Después de los cruces que hubo entre el presidente Javier Milei y la cantante Lali Espósito por los sueldos que percibían los artistas que participaban en eventos organizados por el Estado o por el sector privado y que reciben beneficios impositivos, Martín Menem ratificó la postura encarnada por el oficialismo al señalar que un gobierno no puede utilizar el dinero de las recaudaciones para “elegir las preferencias de los habitantes”. “Es propaganda política”, sostuvo.
Hasta el momento, el presidente de la Cámara de Diputados no se había pronunciado sobre el debate acerca de si las autoridades nacionales, provinciales o municipales debían destinar los fondos públicos para cubrir los gastos de fiestas y festivales. Sin embargo, el ida y vuelta entre la estrella pop y el mandatario durante la última semana lo llevó a plantear que la reducción de impuestos serían favorables para los seguidores de los artistas y las administraciones estatales, quienes no tendrían que preocuparse por organizar espectáculos gratuitos.
“Si a vos te gusta tal artista, es mejor que pagues menos impuesto y, si querés, te saques un ticket y vos pagues tu entrada para ir a verlo”, postuló el legislador riojano al señalar que esta medida impactaría en una reducción de los precios, por lo que sería más accesible para la población. En este sentido, remarcó que la selección de músicos que participarían en esta clase de eventos no sería representativa, debido a que no todos compartirían el mismo tipo de consumo musical.
No obstante, cuando el diputado fue consultado en el programa “La Noche de Mirtha”, emitido por la señal de El Trece, sobre el pago que se le hacen a los artistas por ser convocados a eventos de origen estatal, Menem aseveró que “en este momento, ni en ningún momento, podemos usar dinero de los contribuyentes para nosotros, los gobernantes, para elegir la preferencia de los habitantes”.
De esta manera, el titular de la Cámara Baja continuó: “Si le pagamos un cachet todas las semanas del mismo sector político, automáticamente se alinean porque se transforma en una fuente de trabajo”, en referencia a las presuntas posturas ideológicas que pudieran tomar los intérpretes.
“Es propaganda política”, señaló el integrante de La Libertad Avanza (LLA). Además, Menem criticó a las acusaciones contra el Gobierno por supuestamente “atacar a la cultura”, frase que consideró como “un lindo enunciado en el que se esconden detrás”.
“En tu casa no gastas de más, ahora llegan al poder y gastan mucho más de lo que pueden. ¿Y quiénes son las víctimas? 45 millones de personas”, reclamó el diputado sobre el manejo de dinero que realizarían algunos mandatarios provinciales, quienes justifican sus acciones “a través de lindos enunciados”, según planteó.
Incluso, afirmó que los eventos organizados por administraciones de origen estatal no resultarían gratuitos, ya que éstos costos se traducirían en una suba de impuestos, tomas de deuda o impresión de billetes por parte del Banco Central. “Esto viene pasando hace décadas en la Argentina”, destacó Menem al recordar que casi un 60% de la población había votado la propuesta de Milei con la esperanza de un cambio.
Por otro lado, el presidente de Diputados defendió los ajustes que se realizaron con el objetivo de bajar los índices de inflación y de gasto público, debido a que a lo largo de la conversación remarcó que “la inflación que te trastorna todo el desenvolvimiento normal de cualquier sociedad organizada”.
Frente a la situación actual que se vive en el país, aseguró que la responsabilidad recae en los Estados que no adoptaron políticas responsables para manejar los fondos públicos. “El problema histórico de la Argentina es el déficit, que es un Estado que gasta más de lo que recauda”, sentenció al agregar que para revertir el panorama “hay que estar firmes y acá tenemos un presidente, como hace mucho tiempo no tenemos, que está dispuesto a eliminar la inflación para siempre en la Argentina”.
Por este motivo, el político riojano explicó que los pasos a seguir para tener un país en crecimiento estarían enfocados a “terminar con la inflación, darle los instrumentos a la economía para que sea más ágil, sacarle al Estado de encima, no tener un Estado que gaste más de lo que pierda”. Además, depositó su confianza en que “se puede gobernar” de esta manera, debido a que aseguró que la gente apoya las modificaciones que buscaron aplicar.