La reunión de Gabinete prevista para hoy -se realiza todos los martes y jueves- finalmente fue suspendida por “razones de agenda”, según supo Infobae de fuentes oficiales.
La noticia se conoció en medio de la enorme expectativa que hay por la sesión que se llevará a cabo hoy en el Senado -desde las 11 de la mañana- para tratar el DNU 70/23 que desregulariza la economía.
En ese contexto, el presidente Javier Milei y todos los ministros políticos de su gabinete están enfocados en el debate parlamentario. Desde anoche y en las primeras horas de hoy hay llamados frenéticos a los gobernadores para evitar el rechazo al decreto de necesidad y urgencia.
El encuentro de Javier Milei -quien llegó esta mañana a la Casa Rosada a las 8.34- con sus ministros suele contar con la presencia de Victoria Villarruel, pero en las últimas horas la titular de la Cámara Alta fue blanco de críticas internas por impulsar el debate que, en caso de derrota, tendría un alto costo político para la administración libertaria.
“La Oficina del Presidente expresa su preocupación por la decisión unilateral de algunos sectores de la clase política que pretenden avanzar con una agenda propia e inconsulta, a fin de entorpecer las negociaciones y el diálogo entre los distintos sectores de la dirigencia política”, dice el texto que publicó el gobierno nacional, en un mensaje que muchos leen como un reproche directo a la vicepresidente.
“El Gobierno Nacional espera que el Poder Legislativo no se deje cautivar por el canto de sirena de quienes pretenden ‘anotarse’ victorias de corto plazo en detrimento del futuro de los 45 millones de argentinos”, se apunta en el escrito que se conoció sobre la tarde noche del miércoles, una vez que se confirmó la convocatoria a la sesión en el Senado.
En este contexto, es evidente que el foco de la reunión de gabinete no iba a estar en la escalada de violencia que sufre Rosario ni en los efectos del temporal que golpea al AMBA, sino en el debate parlamentario que puede poner en riesgo parte de los planes del oficialismo y podría marcar un punto de inflexión en la interna que hoy parece dividir aguas entre Milei y Villarruel.
Villarruel había intervenido al principio de la actual gestión en muchas de las reuniones de Gabinete que se hicieron en el salón Eva Perón. Luego esas participaciones fueron cada vez más esporádicas. Su última vez en una reunión de este tipo había sido el jueves 7 de marzo, el día previo a la reunión con los gobernadores. En esa ocasión Milei no encabezó el encuentro.
Las diferencias entre Milei y Villarruel fueron en aumento en los últimos días, sobre todo por la decisión de la titular del Senado de demorar la firma de la resolución que anuló la suba de las dietas de los legisladores en un 30%. Tardó 4 días más que el presidente de Diputados, Martín Menem, en sumarse a esa señal que Milei quería entregarle a la sociedad sobre el “esfuerzo” que hace la política en medio de la crisis económica.
La incorporación de la discusión del DNU en la sesión de hoy, que la oposición reclamaba desde hacía tiempo discutir en el recinto, principalmente los integrantes de Unidad Ciudadana y del Frente Nacional y Popular, sorprendió al Poder Ejecutivo Nacional, que pretendía postergar el debate.
Con menos de 100 días de gestión entre los principales funcionarios y asesores del Gobierno estaban convencidos de que el DNU no tenía que ser tratado hasta tanto el oficialismo no tuviera garantizados los 37 votos afirmativos que necesita para ratificarlo, un número que hoy estaría lejos de conseguir. El peronismo cuenta con 33 senadores. La posición de la UCR, que cuenta con 13 bancas, podría ser decisiva para decidir la aprobación o el rechazo.
En el temario que incluye el DNU 70/2023 también aparecen incluídos el retiro e ingresos de pliegos -embajadores, judiciales-, convenios internacionales y la autorización al presidente para que se ausente del país durante este año.