En medio de una creciente tensión y horas antes de la marcha universitaria, el Ministerio de Capital Humano, encabezado por Sandra Pettovello, aseguró que concluyó “con la política de congelamiento presupuestario de la administración anterior”. “La educación pública es un derecho. Auditar es una obligación”, argumentó.
Este lunes 22 de abril, de acuerdo a lo establecido en el cronograma de pagos con el CIN, “las universidades públicas recibieron $21.800 millones del Estado Nacional para su funcionamiento”, según destacaron desde el Ministerio a través de un comunicado oficial.
A su vez, afirmaron que “se ejecutó en la presente jornada la totalidad de los gastos específicos para la función salud de las Universidades de Buenos Aires, Córdoba, Cuyo y La Rioja, además del refuerzo especial y extraordinario para el Hospital de Clínicas y demás hospitales universitarios de la UBA, lo que implica un desembolso de $11.812.261.789″.
Además, enfatizaron que el Gobierno “defiende la educación pública” y que el pueblo argentino tiene derecho a “conocer el destino y ejecución de toda partida asignada”, amparándose en el Artículo 2 de la Ley 24.521, donde se indica que “el Estado nacional es el responsable de proveer el financiamiento, la supervisión y fiscalización de las universidades nacionales, así como la supervisión y fiscalización de las universidades privadas”.
La polémica por el acuerdo para el aumento en las partidas presupuestarias
Luego de los reclamos por la problemática de los recortes presupuestarios, el Ministerio de Capital Humano comunicó que las asignaciones que envía el Tesoro se incrementaron un 70% en el mes de marzo y habrá un aumento igual en el mes de mayo, lo que totaliza una recomposición del 140%, de acuerdo a los datos oficiales.
Al respecto, el vicerrector de la UBA Emiliano Yacobitti aclaró que la oferta del Gobierno “no resuelve nada”, y agregó: “El Gobierno -después de más de un mes de reclamos- dijo que a partir de marzo iba a dar el aumento del 70% sólo para gastos de funcionamiento. Un capítulo aparte son los docentes, de los residentes, se redujo casi el 36%”.
Durante las últimas semanas, los directivos de las universidades nacional advirtieron que los fondos asignados por el Gobierno nacional los obligaría a dejar de funcionar en el primer semestre del año o incluso antes. A los abrazos simbólicos que hubo en distintas dependencias de la Universidad de Buenos Aires (UBA), se sumó una protesta masiva en el Hospital de Clínicas, que depende de la Facultad de Medicina de esa Casa. La respuesta de las universidades valoró el diálogo y la voluntad de realizar un ofrecimiento, pero no dieron por cerrado el conflicto y ratificaron la movilización prevista para este martes 23 de abril.
El Gobierno consideró que la marcha por las universidades está “incentivada por la política”
El vocero presidencial, Manuel Adorni, ratificó hoy que el Gobierno alcanzó un acuerdo con las autoridades universitarias para incrementar el presupuesto en dos tramos, y consideró que la marcha convocada para mañana está “incentivada por la política”.
“El jueves hubo diálogo y un acuerdo. El Gobierno aumentó el 70% las partidas de gasto en marzo, habrá otro 70% en mayo y se dispuso una partida extraordinaria para hospitales universitarios”, planteó el funcionario nacional en su habitual conferencia de prensa desde Casa Rosada.
“Eso transforma a la marcha en una marcha incentivada por la política. No digo que no sea algo genuino de los alumnos, es genuino lo que hacen y los reclamos que puedan considerar. No consideramos genuino que desde un escritorio se incentive este tipo de cuestiones”, sostuvo, y agregó: “Siempre vamos a defender a los alumnos, a su derecho a educarse y tener un futuro en la Argentina; es por lo que único que estamos acá”.
La movilización universitaria al Congreso y a la Plaza de Mayo, convocada para las 15:30, tiene apoyo del kirchnerismo, la CGT, un sector de la UCR y la Coalición Cívica. A su vez, la UBA lanzó un video institucional con el siguiente mensaje: “Creen que estamos dormidos. Que miramos para otro lado. Que las diferencias nos debilitan. Lástima. Porque aceptar al que piensa distinto es lo que nos hace únicos. Cuidemos los que nos une”.