La Libertad Avanza agitó durante casi una semana la firma de un dictamen sobre la Boleta Única de Papel en el Senado. Ello no sólo no ocurrió el miércoles pasado, sino que el oficialismo -y parte de la oposición no kirchnerista- sabía que no tenía las voluntades para avanzar con un despacho y fue igual a la reunión, en una situación que pinceló un manejo rudimentario de la política y perjudicó a la titular de la Cámara alta, Victoria Villarruel, e incluso al propio Javier Milei, en medio de la lupa del mercado sobre la viabilidad del plan de Gobierno y medidas como el mega DNU -que desregula la economía- y la Ley Ómnibus.
Infobae contó anteayer, al término del plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales; y de Justicia del Senado, las quejas de legisladores de la oposición no kirchnerista en cuanto a la improvisación y la rapidez con la que La Libertad Avanza empujó la discusión. “Ninguno de ellos vino a preguntarnos qué íbamos a hacer. ¿Cómo se puede trabajar así? Pasamos de juntar 39 para votar autoridades a posponer un debate sobre boleta única. Festejan los K y queda expuesta la vicepresidenta”, manifestó un integrante de ese conglomerado a este medio.
Al día siguiente, en plena recolección de escombros, apareció un dato que agrava aún más la mala praxis del oficialismo: el jefe de La Libertad Avanza en la Cámara alta, Ezequiel Atauche, mantuvo un cónclave antes del plenario en cuestión con un puñado de senadores de la oposición no K, quienes le adelantaron la falta de adhesiones a un potencial dictamen y la sugerencia de activar un cuarto intermedio.
La jornada ya había comenzado mal para el oficialismo. Horas antes de boleta única, un plenario de comisiones no pudo avanzar con la totalidad de convenios internacionales que estaban en agenda. El problema no fue el cristinismo, sino que los propios “aliados” del 13 de diciembre pasado comenzaron a cascotear a La Libertad Avanza, que se mostró dubitativa en algunos tramos de la discusión y cedió ante las sugerencias de otros bloques.
“No tenían dictamen. Si sos oficialismo no podés ir sin tener dictamen, y no lo tenían. Con un panorama de este tipo y sólo siete senadores de 72 tenés que estar todos los días de despachito en despachito, de pasillito en pasillito. Acá, las cosas duran un ratito”, coreó en rima un experimentado asesor del Congreso que, horas antes del plenario, ya daba por caída la posibilidad de un despacho sobre boleta única.
En tanto, desde otro despacho se resaltó: “Los acuerdos no fueron tan taxativos como para sostenerse. Es un riesgo eso. Encima, hay déficit de gestión política. Si de los siete senadores no tenés a ninguno de los principales, como el jefe de bloque o el presidente provisional, defendiendo las iniciativas, se les va a hacer muy difícil. Además, esto es de todos los días. No se puede decir ‘ya está’ una semana y olvidarse. Hay que ‘caminarlos a todos’. En especial, a los ‘aceitosos’”.
Un tema no menor: durante los plenarios sobre convenios internacionales y de boleta única -el último, de resultado anticipado- aparecieron fisuras y contradicciones entre los propios bloques de la oposición no kirchnerista, algo que deberá tener en cuenta el oficialismo para mejorar su praxis política.
Además, llamó la atención la falta de coordinación del radicalismo, uno de los principales bloques impulsores de la Boleta Única de Papel en Diputados, donde se aprobó el proyecto en junio de 2022. En el Senado, la mendocina Mariana Juri hizo una defensa cerrada de la iniciativa y minutos más tarde el jefe de la bancada, Eduardo Vischi, se entregó sin chistar al pedido de cuarto intermedio solicitado por el peronista no K Carlos Espínola.
Desde un despacho radical deslizaron a este medio que la bancada tiene su propia interna. Allí tendría que intermediar su colega de bloque y presidente de la UCR, Martín Lousteau. El miércoles, el ex precandidato a jefe de Gobierno porteño fue reemplazado en dos comisiones y no apareció en la Cámara alta, donde un puñado de correligionarios exigió su presencia.
A pesar de lo sucedido, algunos de los legisladores opositores no kirchneristas desdramatizaron lo ocurrido anteayer. La finalidad de varios fue no regalarse ante siete senadores sin experiencia de La Libertad Avanza que quisieron manejarlos a control remoto. De hecho, ratificaron guiños a la Boleta Única de Papel en caso de que la misma llegue al recinto. No obstante, a partir de ahora nadie da nada por sentado.