El oficialismo en la Cámara de Diputados finalmente conformó la comisión de Previsión Social y convocó a su primera reunión este miércoles a las 14. La jugada de Martín Menem, titular de la Cámara baja, busca desactivar la sesión especial que había pedido el bloque Hacemos Coalición Federal para el mismo día a las 12.
Desde el bloque que lidera Miguel Ángel Pichetto apuntan a abrir el recinto por primera vez durante el período ordinario para hacer un emplazamiento, es decir obligar al oficialismo a constituir las comisiones que todavía no están funcionando y ponerle un límite de tiempo para firmar un dictamen en base a los proyectos que tienen estado parlamentario.
El objetivo de los dialoguistas es que la nueva fórmula se apruebe antes del 15 de abril, mientras que el Gobierno no muestra ningún apuro por tratar una nueva fórmula. Desde la Casa Rosada sólo adelantaron que la incluirían en la nueva versión de la Ley Ómnibus, pero no dieron más detalles sobre cuándo llegaría al Congreso.
En concreto, el proyecto de la Coalición Cívica (que integra HCF) dispone que las jubilaciones se ajusten a partir de abril por el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que elabora el INDEC conforme la inflación de febrero, más un aumento del 20,6% que busca compensar la suba de precios de enero.
Para alcanzar el quórum contaban con la presencia de los 99 diputados de Unión por la Patria, los 5 del Frente de Izquierda, los 8 de Innovación Federal y un sector importante de la UCR, que atraviesa turbulencias internas por su relación con el Gobierno.
Ayer, el bloque que conduce Rodrigo de Loredo emitió un comunicado en el que exigían al Gobierno que convoque a la comisión de Previsión Social pero daban a entender que no aportaría al quórum para abrir la sesión especial.
“Distintos bloques han acudido legítimamente a solicitar sesiones especiales. El riesgo de las mismas es que, al no juntar dos tercios de los miembros, no logren resolver los temas generando una falsa expectativa y más frustración. Peor aún, pudiendo servir de escenario especulativo al kirchnerismo para una sesión sin efecto práctico mayor que poner en funcionamiento una comisión”, señalaron.
Sin embargo, según pudo saber Infobae, un grupo que podría superar la decena de diputados, encabezados por Facundo Manes, estaban dispuestos a asumir una posición más confrontativa contra el oficialismo y participar de la sesión.
El PRO ya había dejado en claro que no se sumaría a la sesión especial, a pesar de que María Eugenia Vidal presentó un proyecto propio sobre jubilaciones con amplio apoyo de su bloque. “Sobre la fórmula jubilatoria conversamos y está la intención del Gobierno de sumar el tema en el proyecto que van a enviar en los próximos días. Habrá sesión cuando el Gobierno decida convocarla y con el temario que consideren”, resumieron, en clara sintonía con el oficialismo.
Si bien el peronismo se inclinaba por dar quórum, no lo hacía con el objetivo de avanzar específicamente con la fórmula que impulsa la Coalición Cívica sino para “comenzar a construir una agenda parlamentaria”. Cabe destacar que la fórmula actual fue implementada durante el gobierno de Alberto Fernández.
En ese sentido, proponían ampliar los temas en discusión y también emplazar a las comisiones a discutir los proyectos sobre el Fondo de Incentivo Docente (FONID), el Fondo Compensador del Transporte y otros temas vinculados a las arcas provinciales.
Además de la decisión de convocar a la comisión de Previsión Social, que podría terminar de influir sobre el radicalismo y los bloques provinciales como Innovación Federal para no dar quórum, el fuerte temporal también colaboró para cubrir con un manto de dudas la sesión de mañana. La lluvia y el viento obligaron a cancelar muchos vuelos y algunas provincias solo tienen un servicio al día con destino Buenos Aires. Según pudo saber Infobae, varios diputados de provincias del norte y del sur del país analizaban vías alternativas para viajar, no todos podrían llegar a tiempo. A su vez, los que tenían dudas sobre su participación, tendrán una excusa perfecta para ausentarse.
Dado que para tratar un proyecto sin dictamen se necesita una mayoría especial de dos tercios, los dialoguistas tenían en claro que nunca llegarían con los 171 votos para aprobar su proyecto “sobre tablas”. Por eso, explicaban que su objetivo político era “marcarle la cancha” al Gobierno.
En una reunión de bloque que terminó pasadas las 17, el bloque de Pichetto decidió bajar al recinto con o sin quórum. “El Gobierno tuvo una semana para convocar la comisión y lo hizo recién hoy, luego de hablarles a todos y sin abrir más comisiones; sin esta movida no lo iban a hacer”, señalaron.
“Si hay sesión es imposible que no se cole el tema de la violencia en Rosario”, analizó un diputado de Unión por la Patria. Tanto el radicalismo como Hacemos Coalición Federal presentaron por estas horas proyectos para declarar la emergencia en seguridad pública en la provincia de Santa Fe. De hecho, incluir el proyecto del radical Mario Barletta era un “guiño” para hacer más robusto el quórum.
Para el peronismo, los pedidos que hizo Patricia Bullrich son “puro show”, ya que consideran que en el marco del Comité de Crisis convocado el viernes pasado tiene todas las herramientas para hacer frente a la escalada de violencia narco.