La Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y las organizaciones piqueteras realizaran hoy, a partir de las 11 de la mañana, una “jornada nacional de lucha” contra el Gobierno de Javier Milei. La concentración principal en la Ciudad de Buenos Aires será en la intersección de la Avenida 9 de Julio y Moreno, frente al histórico edificio dónde funciona la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, la ex cartera de Desarrollo Social.
A diferencia de lo que hacen en cada movilización o medida de protesta, ayer, a última hora, los dirigentes resolvieron no difundir un comunicado detallando la metodología de la medida de lucha, la explicación parece cándida: no facilitarle al Ministerio de Seguridad de la Nación los accesos por los que se trasladarán hasta el centro porteño y otros detalles para evitar el despliegue de las fuerzas federales que buscarán aplicar el protocolo antipiquetes de Patricia Bullrich.
La relación entre los dirigentes de la UTEP y los piqueteros de izquierda no parece sencilla. Por más que intenten demostrar “unidad ante las políticas sociales y económicas de La Libertad Avanza”, los acuerdos sobre la forma de protesta no logran un consenso unánime.
Mientras el sector más radicalizado está decidido a desafiar a Bullrich y la prohibición de cortar por varias horas la 9 de Julio y Avenida de Mayo, otros no lo están. Por eso otorgaron libertad para realizar ollas populares en los municipios y no marchar a CABA.
De hecho, los principales dirigentes de la Unión Trabajadores de la Economía Popular, estarán atentos a la primera reunión que la CGT mantendrá con el oficialismo.
Mañana a las 16, el ministro del Interior, Guillermo Francos, recibirá a una delegación de la principal central obrera en la Casa Rosada. El Gobierno, como adelantó este medio, intentará bajar las tensiones para desactivar el nuevo paro general de la central obrera, que será debatido este el jueves.
Tanto los piqueteros como los referentes de la UTEP les han pedido a los dirigentes de la CGT un nuevo paro general activo, esta vez por 24 horas. En tanto, mañana también habrá paro y movilización de trabajadores de ANSES.
Según pudo reconstruir Infobae, los piqueteros resolvieron no llegar al lugar de concentración en columnas marchado por las principales arterias. Viajarán en trasporte público hasta las inmediaciones de la secretaría que conduce Pablo de la Torre.
Los principales puntos de encuentro serán las estaciones de subtes y/o trenes como Retiro, Constitución, Once y Liniers. Ayer a la tarde también resolvieron que quienes decidan no movilizarse hasta la Ciudad de Buenos Aires, realizarán ollas populares en las principales plazas del país frente a municipios y gobernaciones.
La idea fuerza de los dirigentes es demostrar masividad y poder de convocatoria.
Con la crisis económica como telón de fondo, los movimientos sociales enfrentan el cambio de paradigma que busca imponer el Gobierno en su relación con los dirigentes piqueteros: romper con la intermediación en los planes, aplicar el protocolo, capitalizar el descontento que generan las protestas piqueteras en la sociedad y exponer a la “casta” de estos sectores, a los que el vocero presidencial Manuel Adorni y el propio Javier Milei definieron como “gerentes de la pobreza”.
Desde la Casa Rosada se jactan de haber horadado el poder que tenían los dirigentes populares sobre los beneficiarios de planes sociales al quitarle a estos el manejo de programas como el Potenciar Trabajo y la tercerización del 4,2% de los alimentos secos que eran distribuidos a los comedores y merenderos comunitarios que manejaban.
Entre las principales organizaciones convocantes destacan el Polo Obrero, el Movimiento Evita, MST-Teresa Vive, el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Somos/Barrios de Pie, el Bloque Piquetero Nacional, el Frente Popular Darío Santillán, el Frente de Organizaciones en Lucha, la Corriente Clasista y Combativa y, entre otros, la Coordinadora para el Cambio Social.
Ramiro Berdesegar, coordinador regional de la CCC La Plata y secretario de organización de la UTEP expresó que “la situación es dramática y vamos a enfrentar el ajuste en la calle” y explicó los alcances “de la jornada que se realizará en todo el país y tendrá un acto central frente al ex ministerio de Desarrollo Social a partir de las 11 de la mañana”.
“Vamos a desafiar al Protocolo Antipiquetes de Bullrich”, reconoció el dirigente de la Corriente Clasista y Combativa ante a advertencia de la cartera de seguridad que no permitirán “el corte de arterias” y que “deberán manifestarse sobre las veredas y sobre plazoletas”.
Berdesegar destacó que “la jornada nacional será a lo largo y ancho de todo el país, con reclamos claros y concretos al gobierno nacional, que no ha garantizado ni un paquete de fideos para sostener los comedores, ha dispuesto bajas del Potenciar Trabajo y han frenado las obras en los barrios”.
El dirigente de la CCC adelantó: “Le pediremos al secretario Pablo de la Torre que dé la cara y respuesta a los dramas que genera esta política. La situación es muy dramática y miles y miles de familias no tienen para comer todos los días. Hay miles de jubilados a los que el PAMI ha dejado de darles sus remedios. Es una política de ajuste y de entrega”.
Finalmente, el dirigente de la UTEP, precisó que “para pasar semejante ajuste el Gobierno tienen que romper con toda expresión comunitaria y solidaria que represente los intereses populares y sociales, es por eso que nos han puesto en el blanco”.
Silvia Saravia, dirigente de Libres del Sur, declaró después de la reunión piquetera de ayer: “Será una convocatoria amplia. Vamos a participar casi todos los espacios y habrá acciones en todo el país”.
Desde la UTEP, cuyo secretario general es Alejandro “Peluca” Gramajo, difundieron en sus redes sociales que la nueva convocatoria contra el Gobierno, es para “seguir visibilizando la situación crítica que está viviendo nuestro país, sobre todo los últimos y últimas de la fila que conformamos el sector de la economía popular”. Y destacaron: “El límite que debería ser el hambre, ya fue cruzado con el desabastecimiento de cientos de miles de comedores comunitarios. Venimos denunciando incansablemente la emergencia alimentaria en todos nuestros barrios, y enfatizamos la gravedad de que al día de la fecha no tengamos ninguna respuesta, ni un canal de diálogo abierto con el Ministerio de Capital Humano”.
Por último, remarcaron que “tenemos la histórica tarea de seguir luchando y visibilizando el programa de ajuste, saqueo y miseria que propone este Gobierno”, y advirtieron: “Vamos a seguir organizándonos contra las injusticias de quienes nos gobiernan, que desprecian a los más humildes y a la clase trabajadora”.
Dirigentes de la UTEP entienden que desde el Gobierno hay una persecución y estigmatización hacia las organizaciones, ya que es la forma que encontraron los funcionarios de Milei “para avanzar con las medidas de ajuste, es deslegitimando a las diferentes políticas públicas”.
La de hoy será una nueva pulseada entre la Casa Rosada, que no está dispuesta a ceder ante los reclamos piqueteros, y los dirigentes sociales que sostienen que “ña realidad en los sectores populares es cada día más cruda”.“Hay un claro ataque a nuestro sector con el congelamiento y las bajas arbitrarias de nuestro Salario Social Complementario, y el desmantelamiento de las obras de integración urbana que no sólo dignificaban la vida en nuestras barriadas, sino que eran la fuente de laburo de un montón de vecinos y vecinas”, completaron.