El cordobés Osvaldo Giordano, quien durante poco más de dos meses fuera director de la ANSES en el actual gobierno de Javier Milei, dijo esta mañana en una entrevista radial que “es dramático el nivel de caída en los haberes de los jubilados: es el peor del siglo”.
El ex funcionario, quien fuera despedido por el presidente Javier Milei luego de que su esposa, la diputada Alejandra Torres, votara en contra de la Ley Bases en el debate de la iniciativa en el Congreso Nacional el mes pasado, expresó en CNN Radio que “es imprescindible revisar la fórmula de actualización” de los haberes jubilatorios aunque “no es el punto central de debate del sistema”.
Cuando le plantearon la baja que habían sufrido las jubilaciones mínimas en los últimos meses, donde los haberes mínimos quedaron en 180 dólares. “Hubo una caída generalizada que llevó a estar por debajo de los niveles de 2002″, respondió Giordano, quien detalló que en su corta gestión apuntó a “mejorar el nivel de la ANSES” a hacerlo “más ágil, más controlado, bajar gastos administrativos, cosas que no tienen que ver con la mejora en los haberes”.
Giordano, quien recientemente cobró mayor notoriedad tras conocerse que había dado de baja la contratación de seguros millonarios que había dispuesto el ex presidente Alberto Fernández y que derivó en una investigación judicial en curso, propuso para mejorar los ingresos del sector “ir a un índice mensual por la altísima inflación que sufrimos. Deberíamos ir a un índice que actualice, que empalme correctamente con la fórmula vieja. No solucionará el problema de fondo, sino que le da la seguridad de que no va a seguir perdiendo, que lo que cobra va a seguir siendo lo mismo que, el único paliativo que puede dar este instrumento”. En ese sentido dijo que es “el Congreso” el que “debe brindar soluciones.
Quien fuera convocado por su perfil técnico para llevar adelante la modernización del organismo que anteriormente dirigió la dirigente camporista Fernanda Raverta también opinó sobre los problemas que atraviesa el sector provisional. Sobre qué hacer con quienes no pudieron aportar en tiempo y forma opinó que “lo que hace el resto del mundo, si una persona llega a determinada edad, no puede seguir generando ingresos con su trabajo y no tuvo la oportunidad de hacer los aportes que le permitan tener una jubilación de carácter contributiva, es decir asociada a sus aportes, la sociedad no lo puede dejar desamparado”.
Expresó que ante esa posibilidad el Estado “tiene que tener un instrumento. El problema de la Argentina, que es un caso único, ante ese desafío se utilizó un pésimo instrumento que fueron las moratorias. Fueron asignadas de manera indiscriminada, donde entró gente que lo necesitaba pero también la que no lo necesitaba y ha generado un desbalance enorme en el sistema previsional y una gran injusticia porque niveló para abajo donde la gente que hizo aportes termina cobrando lo mismo que gente que no lo hizo. También hay gente que está en una situación mejor que los que aportaron. Creo que tenemos que discutir a futuro o seguir repitiendo los mismos errores”.
Además, el ex titular de la ANSES propuso como solución integral “una revisión del sistema que requiere de un cambio mucho más grande que un artículo, que es el de la movilidad”.
“Ese gran enredo es muy difícil de revertir porque hay derechos adquiridos que no se pueden cambiar”, detalló el ex funcionario. “Tenemos que seguir discutiendo para no cometer los mismos errores, tratar de buscarle paliativos depende de una discusión parlamentaria para estar mejor de lo que estamos hoy”, amplió.