A días del revuelo por su rechazo al DNU 70/2023 en la votación del jueves pasado en el Senado, el presidente de la Unión Cívica Radical (UCR), Martín Lousteau, ratificó sus críticas a la “inconstitucionalidad” del decreto que desregula la economía y aseguró que “no podría caminar por la calle si hubiese votado a favor, porque no podría dar ni un solo motivo para justificarlo”.
En un encuentro junto a dirigentes de la Franja Morada -el histórico brazo universitario del radicalismo-, Lousteau minimizó que los seguidores de Javier Milei y del oficialismo descarguen su malestar en redes sociales contra las figuras de la oposición. Es que esta semana, el propio senador nacional fue uno de los blancos de reproches de parte de funcionarios nacional y de usuarios de las plataformas por su postura en la Cámara alta.
“Si tenemos miedo a que nos digan algo en Twitter, nunca vamos a poder cambiar la Argentina”, dijo el titular del partido centenario sobre el hostigamiento virtual. “No me da miedo el gobierno, me da miedo que la sociedad tenga miedo y la única manera es que los argentinos vean que nosotros no tenemos miedo”, advirtió.
Según la mirada del referente del espacio UCR-Evolución, “los que tienen miedo de salir a la calle por votar en lo que creen son casta”. “En estos 40 años podemos rescatar la democracia porque Alfonsín la construyó sin atajos y sin miedos, eso que construyó Raúl hoy está en riesgo porque se ataca al que piensa distinto”, agregó.
El presidente del Comité Nacional está convencido de que la UCR debe ser oposición y construir una alternativa de gobierno. Sin embargo, esta postura choca con los deseos de la gran mayoría de los gobernadores de la UCR y un importante grupo de legisladores, que tras el rechazo al DNU en el Senado, se diferenciaron del senador nacional y emitieron un documento en el que manifestaron su apoyo a “las reformas estructurales” que está impulsando Javier Milei.
Lousteau, en contraste, mantiene una postura de confrontación con la gestión libertaria. “Si queremos honrar de verdad a nuestros próceres, tenemos que hacer lo que ellos harían en nuestro lugar”, dijo este sábado, y agregó: “Hay que animarse a ser anti moda”.
El senador radical participó hoy de un encuentro en Ciudad Universitaria con dirigentes de la Franja Morada para ponerse a disposición del movimiento estudiantil en la defensa de la educación pública. De la reunión participaron la presidenta de la Federación Universitaria Argentina (FUA), Piera Fernández, la titular de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA), Lula Levy, la diputada nacional Danya Tavela y referentes de 22 universidades públicas de todo el país.
“Este es un momento para la tranquilidad y la templanza, nosotros no somos unos locos que nos vamos a entregar a un país que no nos guste”, afirmó Tavela sobre el actual contexto político. “Está claro que este modelo de país que propone Milei no es el que queremos los radicales porque es un país que deja afuera al 70% de los argentinos”, apuntó, en sintonía con el discurso de Martín Lousteau. Y concluyó: “Hoy tenemos que revelarnos de manera colectiva para aquellos que quieren quitarnos nuestras libertades”.
La postura de Lousteau produjo nuevamente ruido interno al interior del radicalismo. Su voto negativo contra el DNU fue carne de cañón para sus principales adversarios: el mendocino Alfredo Cornejo y el correntino Gustavo Valdés. Ambos gobernadores son los líderes de Causa Federal (ex Grupo Malbec) y quienes apoyan un “cambio” en el país y exigen una “UCR moderna”. Ambos se enfrentaron a Lousteau en las elecciones por el Comité Nacional y salieron derrotados. Junto con Leandro Zdero (Chaco) y Carlos Sadir (Jujuy), y los jefes de bloque radicales, Eduardo Vischi (Senado) y Rodrigo De Loredo (Diputados), firmaron un comunicado en un claro rechazo a la decisión del líder de Evolución.
Los desacuerdos surgen del hecho que los gobernadores son representantes de la voluntad popular de sus provincias, donde la imagen de Milei se mantiene alta. Pero también hay necesidades económicas. Los mandatarios tienen que defender su caja y no pueden confrontar directamente con las medidas que impulsa el Presidente, que ya mostró su voluntad de ajustar los recursos que envía Nación a las provincias. De hecho, según pudo averiguar Infobae, en la reunión de bloque previa a la votación, los radicales iban a votar divididos, pero finalmente los llamados de los gobernadores cambiaron el sentido de la ecuación.
“Una cosa es la postura que tienen los radicales puertas adentro y otra cosa es cuando van y votan. Puertas adentro, todos o casi todos dicen que es inconstitucional y que es una barbaridad. Y después votan distinto. Algunos porque genuinamente habrán cambiado de posición, otros por conveniencia y otros por temor, porque este es un Gobierno que amedrenta, que amenaza, que infunde temor”, sostuvo Lousteau luego de emitir su voto negativo.