El gobierno argentino informó este viernes que inició negociaciones para crear un “salvoconducto” que resuelva la situación de los dirigentes opositores a Nicolás Maduro que se encuentran refugiados en la embajada en Caracas. Así lo informó la canciller argentina, Diana Mondino, durante un acto celebrado en la ciudad de Córdoba, quien reconoció que la situación es compleja.
“Lo estamos gestionando. No es tan fácil”, aseguró la titular del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto sobre los dirigentes venezolanos que se encuentran refugiados en su embajada en Caracas desde el 26 de marzo. Mondino aseguró, además, que los opositores refugiados cuentan con el estatus de asilados políticos desde el viernes pasado, cuando les fue concedido por las autoridades argentinas.
La semana pasada la Fiscalía General de Venezuela ordenó la aprehensión de nueve opositores, entre ellos Omar González Moreno y la jefa de campaña y mano derecha de Machado, a quienes señala de estar vinculados con presuntos actos de violencia para desestabilizar al gobierno.
Según el fiscal general venezolano Tarek William Saab estos opositores están involucrados en una trama conspirativa que incluía asaltos a cuarteles militares y manifestaciones, entre otras acciones violentas. La decisión judicial se gestó en medio de la campaña electoral, donde Maduro busca ganar su reelección con la mayor cantidad de votos posibles.
En ese contexto, como reconstruyó Infobae, a mediados de marzo ingresaron a la embajada argentina en Caracas, por goteo, seis dirigentes opositores a Maduro que son perseguidos por sus ideas políticas. El presidente Javier Milei y su canciller Mondino aceptaron que ingresen a la representación diplomática en Venezuela, y desde ese momento -por las leyes internacionales- quedaron bajo asilo de la Argentina.
González Moreno, dirigente del partido Vente Venezuela, dijo a Radio Rivadavia de Buenos Aires que la decisión del presidente Javier Milei de acoger a los políticos “perseguidos” por el gobierno venezolano en la residencia oficial es “absolutamente valiente”. “Nos sentimos seguros acá”, sostuvo sobre el hecho que ha tensionado al máximo las ríspidas relaciones entre ambos países.
El gobierno de Milei informó la víspera que había “acogido a líderes de la oposición venezolana en la residencia oficial de la embajada argentina en Caracas” y denunció el posterior corte del servicio de luz en las instalaciones.
La medida que tomó el gobierno apuntando a “los actos de hostigamiento y persecución dirigidos contra figuras políticas de Venezuela” se concretó tras el polémico cierre de la inscripción de candidatos para las elecciones generales del 28 de julio, en las que Maduro aspira a un tercer periodo. El proceso electoral se vio alterado por el bloqueo a la postulación de la líder opositora María Corina Machado y de su sustituta Corina Yoris.
González Moreno denunció, además, que desde que el gobierno de Maduro supo de la presencia de los opositores en el lugar comenzó “un asedio a la sede diplomática”.
“Nos han cortado la electricidad y secuencialmente, las refrigeradoras, el agua y los servicios elementales. Hay evidencias de videos de cómo funcionarios de la estatal empresa eléctrica de Venezuela retiraron parte de los equipos sólo a la sede diplomática de Argentina, a la residencia del embajador argentino en Caracas, el servicio eléctrico”, señaló el líder político.
Por el caso, el gobierno de Milei advirtió a Venezuela sobre “cualquier acción deliberada que ponga en peligro la seguridad del personal diplomático argentino y de los ciudadanos venezolanos bajo protección”. El gobierno argentino no nombró un embajador y Gabriel Volpi es el encargado de negocios en Caracas.
“Seguimos en la lucha por la liberación de Venezuela. Si de algo se nos acusa a los que estamos en la embajada es porque defendemos el sagrado derecho a la libertad privada, el libre mercado”, aseveró González Moreno.