Miguel Ángel Pichetto es uno de los hombres que más conocen los entretelones de la política argentina. Con una vasta experiencia legislativa, el excandidato a vicepresidente lleva 30 años en el Congreso, por lo que su mirada es de las más requeridas a la hora de actualizar la realidad.
Por estos días frenéticos, en los que el Gobierno ya dictó un DNU de desregulación de la economía y envió una Ley Ómnibus con una reforma integral de prácticamente todos los aspectos del funcionamiento del país y hasta la CGT convocó a un paro general, el rionegrino dio su mirada sobre la situación general y, tras cuestionar a la central obrera, le dejó un mensaje al presidente Javier Milei.
“No tiene lógica, creo que la CGT debería repensar este paro”, afirmó quien fuera el jefe del bloque de senadores del kirchnerismo durante los gobiernos de Cristina Kirchner, aunque posteriormente pasó a las filas del macrismo y hasta fue candidato a vicepresidente de Mauricio Macri en los comicios de 2019.
Durante una entrevista con el periodista Marcelo Longobardi en Radio Rivadavia, Pichetto dijo además que el paro “es prematuro” y aseguró que “se requiere un proceso de diálogo”, cosa que, dijo, “el presidente estaría dispuesto a abrir”.
“Me parece un error desde el punto de vista táctico. Lo que tendría que haber conformado es una mesa de seguimiento de precios y salarios. Me parece que no es oportuno y poco inteligente, es una opinión personal. Me parece que eso igual está en revisión, están conversando”, añadió.
La semana pasada, a apenas 18 días de la asunción de Javier Milei, la CGT convocó a un paro de actividades con movilización para el próximo 24 de enero, en rechazo a la serie de medidas tomadas por las autoridades que afectan los intereses de los sindicalistas. Rechazaron el DNU que desreguló la economía, pero también el contenido de la “ley ómnibus” que buscó abrir la economía, reducir el peso del Estado y aplicar cambios en la vida cotidiana.
En el DNU que Milei firmó para desregular la economía se aplicaron fuertes reformas al sistema de obras sociales sindicales, primero equiparando a la medicina prepaga y luego retirando la mediación obligatoria que había hasta ahora para contratar una cobertura de operadores privados. Eso más la limitación de los aportes sindicales obligatorios pusieron a la CGT en la vereda de enfrente del gobierno nacional.
DNU y Ley Ómnibus
Pichetto también analizó las dos medidas más fuertes que tomó el Gobierno en sus primeras semanas de gestión, el DNU de desregulación de la economía y la Ley Ómnibus con una amplia reforma integral.
El diputado y auditor general de la Nación recordó que el decreto “ya empezó a regir”, y negó que exista una dilación en el Congreso para su tratamiento. “No hay ninguna demora de parte de los diputados, no hay ninguna actitud dilatoria de los senadores. Simplemente que la comisión no se ha conformado. A partir del momento que se integra e ingresa el DNU a la comisión, hay 10 días para analizarlo”, explicó.
En ese sentido, resaltó que nunca el Congreso rechazó un DNU y dijo que le parece “interesante” la idea de la desregulación de la economía, aunque advirtió que hay “algunos temas más sensibles” que, sostuvo, “la Corte va a resolver”.
Pichetto sí puso el foco en la Ley Ómnibus que la semana pasada el Poder Ejecutivo envió al Congreso. “Aquí el Gobierno legisla sobre todas las temáticas y es una gran mezcolanza. Independientemente de declarar la emergencia económica, la administrativa, avanza sobre otras cuestiones que hacen a una integralidad”, explicó.
Por ejemplo, el diputado mencionó el tema de las privatizaciones, y recordó que “ni Menem en su mejor momento tuvo tanto”. Seguramente, dijo, se necesitará una ley para cada una de las empresas públicas que sean privatizadas.
“Veo que la ley es posible. Estamos dispuestos a iniciar esta semana un debate. Pero algunas cosas son disparatadas, lo que denota también que ha habido varios actores o se ha hecho un corte y pegue”, dijo Pichetto.
Más allá de insistir en que el Congreso debe darle “herramientas” al Gobierno, y que tiene “el deber de debatir”, resaltó que “esto es una república, no es una autocracia”, y le dejó un claro mensaje al presidente de cara a la discusión parlamentaria.
“El Congreso está dispuesto a trabajar y creo que el presidente tiene que encontrar un sendero de diálogo razonable, dejar de agraviar en forma genérica, tratar de conseguir una mayoría para poder gobernar, en la Cámara de Diputados especialmente. En el Senado la presidenta lo ha logrado. Lo que sirve para ganar una elección, la casta, la política es mala, son todos malos, me parece que en la etapa de Gobierno vos tenés que conseguir caminos más razonables, diálogos. Porque eso también votó la sociedad, votó un cambio pero también votó salir del conflicto, del ataque de sectores. Eso también estuvo en el voto de la gente”, subrayó.
Pichetto es el presidente del nuevo bloque que se conformó la semana pasada en la Cámara de Diputados a partir del acuerdo político entre la Coalición Cívica, Cambio Federal y Hacemos por Córdoba. Se llama Hacemos Coalición Federal, y está conformado por 23 diputados con fuertes lazos con los gobernadores Martín Llaryora (Córdoba), Rogelio Frigerio (Entre Ríos) e Ignacio Torres (Chubut).