El Gobierno nacional oficializó hoy la designación del excanciller Jorge Faurie como embajador en Chile. Lo hizo a través de la publicación en el Boletín Oifical del decreto 77/2024.
Faurie nació el 24 de diciembre de 1951 y egresó del Instituto del Servicio Exterior de la Nación en 1976. Es abogado recibido de la Universidad Nacional del Litoral en abril de 1974. En mayo de 2017 reemplazó a Susana Malcorra al frente del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Faurie ya había sido vicecanciller de Carlos Ruckauf, jefe de protocolo en el Gobierno de Carlos Menem y también durante el traspaso de mando del presidente Mauricio Macri, cargo que también desempeñó en la reciente asunción de Javier Milei.
De extensa carrera profesional, Faurie ocupó lugares destacados durante las últimas cuatro décadas. Fue vicecónsul entre 1975 y 1976, ocupó la Secretaría General del Ministerio de Relaciones Exteriores en 1992, fue director nacional de Ceremonial del Ministerio de Relaciones Exteriores entre 1994 y 1997 y secretario de Relaciones Exteriores de la misma cartera durante el 2002. Fue embajador en Portugal entre el 2002 y 2013. Del 2014 al 2015 ocupó la Secretaría de Coordinación y Cooperación Internacional y, finalmente, en el 2016 llegó a la Embajada de París.
Faurie sucederá así a Rafael Bielsa, quien fue el representante en el país trasandino durante todo el Gobierno de Alberto Fernández.
Más allá de la designación de Faurie, el Gobierno aún debe formalizar los siete embajadores políticos, cuyos pliegos envió días atrás al Senado. Se trata de los candidatos a embajadores en EEUU, Gerardo Werthein; en Israel, el rabino Axel Wahnish; en India, Mariano Caucino; y en Francia a Ian Sielecki. El paquete incluye la continuidad de Daniel Scioli frente a la embajada de Brasil y de Guillermo Nielsen, ex embajador del gobierno de Alberto Fernández en Arabia Saudita, en la representación en Paraguay.
Según dejaron trascender desde Balcarce 50, la oficina del Presidente aspira a aprobar cuanto antes los pliegos con el objetivo de agilizar las relaciones bilaterales con esos países, sobre todo Estados Unidos, Israel y Francia.
El documento enviado tiene fecha 9 de enero, aunque su ingreso formal debe darse en la primera sesión que realice el Senado. La comisión de Acuerdos, que es quien tiene que darle dictamen a cada uno de estos pliegos, ya está conformada, por lo que podría sesionar para avanzar, pero en la oposición ven poco probable que ocurra antes de las sesiones ordinarias.
Parte de la falta de apuro en la oposición es que en esa misma comisión del Senado también se tienen que debatir los ascensos en el Poder Judicial y en las Fuerzas Armadas. En el caso de los primeros, la administración libertaria retiró en diciembre pasado 62 pliegos de jueces, fiscales y defensores oficiales que fueron enviados a la Cámara alta durante el gobierno de Alberto Fernández y que aún no contaban con dictamen definitivo.
Esto es algo que sucede en todos los cambios de Gobierno con la finalidad de darle a la nueva administración la posibilidad de que los analice y defina si los reenvía o los descarta.
Pero en el caso judicial no hay demasiados inconvenientes teniendo en cuenta que durante enero se encuentran de feria, por lo que no hay ascensos. Donde sí se realizaron fuertes cambios es en la estructura de las Fuerzas Armadas.
Hace pocos días se realizó el cambio de la cúpula de las Fuerzas. En ese sentido, el general de brigada Carlos Alberto Presti asumió la jefatura del Ejército Argentino, en medio de una fuerte purga en donde se pasó a retiro a 16 de los 55 generales.