Victoria Villarruel dio este jueves su primera entrevista a la prensa desde que asumió la Vicepresidencia. La compañera de fórmula de Javier Milei rompió el silencio luego de semanas de especulaciones en torno a la relación con el Presidente, el aumento de sueldos, los anuncios de Patricia Bullrich y Luis Petri sobre un paquete de leyes para combatir la inseguridad y el narcotráfico y la polémica en el Senado por las contrataciones de Vilma Bedia, quien incluyó en la nómina de empleados a familiares directos con contratos millonarios.
En ese sentido, la dirigente marcó su postura con respecto a los anuncios de la intervención de las Fuerzas Armadas en casos de seguridad interior y se despegó de la decisión de la Casa Rosada: “No estoy de acuerdo, lo dije en campaña y lo sigo sosteniendo. La función de las Fuerzas Armadas no es combatir a civiles, creo había quedado claro con el tema de los 70. El narco es un civil para el derecho. En los 70 se combatió al terrorismo, ¿dónde están los que lo combatieron? Presos”.
En diálogo con TN, la titular del Senado, en el comienzo del reportaje, hizo referencia al aumento de sueldos de los legisladores que luego debió retrotraer junto a Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados: “Un legislador es la persona que representa a las provincias, en la casa del Senado, y al pueblo argentino en Diputados. Creo que tienen que ser retribuidos en forma digna, para la importantísima tarea delegada. Si no sólo serían legisladores los ricos, los narcos. Tienen que ganar bien y no ganan bien”.
“Cristina Kirchner como pensionada gana más de 7 veces de lo que gana un senador, que gana menos de 2 millones. Que un jubilado gane lo que gane no me parece bien tampoco, no está bien nivelar para abajo. Subamos todo”, continuó.
Y completó: “Esto es sumamente importante, hay 72 senadores a los que les estamos delegando nuestra vida. Legislan sobre derecho a la propiedad. Es una realidad que la función que les estamos delegando es vital. Si les pagás poco van a ser susceptibles a la corrupción. La corrupción es parte de una dignidad. Todos tienen que ganar de acuerdo a la función y responsabilidad que tienen. El aumento se tendría que haber dado, pero dí marcha atrás porque me lo pidió el Presidente. Milei consideró que, dado que el pueblo argentino está haciendo un esfuerzo sobrehumano, la clase política tenía que acompañar. Considero que tiene que haber paridad en los ingresos de los tres poderes. Habría que congelar a todos. Jueces. Todos. Nosotros acá hacemos nuestro esfuerzo. Espero que en los otros poderes también lo hagan”.
“No me voy a meter en el bolsillo de nadie. Acá defendí los sueldos. No soy senadora, pero presido y si un senador vive a muchos kilómetros y tiene que mantener su casa, su orígen, es difícil que lo hagan con lo que ganan”, cerró.
Sobre su relación con Milei, la Vicepresidenta expresó: “Está bien. Somos dos personas que se complementan. Él es más vehemente en la vida pública y tranquilo en privado. Yo al revés, y nos complementamos. Creo que es lo que privilegió el pueblo argentino porque es algo muy completo. Hoy desayunamos. Me esperó con galletitas tipo exprés y le dije ‘qué bodrio’, dame una medialuna’. Me dijo ‘pedí lo que quieras’. Hay buena onda”.
Y añadió: “Viste cómo es la susceptibilidad, no me sentí tocada después de la sesión del DNU. Estaba en juego la institucionalidad. Yo no puedo hacer lo que quiera, esto tiene que funcionar, se tienen que debatir las leyes. Yo soy un árbitro. El DNU ya tenía varios pedidos de muchos senadores para que se trataran. Puedo buscar el momento, pero no estar eternamente deteniéndolo”.
Sin embargo, confió en que el DNU continuará vigente: “No creo que se caiga, pero se va a dirimir en Diputados. Tenemos un plan B y C. Lo ha dicho el Presidente. Acá hay impulso de tratar las leyes. La ley de Bases se puede volver a mandar. El tiempo corre y tenemos necesidad de que se arbitren nuevas reglas porque la gente votó un cambio. Pero también está la institucionalidad y vamos a respetar las leyes. El Estado no se destruyó en dos minutos, no lo podemos reconstruir en dos minutos”.
