En el Gobierno aseguran constantemente que hay un objetivo de gestión que no se va a modificar: el déficit cero y poner las cuentas del Estado en orden. Por eso, este argumento usan los principales integrantes del Gabinete para sostener que no se va a modificar el aumento de las retenciones para determinados productos, un reclamo que vienen haciendo los gobernadores del interior del país desde que se presentó la denominada Ley Ómnibus.
“Si no se aprueban todas las medidas económicas propuestas en la ley, como dijo el presidente Javier Milei ayer (por el martes), el ajuste será mayor, fundamentalmente para las provincias”, advirtió el titular del Palacio de Hacienda, Luis Caputo, en su cuenta de X.
Aunque esta fue una de las cuestiones que más se discutieron del paquete de proyectos en las reuniones de comisiones de la Cámara de Diputados, que recién emitió dictamen de la iniciativa en la madrugada del miércoles, tras semanas de debate, el oficialismo cree que los legisladores dialoguistas no van a estar dispuestos a votar en contra de este apartado.
De hecho, a pesar de que no tienen una postura formal al respecto, varios integrantes del Gabinete le restaron importancia a la movilización y paro general que realizó la CGT y desestiman que las críticas de los sindicalistas afecten el tratamiento de la ley.
Si bien los mandatarios provinciales le siguen pidiendo a la Nación que se modifiquen los artículos correspondientes para que, como ya aceptó con determinados productos regionales, el resto del mercado agropecuario tampoco pague el impuesto a la exportación, no habría más concesiones.
En la Casa Rosada consideran que se trata en realidad de una puja política y no tanto de un reclamo genuino, ya que -aseguran- al campo no le preocupa tanto el gravamen en cuestión y destacan que el sector se vio beneficiado con la reducción de la brecha cambiaria.
No obstante, el próximo jueves Caputo; el secretario de Trabajo, Omar Yasin; el titular de la Unidad Transitoria para la Desregulación de la Economía, Federico Sturzenegger, y el secretario de Comunicación y Prensa, Eduardo Serenellini, entre otros funcionarios, recibirán en la Casa Rosada a representantes de las cámaras empresarias, productivas y comerciales, para analizar la ley ómnibus.
De la reunión participarán, por ejemplo, integrantes de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (CONINAGRO), de la Sociedad Rural Argentina (SRA), de la Federación Agraria Argentina (FAA) y de la Confederación Rural Argentina (CRA).
En ese encuentro, los integrantes del Gabinete defenderán el proyecto y buscarán, entre otras cosas, el respaldo de las entidades a las retenciones. Como carta de cambio, les recordarán que se mantiene la promesa de campaña de, cuando se recupere la economía, liberar el tipo de cambio.
Mientras tanto, en el ámbito parlamentario, el oficialismo decidió postergar el debate del paquete de proyectos hasta el martes de la semana próxima, para “estar más preparados” y continuar las conversaciones con la oposición dialoguista antes del tratamiento en el recinto.
En el Gobierno insisten en que el presidente Milei confía en que “va a primar el sentido común” y en que van a estar los votos necesarios para aprobar las reformas, pero niegan que se esté llevando adelante una negociación con el resto de los bloques.
Sin embargo, en la madrugada del miércoles sorprendió la decisión del diputado Agustín Fernández de votar a favor del dictamen de mayoría impulsado por La Libertad Avanza y no acompañar el de rechazo que presentó Unión por la Patria, espacio al cual pertenecía.
Durante la tarde, mientras se realizaba la marcha de la CGT en contra de la actual gestión, el tucumano, que responde al gobernador Osvaldo Jaldo, anunció la separación de su bloque y la creación de uno propio, llamado “Independencia”, junto a sus compañeras de banca Gladys Medina y Elia Fernández de Mansilla
Según pudo saber Infobae, los legisladores se acercaron al oficialismo después de acordar la derogación del régimen de protección del azúcar y la exclusión del limón y sus derivados de la suba de retenciones, que finalmente quedaron establecidas en 0 por ciento.
Si este apoyo se mantiene, La Libertad Avanza habría sumado tres votos a la hora de debatir la ley, mientras que ya tiene a una buena parte del PRO, principalmente a los que están más identificados con Mauricio Macri, con quien Milei habla telefónicamente todas las semanas.
Por otra parte, el oficialismo también está buscando la manera de poder sesionar en varios días, en lugar de debatir la iniciativa en una sola jornada, para evitar que los discursos se extiendan y se termine votando en la madrugada, como ocurrió en otras ocasiones.
Tras el cambio en el plazo, el paquete comenzaría a tratarse en Diputados el martes, por lo que las reuniones podrían prolongarse hasta el jueves, aunque esto todavía es una idea, ya que, más allá de la cuestión reglamentaria, también deben asegurarse que los legisladores vayan a estar presentes en todos los encuentros.
Durante lo que queda de esta semana y el inicio de la otra, los referentes del Gobierno, principalmente el ministro del Interior, Guillermo Francos, y el presidente de la Cámara baja, Martín Menem, seguirán con las conversaciones con gobernadores y líderes de la oposición, para tratar de que la mayor cantidad de artículos de la ley sean aprobados.
Queda, por ejemplo, acercar todavía posiciones con la Unión Cívica Radical (UCR), que mantiene sus críticas a las retenciones y a la eliminación de la fórmula de actualización de las jubilaciones para reemplazarla por aumentos definidos por el Poder Ejecutivo.
“Ministro Luis Caputo nuestro bloque permitió el día de ayer que su gobierno cuente con un dictamen de comisión en tiempo récord, pese a la inédita minoría del gobierno en el Parlamento. Las herramientas normativas para que lleve adelante su plan de gestión y económico las va a tener. Si su advertencia es para que ajustemos a los jubilados o aumentemos las retenciones, sepa que no va a suceder. Eso no va a ser ley”, remarcó el jefe de ese bloque en Diputados, Rodrigo de Loredo, ante el comentario del titular del Palacio de Hacienda sobre mayor ajuste a las provincias en caso de que no se sancione la medida.
Reforma tributaria
En cuanto a Ganancias, un impuesto que sí es coparticipable, a diferencia de las retenciones, si bien ya hay un principio de acuerdo para que los salarios vuelvan a pagarlo a partir del $1.250.000 brutos, el Gobierno asegura que es una medida transitoria.
En un mensaje oficial, en el que se buscó justificar el regreso de esta categoría, que afectará a más de 800 mil trabajadores, se remarcó que el gravamen se va a volver a revisar “en la medida en que se cumpla con los objetivos planteados, específicamente en cuanto a obtener superávit fiscal durante el transcurso del presente año”.
“Se deja plasmado en estos fundamentos y se comunica al Honorable Congreso de la Nación que durante el transcurso del año 2024 el Poder Ejecutivo Nacional presentará una reforma integral del sistema tributario con el fin de simplificarlo, lograr un aumento de la base de contribuyentes registrados e ir reduciendo la presión fiscal a partir del 1° de enero de 2025 en adelante”, se aclaró.
De acuerdo con lo que precisaron a Infobae fuentes de la Casa Rosada, en ese proyecto ya están trabajando los equipos económicos de Milei y de la actual ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que elaboró una iniciativa cuando era candidata a presidenta.
Lo que se pretende es que ambos grupos se reúnan para redactar una única ley que contenga aspectos de las dos ideas de reforma, aunque recién se presentará cuando termine el debate que todavía se está desarrollando en Diputados.