El vínculo entre los gobernadores y la administración nacional que encabeza el presidente Javier Milei es uno de los temas centrales de la agenda política. En ese contexto, marcado por negociaciones permanentes y tensiones recurrentes, el oficialismo intenta conseguir respaldo de la mayor cantidad de mandatarios provinciales para formalizar el denominado Pacto de Mayo.
A pesar de esto, Maximiliano Pullaro cree que todavía “no hay claridad sobre cuál va a ser la propuesta del gobierno nacional a las provincias”. Y si bien se mantiene expectante, advirtió que ya perdieron muchos recursos el año pasado y consideró que es momento de ampliar el debate.
“Nosotros nos tenemos que arreglar con nuestros recursos, pero también tenemos reclamos que hacerle a la Nación. Hay provincias como la de Santa Fe a la que el gobierno le debe $600 mil millones... Eso también queremos ponerlo arriba de la mesa porque hay provincias que ponemos mucho para sostener el federalismo”, reclamó esta mañana el gobernador santafesino.
En la misma línea, Pullaro remarcó: “Si vamos a discutir lo que las provincias le deben a Nación, que por supuesto deben pagar y encontrar el equilibrio fiscal, también tenemos que discutir las deudas que tiene Nación con las provincias, por ejemplo con la mía”. La referencia al tema se produce luego de las quitas que (por diferentes razones) la administración nacional les hizo a Chubut y a la provincia de Buenos Aires.
En otro orden, en la previa de un encuentro con referentes del campo donde estará el presidente Milei, el gobernador de Santa Fe analizó la discusión tributaria y marcó su posición con firmeza: “Desde nuestro lugar nunca vamos a acompañar un sistema tributario que aumente la carga tributaria, y más al campo y a la industria, que son sectores que exportan y van a sacar la economía adelante”.
“Desde Santa Fe, nunca pero nunca vamos a acompañar un aumento de retenciones al campo y mucho menos a la industria”, enfatizó por si no había quedado clara su línea. “Mi provincia tiene 760 pymes que están exportando al mundo y no son grandes industrias, empezaron en un garage con una soldadora, hoy tienen 200-300 empleados y son las que sostienen las economías de muchas comunidades”, destacó para resaltar la importancia que tienen para la economía de la región.
En ese sentido, apuntó: “Ponerle retenciones a la industria y aumentárselas al campo tal vez es no entender el ADN del interior productivo”.
“El campo no es los latifundios que a veces se comunican desde los medios de Buenos Aires. El campo son unidades productivas de 50-100 hectáreas que trabajan el padre, el hijo y el abuelo... son economías familiares que todos los recursos que ganan los reinvierten para poder producir más”, aclaró a modo de cierre de su mensaje.
El consenso y el toma y daca
En el mismo evento se presentó Rogelio Frigerio, quien reiteró su respaldo al Pacto de Mayo y expresó su expectativa por la convocatoria del gobierno nacional a los gobernadores para una reunión que se realizará el viernes en la Casa Rosada.
“Mayo queda muy lejos, tenemos que trabajar todos los días y buscar puntos de encuentro, consensos, para que el Presidente tenga las herramientas para sacar al país de como lo dejó el populismo y que las provincias puedan ser solventes.”, destacó el gobernador de Entre Ríos.
En cuanto a las rispideces que puede haber entre Milei y algunos mandatarios provinciales, Frigerio consideró: “Con la responsabilidad que tenemos, nadie tiene derecho a ofenderse. Tenemos que trabajar juntos, sobre todo aquellos que coincidimos en el camino de la cultura del trabajo, el mérito, el orden... Los que coincidimos con esa visión tenemos que trabajar juntos. Esto no tiene que ser un toma y daca, yo apoyo lo que plantea el Presidente por convicción, no porque espero algo a cambio. Por supuesto, eso no quiere decir que no voy a defender los intereses de los entrerrianos, que me votaron para eso”.
Al respecto, al igual que Pullaro, el mandatario provincial y referente del PRO señaló que es necesario ampliar la agenda de negociación: “Entre Ríos no tiene transferida su caja jubilatoria, desde Nación hace años que no le pasan los recursos que por ley le corresponden y quiero discutir estos temas”.
Finalmente Frigerio abogó por una reforma laboral: “La Argentina necesita cambiar leyes que tienen 50-60 años, es una locura que no nos sentemos a adoptar las normas a la realidad moderna de los vínculos laborales”.