En este punto, la dirigente lanzó duras críticas contra Cristina Kirchner: “No quiero ser Cristina. En 2023 sesionaron cinco veces con toda la furia. Hay declaraciones escandalosas en boca de personajes, como la ex presidente. No puede ser que un gobierno que no tiene ni cuatro meses tenga estos rumores destituyentes. No sé quién le preguntó su opinión, ya tuvo muchos años para hablar. Debería llamarse a silencio, sobre todo en cuestiones destituyentes. Lo de Cristina me genera indignación. Es la falla del sistema democrático”.
Otro dardo para el kirchnerismo fue cuando se refirió al busto de Néstor Kirchner en el Senado: “Está en el bloque del kirchnerismo, donde tiene que estar, con los que lo quieren. Es una casa de todas las provincias, no de los Kirchner. Lo manejamos con mucho respeto. Consideramos que tiene que estar con aquellos que sostienen su recuerdo. No hicimos de esto una causa para hacerles bullying. Para qué me buscan si ya saben cómo me pongo. Para mí fue un corrupto, pero murió en presunción de inocencia. Aunque tengo mi opinión personal”.
En otro tramo de la entrevista, Villarruel anticipó que en el Gobierno no se está hablando de anunciar un indulto a los militares el próximo 24 de marzo: “Que yo sepa no me consta que se esté hablando seriamente de un indulto. Yo lo he dicho en redes. La solución no es el indulto ni la amnistía, es jurídica. El derecho no dice lo que se interpretó. Estirar el derecho es la solución”.
Conectado con esta discusión, también se refirió a la posibilidad de introducir el servicio militar obligatorio: “Es un tema de morbo. Creo que tiene que haber un servicio militar. Tiene que ser eficiente, con un presupuesto acorde para lo que estamos defendiendo. Argentina es la octava extensión territorial y tiene uno de los presupuestos más bajos. Les estamos pidiendo que defiendan el país, el espacio aéreo, marítimo. Es muy bajo el presupuesto. El servicio militar, para que se obligatorio, actualmente las condiciones no están dadas. Ganan mal. Un militar es un universitario que gana un sueldo sumamente bajo”.
Sorpresivamente, cuando el periodista Jonatan Viale le preguntó si en un futuro tenía aspiraciones presidenciales, la ex diputada no lo descartó: “Cuando termine mi mandato quiero que digan ‘qué flor de Vicepresidente que fue’. ¿Flor de Presidente? No sé, no me desvela. No lo descarto, tampoco me quita el sueño”.
Sobre Malvinas, de cara al homenaje del 2 de abril, anticipó que habrá una ceremonia en el Senado: “Teníamos ganas de un desfile militar pero tiene un costo muy oneroso. Vamos a hacer un homenaje a los veteranos. Yo tengo Malvinas en el corazón todos los días de mi vida. Siempre es 2 de abril. El Presidente los tiene presentes a los veteranos. Él me eligió sabiendo que es una de las causas que más me importan”.
Y eligió no confrontar con Diana Mondino, la Canciller, porque la disputa con Gran Bretaña “es un tema sumamente álgido” y consideró que el gobierno británico “es una potencia fuera de nuestro continente teniendo injerencia en nuestro mar”.
Un tema que causó polémica esta semana fue la revelación de que una senadora de La Libertad Avanza, Vilma Bedia, había contratado a familiares como empleados en la Cámara. Al respecto, Villarruel manifestó: “Con el Presidente hablamos con ella. Yo tengo que hablar hoy. El presidente lo hizo ayer. Entiendo que una persona de tu grupo familiar puede ser de tu grupo de confianza. Yo no tengo a nadie. Javier tiene a Karina, pero ella laburó a cuatro manos. Si yo hoy soy vice en parte también es gracias a ella. Las dos queremos a Javier. Las dos somos bravas. Pobre jamoncito”.
“Me parece genial que tengas tanta familia de confianza, pero vamos a dar el ejemplo. Podés conservar al que sea de mayor utilidad en tu labor legislativa. El resto no tiene que estar trabajando en el Senado. No está bien. Vinimos a cambiar algo y nos tenemos que comportar en consonancia”, finalizó.
En el cierre de la entrevista, la Vicepresidenta hizo mención a una posible visita del papa Francisco: “Me gustaría que viniera. Tiene que venir a su patria de origen, abrazarse con el pueblo argentino. Acá somos críticos con los grandes. Tiene que tener su abrazo, lo estamos esperando. Ojalá Dios le de la salud para que puede venir”.