El periodista y exprecandidato presidencial Santiago Cúneo apuntó hoy contra el Gobierno, y aseguró que el programa económico de Javier Milei y del ministro Luis “Toto” Caputo representa una “confiscación” del patrimonio de la clase media y que dolarizar la economía sería un “modelo criminal de 80% de pobres y 20% de administradores del saqueo”.
“El Banco Central ahora compra dólares. (El Presidente) mintió cuando dijo que lo iba a cerrar, lo usa para liquidar los ahorros de la clase media”, consideró Cúneo, en diálogo con Infobae. “(El Presidente) les roba las reservas a los ciudadanos de clase media. Lo planificó. En la campaña decía que ahorren en dólares y la gente votó pensando que esos dólares iban a valer más con la devaluación, pero el Gobierno devaluó, dejó retrasado el salario, obligando a vender los ahorros para pagar sus obligaciones”.
En esta línea, aseguró que cuando la clase media “ya no tenga más ahorros” el Gobierno podría avanzar a una nueva fase, “el martillazo final”, en marzo. “El aumento del costo de los servicios públicos, colegios, obras sociales, todo eso va a terminar de llevar a la clase media a un estado de pobreza, a la licuación de los salarios, a un endeudamiento irreversible, y en dólares”.
“Es llevar al país a niveles de economías africanas, es una Argentina con la bandera de remate”, graficó Cúneo.
No es la primera vez que el periodista advierte sobre esta situación. “El Estado devaluó el tipo de cambio oficial, planchó el paralelo y chupa los dólares del colchón y de las cajas de seguridad. Y en poquitos meses la clase media se gastó los dólares que tenía ahorrado”, graficó esta semana en el canal Extra. “Como no consigue dólares del extranjero, generó esta situación artificial para que la clase media liquide los dólares”, completó.
Por otro lado, y ante la consulta de este medio, realizó una proyección de la situación social del país en el corto plazo, con base en el último informe de pobreza difundido por el Observatorio Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), que registró un 57,4% de la población argentina pobre, el peor registro en 20 años. “El modelo criminal es 80% de pobres y 20% administradores del saqueo”, consideró.
Ante esta situación, advirtió que es inevitable “un estallido”, aunque consideró que será “anárquico”. “No hay dudas de que eso va a suceder, pero ahora la resistencia es transversal e individual, todavía no hay contenido colectivo; la gente empieza a resistir de manera individual. La única salida de esto es ir a un modelo confederal, que pueden mostrar con éxito la confederación rusa, Estados Unidos o Brasil”, sostuvo.
Dolarización a tiro
La semana pasada, Milei concedió un reportaje a LN+ en donde sostuvo que su gobierno avanza con el plan de dolarizar la economía. “Sigo con esa idea”, ratificó en aquel momento, y agregó: “Hay un trabajo enorme que se está haciendo desde el Banco Central y que, probablemente, salvó gente que entiende de la materia, no se está viendo”.
“Nosotros emitimos dinero para comprar dólares, compramos 7000 millones de dólares. Tenemos un problema de la emisión endógena que son las Leliqs. En ese contexto, tenemos esas dos fuentes de emisión monetaria. La base no varía, está clavada en 10 millones. En ese contexto, lo que vos tenés es que estamos comprimiendo por sector fiscal y con el Bopreal”, indicó.
Y completó: “Cuando mirás el balance del BCRA, empezaste a desinflar pasivos y activos, limpiamos la deuda de los importadores, pero hoy tenemos una base monetaria de 8 mil millones y compramos dólares por 7 mil millones. Tenemos cubierto el 87,5% de la base. Al tipo de cambio de mercado estás a un tiro de dolarizar. Eso ya lo tenés. Te falta limpiar el resto de los pasivos remunerados -pases- y lo que necesitas es una reforma del sistema financiero para que no sea vulnerable a una corrida. La idea está, pero demanda tiempo. Si siguiéramos limpiando el balance del BCRA al ritmo que lo hacemos, el FMI estima que nosotros podemos abrir el cepo a mitad de año”.
Por último, y con relación a la relativa estabilidad del dólar paralelo, en sintonía con un fuerte incremento en los precios de los alimentos y servicios, analistas realizaron la siguiente advertencia: “Ingresos diezmados por una inflación en máximos del siglo XXI obligaron a muchos ahorristas y también pequeños empresarios a desprenderse de parte de sus tenencias en divisas para llegar a fin de mes”.