La ex vicepresidenta Cristina Kirchner reapareció a través de un audio en el plenario de la Mesa Nacional de Nuevo Encuentro, el partido de Martín Sabbatella, que este sábado se reunió en Morón, al oeste del conurbano. La ex mandataria reiteró sus preocupaciones sobre la situación del país e hizo especial hincapié en la deuda externa y el abastecimiento de energía.
En el audio que fue difundido por redes sociales, Fernández de Kirchner expresó: “Seguramente destinarán parte de este encuentro a la discusión y organización de la fuerza. Pero también, y estoy segura de que ustedes coincidirán conmigo, resulta imprescindible abordar y profundizar la situación del país en el documento que publicamos el 14 de febrero de este año, bajo el concepto ‘Argentina en su tercera crisis de deuda, cuadro de situación’”.
“Sostuvimos la necesidad de caracterizar adecuadamente el momento institucional en materia histórica, política y social. Tal cual lo preveíamos, se agrava cada vez más, agregándose ahora la cuestión del precio de los servicios públicos esenciales, el aumento de las tarifas, que en realidad debe implicar ni más ni menos que discutir o rediscutir la cuestión energética y su marco regulatorio en Argentina significarán, sin lugar a dudas, un punto de inflexión en los tiempos que vienen”, expresó.
En ese sentido, insistió en que “deuda externa y energía deben ser dos vectores que se entrecruzan en la construcción de una Argentina diferente y nuestra oposición al modelo que nos plantean desde un dogmatismo ideologismo absolutamente incomprensible, no debe ser precisamente desde el dogmatismo también o del consignismo, sino desde la comprobación empírica. Comprobación empírica. Vuelvo a reiterar los hechos. Las opiniones pueden variar, los hechos son sagrados,dijo alguien ¿No? Bueno, la comprobación empírica del fracaso de estas políticas que no son nuevas y ni mucho menos originales. Experiencia que también nos debe obligar a nosotros a analizar lo hecho y repensar estrategias y políticas en términos de presente y de futuro, con la convicción de siempre y con la confianza”.
El extenso documento al que se refiere Fernández de Kirchner hace un recorrido histórico por lo que la exmandataria denomina como los ciclos de crisis de deuda que vivió el país, y ubica al iniciado con el Gobierno de Mauricio Macri como el tercero de ellos, que todavía está en proceso.
Allí cuestionó a funcionarios del actual Gobierno que formaron parte de la gestión macrista, como el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, y el asesor presidencial Federico Sturzennegger; advirtió por la fuerte toma de deuda en dólares e, incluso, recordó a las fuerzas políticas “que obtuvieron fuerza propia que los insuflaron de aires fundacionales no pudieron terminar sus mandatos cuando no lograron darle a la sociedad la calidad de vida que los argentinos demandan”.
En su análisis económico, la expresidenta rechaza la teoría -esgrimida por el presidente Milei, entre otros- de que la inflación es generada por el déficit fiscal. “Nosotros sostenemos que la inflación en Argentina se dispara ante la escasez de dólares y que el endeudamiento compulsivo en dicha moneda no hace más que agravar dicha escasez al profundizar la ya conocida y estructural restricción externa de nuestra economía bimonetaria”, afirmó.
El “documento de trabajo”, tal como lo califica, establece tres momentos de la crisis de deuda en Argentina: el primero, entre 1976 y 1989; el segundo, entre la asunción de Carlos Menem hasta 2001; y la tercera, aún en proceso, según la exvicepresidenta, iniciado en 2016. La particularidad de este último proceso, según Cristina Kirchner, es que trae aparejado un “necesario complemento: ruptura del Estado de Derecho”.
Según Cristina Kirchner, la deuda externa de Argentina, lejos de ser un instrumento de desarrollo, se ha convertido en un ciclo de “veneno” para su economía bimonetaria, especialmente bajo la gestión de Macri. Al mismo tiempo, el análisis critica abiertamente al presidente Javier Milei y al ministro de Economía Luis Caputo, sosteniendo que repiten políticas fracasadas del pasado, lo cual contradice el principio bajo el cual Milei obtuvo apoyo popular. “¿Cuál es la lógica de repetir como Ministro de Economía a Luis Caputo? ¿Por qué ahora va a hacer bien las cosas si, en su momento, lo tuvieron que echar por haber fracasado?”.