, no hicieron nada para que hoy haya miles acá afuera y no esté transcurriendo este escándalo en el recinto como si nada”, publicó.
Por su parte, Leandro Santoro, también diputado y ex candidato a jefe de Gobierno porteño de Unión por la Patria, apuntó contra “la oposición que no se opone”.
“El método de la ‘oposición que no se opone’ es votar todo con el gobierno pero hacer discursos opositores para las redes sociales. Incluso votan a favor artículos de la ley y simulan que los votan en contra, solo para la versión taquigrafica (parece joda pero es verdad)”, ironizó.