Finalmente, el Sindicato de Camioneros y los empresarios reformularon el acuerdo salarial que seguía sin homologar (del 45% para marzo y abril, en dos tramos del 25% y del 20%) y esta tarde pactaron un incremento de 15% para marzo y del 9% para abril y revisarlo recién en junio, un esquema que está en sintonía con las pautas inflacionarias del Ministerio de Economía: todo indica que ahora será convalidado por la Secretaría de Trabajo.
Ambas partes, que presentarán el nuevo acuerdo en Trabajo para su homologación, incluyeron una suma fija en carácter de recomposición para marzo y otra para abril, equivalentes al 10% y 7%, respectivamente, sobre los sueldos del primero de esos meses. También se reformuló lo acordado sobre la modificación al convenio colectivo de trabajo relativo a la jornada laboral, que implicaba una flexibilización de las tareas durante los fines de semana.
En la reunión, realizada en las oficinas de la Secretaría de Trabajo ubicadas en la avenida Callao 114, se pactó, además, extender la vigencia del nuevo acuerdo firmado hasta el 31 de mayo y las partes se comprometieron a reunirse de nuevo en junio.
La clave del nuevo acuerdo, que ahora está dentro de las pautas fijadas por Economía, es justamente que el acuerdo inicial era bimestral, marzo-abril-, y ahora se prolongará hasta junio sin otorgar ningún incremento en mayo. Era una propuesta de Trabajo que la semana pasada rechazó el titular de Camioneros, Hugo Moyano, porque Economía exigía aumentos del 2% para mayo y 2% para junio. Ahora, se reacomodaron los porcentajes para exhibir una recomposición más baja (era del 25% para marzo y 20% para abril y ahora, del 15% y 9%, respectivamente), pero se agregan dos sumas fijas, del 10% y del 7% sobre los sueldos de marzo, que igual dejan la mejora total en casi un 45%.
En la práctica, el nuevo acuerdo tiene sabor a empate entre el Gobierno y Camioneros. El oficialismo podrá decir que el sindicato de Moyano cedió al reformular el convenio, no fijar ningún aumento en mayo y extender su vigencia hasta junio, mientras que el gremio consiguió que la mejora en el bolsillo de los trabajadores se mantenga en casi un 45%, tal como lo establecía la paritaria sin homologar.
“Se reconoció la necesidad de recomponer los salarios”, afirmaron a Infobae en el Gobierno tras el acuerdo entre sindicalistas de Camioneros y empresarios, aunque dejaron en claro: “Se extiende el plazo de vigencia al 31 de mayo y, por lo tanto, va a estar dentro de la pauta inflacionaria”.
De esta forma, se confirmó la información que Infobae publicó la semana pasada y que el secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, calificó de “mentira” en la conferencia de prensa que se hizo en la CGT para anunciar el paro general del 9 de mayo, aunque él mismo desvirtuó sus dichos al admitir que representantes del gremio habían estado el jueves pasado negociando en Trabajo.
Hugo Moyano planteó el reclamo por la no homologación en la reunión de la CGT en la Casa Rosada. Se quedó conversando esa noche con Cordero y volvieron a encontrarse el jueves por la mañana. Hugo Moyano Jr., hijo del dirigente y abogado del sindicato, se instaló ese día en Trabajo con técnicos de Camioneros para analizar una fórmula que permitiera salir de la actual encerrona.
La idea era rediseñar el convenio firmado para extenderlo de marzo a junio, con los últimos dos meses en sintonía con la inflación descendente. Todo parecía avanzar, pero el ministro de Economía, Luis Caputo, ordenó que cualquier cambio incluyera módicos aumentos del 2% para mayo y 2% para junio, cifras más bajas que la inflación prevista. Allí se estancó todo y Moyano amenazó con declarar un paro esta semana si el Gobierno no homologaba el acuerdo inicial del 45% para marzo-abril.
Las negociaciones se reanudaron en las últimas horas en la Secretaría de Trabajo, sin la presencia de Cordero, pero dentro del esquema que había propuesto el funcionario. Aun así, en la audiencia que se hizo este martes estuvieron la Federación Argentina de Entidades de Transporte y Logística (Faetyl), la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) y la Confederación Argentina del Transporte Automotor de Cargas (CATAC), pero una de las cámaras pidió 24 horas para consultarlo con las entidades que impugnaron el acuerdo anterior.
Se trata de FADEEAC, donde se desató una interna que llevó a frenar la paritaria original del 45%: cuatro de las cámaras del interior (Córdoba, Santiago del Estero, Mendoza y San Juan) impugnaron el convenio ante Trabajo al considerar que se incorporaron “de manera inconsulta” el pago de adicionales y de un aporte extraordinario para la obra social, cuyo pago “termina favoreciendo a las grandes empresas y afecta a todas las pymes del país”.
En efecto, el acuerdo no homologado contemplaba un “aporte extraordinario” a la obra social de Camioneros de $10.000 por trabajador “para solventar el déficit del sindicato” (como hay 200.000 afiliados, asciende a un total de 2000 millones de pesos por mes para las arcas gremiales). Ese punto, hasta ahora, se mantiene en el convenio que fue reformulado esta tarde. Y la posible negativa de las cámaras rebeldes de FADEEAC podrían aportar un componente de incertidumbre a este conflicto.