El vicepresidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), Sergio Pikholtz, generó una profunda polémica y malestar luego de afirmar que “no hay civiles inocentes en Gaza” e insinuar que ni siquiera debía haber “piedad” con los menores de edad que allí residen.
“Como repetimos incansablemente no hay civiles inocentes en Gaza, tal vez sólo los niños de menos de cuatro años. Sin piedad con los asesinos de judíos. Venceremos”, dijo Pikholtz en un mensaje que publicó en su perfil de Twitter al que acompañó con un video.
El controvertido comentario causó un profundo enojo entre varios integrantes de la institución que Pikholtz representa, donde se debatía qué hacer al respecto. Las palabras del dirigente se viralizaron en las últimas horas, llevando a la DAIA a ser trending topic en redes sociales. Algunos, incluso, analizaban si no resultaría mejor que renunciara a su cargo.
Luego de más 20 horas de haberlo publicado y ante las presiones internas, Pikholtz decidió borrar el tuit. Sin embargo, muchos creen que el daño ya estaba hecho, no sólo hacia el interior de la DAIA, sino también a la campaña de Israel contra el terrorismo islámico de Hamas.
El 7 de octubre pasado, el grupo yihadista palestino cruzó la frontera israelí para asesinar, torturar, violar y secuestrar a civiles. Como consecuencia de ello, 1300 personas fueron masacradas y más de 200 raptadas. Desde entonces, el gobierno de Benjamin Netanyahu inició una guerra contra Hamas para terminar con la organización y su cúpula terrorista y política.
Durante esos casi tres meses de invasión a la Franja de Gaza, organismos internacionales de derechos humanos han cuestionado al gobierno de Tel Aviv por las bajas civiles, calificando de “desproporcionado” el uso de la fuerza pese a que fue Hamas el que inició la contienda. Las palabras de Pikholtz, entonces, desacreditan la propia argumentación israelí al justificar el uso de la fuerza contra civiles (a los que no reconoce) y niños inocentes.
En las próximas horas las autoridades de la DAIA, encabezada por su presidente Jorge Knoblovits, podría reunirse para debatir más formalmente la situación de Pikholtz y su futuro en la institución que -para muchos- quedó sumamente comprometida.
La situación en Medio Oriente
En medio de las polémicas declaraciones del dirigente de la DAIA, la situación es cada vez más crítica en Medio Oriente, donde la escalada pareciera no detenerse. El presidente del régimen iraní, Ebrahim Raisi, afirmó que las masacres perpetradas por Hamas el 7 de octubre provocarán la caída de Israel.
En su intervención en el funeral por las 89 víctimas de los atentados del Estado Islámico el miércoles, Raisi elogió a Hamas por los brutales ataques que dejaron unos 1.200 muertos y 240 rehenes retenidos en Gaza. “Sabemos que la operación ‘Inundación de Al-Aqsa’ supondrá el fin del régimen sionista”, señaló.
Al mismo tiempo, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) atacaron objetivos del grupo terrorista Hezbollah en Ayta-ash Shab y Majdal Zoun, en el sur del Líbano. Los objetivos incluían varias infraestructuras utilizadas por el grupo, junto con un puesto de observación y un emplazamiento militar controlado por operativos de Hezbollah, según el Ejército israelí.
Por su parte, las FDI atacaron más de 100 objetivos del grupo terrorista Hamas en la Franja de Gaza durante el último día.
Los ataques, llevados a cabo por fuerzas aéreas, marítimas y terrestres, alcanzaron centros de mando, posiciones de lanzamiento, depósitos de armas y otras infraestructuras de Hamás, según las FDI.
En al-Bureij, en el centro de Gaza, las tropas de la 414ª Unidad de Recogida de Inteligencia de Combate del Cuerpo de Defensa Fronteriza descubrieron a un grupo de agentes de Hamas que intentaban atacar un tanque de las FDI.
Las tropas iniciaron una persecución después de que los terroristas utilizaran un drone, y el ejército solicitó un ataque aéreo con aviones de combate después de que los hombres armados fueran vistos huyendo hacia un edificio, precisó el Ejército.