En la previa de la Marcha Universitaria Federal de mañana a Plaza de Mayo, el Gobierno nacional prepara un fuerte operativo de seguridad para garantizar el orden público y la circulación en el centro porteño. Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de la Nación, coordina con su par de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), Waldo Wolff, el despliegue de fuerzas, la logística conforme al mapa de la movilización prevista.
Cuando se conoció la convocatoria a la marcha de mañana, hecha originalmente por la Universidad de Buenos Aires, el Gobierno optó por confrontar con el sistema universitario y Bullrich sostuvo que la decisión era aplicar el Protocolo Para el Orden Público, conocido como “Protocolo Anti piquetes”. Se trata del instrumento que implementó la funcionaria desde que asumió en su cargo, el 10 de diciembre, y ejecutó en cada movilización piquetera, de movimientos sociales o espacios políticos.
Sin embargo, hubo movilizaciones masivas por efemérides, como la del 24 de marzo, en la que el Gobierno no aplicó ese protocolo. Si bien hubo despliegue preventivo de fuerzas, los oficiales no intervinieron para evitar los cortes de calle. Desde el Ministerio de Seguridad le explicaron a Infobae que la implementación de esa medida está relacionada con el contenido de cada movilización. “No es lo mismo que muevan gente y militantes para cortar calles, bloquear accesos y hacer piquetes, que algún tipo de convocatoria pacífica en donde se garantiza la circulación”, le explicaron a este medio desde el equipo de Bullrich.
En esta ocasión, el Gobierno encendió alarmas cuando supo que a la movilización de mañana se adhirió la Confederación General del Trabajo (CGT), las dos CTA, espacios políticos, como el kirchnerismo, la Unión Cívica Radical, la Coalición Cívica, movimientos sociales y piqueteros. Se espera que la movilización sea multitudinaria y que genere cortes en el centro porteño y un colapso en el tránsito en las adyacencias a esa zona.
Bullrich se refirió anoche al tema, al ser consultada durante una entrevista en el canal LN+. “Siempre el protocolo tiene que ver con la realidad de la gente que va”, principalmente porque si hay una masividad de decenas de miles de manifestantes, el control de esa protesta se torna relativo para las fuerzas de seguridad. Y en relación con la participación del sindicalismo, la ministra advirtió: “Pensamos que en esta marcha puede haber una provocación, que se junte la CGT, que haya salido toda la izquierda. Son el elenco estable de gente que marcha. Es una provocación, querer generar una situación para movilizarse de acá a la eternidad. Vamos a tener cuidado”.
Desde la organización de la marcha buscaron poner paños fríos y llamaron a mantener la “paz”. Ante la consulta de Infobae, señalaron: “Nadie está pensando en hacer un bloqueo. Sería un error enorme que reprimieron a los estudiantes y docentes”. Desde la UBA, la Asociación de Docentes se mantiene en contacto con el Gobierno para intentar tender puentes y garantizar una movilización pacífica.
Infobae pudo conocer que el Ministerio de Seguridad desplegará oficiales de las cuatro fuerzas federales. Intervendrán la Policía Federal Argentina, la Gendarmería Nacional, Prefectura Naval Argentina, y la Policía de Seguridad Aeroportuaria. La ministra articula con Vicente Ventura, secretario de Seguridad, la ejecución del operativo. Las fuerzas controladas por Bullrich se concentrarán en la vigilancia de los edificios nacionales, de jurisdicción federal, como la Casa Rosada y el Congreso Nacional. Lo propio harán en los accesos a la Ciudad, para custodiar puentes y tramos federales, con el objetivo de “evitar bloqueos o disturbios”.
En tanto que desde la Ciudad, Waldo Wolff coordina el protocolo con Diego Kravetz, secretario de Seguridad porteño, y se mantiene en contacto con Bullrich. Los funcionarios harán base mañana en el centro de comando que la Policía Federal, en el centro de CABA. Ante la consulta de este medio, desde el Ministerio de Seguridad de la Nación deslizaron: “Vamos a ver cuánta gente se moviliza, si se manifiestan pacíficamente y cómo se comportan”.
Cabe recordar que el conflicto se desató por el reclamo que encabezó la UBA por la falta de presupuesto que afecta el funcionamiento de la casa de estudios más grande del país y el resto de las universidades nacionales.
La marcha de mañana fue convocada para las 15:30. El punto de encuentro es la plaza del Congreso Nacional, en la esquina de las avenidas Rivadavia y Callao. Está previsto que parta columnas desde las 13 facultades de la UBA con destino al centro porteño. Un lugar de alta concentración será la Plaza Houssay, donde coinciden las facultades de Economía, Medicina, Farmacia y Bioquímica; allí se sumará también la Facultad de Derecho.
Las diferentes columnas movilizarán hacia la Plaza de Mayo con la intención de confluir allí a las 17:30. El acto central comenzará a las 18. Habrá montado un escenario en la plaza con una bandera Argentina grande con la inscripción “En defensa de la universidad pública”, y donde se ubicarán las autoridades de la UBA, rectores de universidades nacionales, alumnos, representantes de docentes y no docentes.
Por estas horas, la UBA redacta un comunicado que elabora de forma consensuada con todas las facultades y otras universidades nacionales. Está previsto que el texto lo lea Piera Fernández de Piccoli, presidenta de la Federación Universitaria Argentina (FUA), que nuclea al movimiento estudiantil de la universidad.