El método de confrontación que utiliza Javier Milei contra el Congreso encontró la primera respuesta política real. Ocurrió este miércoles en el Senado, en una reunión que mantuvo la vicepresidenta, Victoria Villarruel, junto al ministro del Interior, Guillermo Francos, y los jefes de bloques no kirchneristas: la titular de la Cámara alta salió en defensa de los legisladores y dijo, según confiaron a Infobae, que “flaco favor” le hizo la Casa Rosada a la discusión parlamentaria con el mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que desregula la economía, y el flamante proyecto de ley “ómnibus” que aterrizó esta tarde en Diputados.
“Es la única que está haciendo política para que esto funcione. Al final, la que venía con mano dura y con la que no se podía hablar es la más racional de La Libertad Avanza”, reconoció un puñado de senadores de diferentes bloques no cristinistas ante la consulta de este medio. Este grupo agregó: “Fue una reunión dura, pero cordial. Lo que sorprendió fue la buena predisposición que encontramos en Villarruel hacia nosotros no sólo ahora, sino desde el inicio. Creo que hay que recordarle al Presidente que, gracias a ella, se juntaron 39 votos y dejamos en ridículo al kirchnerismo”.
Durante el cónclave, los representantes de las bancadas se quejaron por los “estilos y formas” de manejo del Ejecutivo en relación con el Congreso, tras el dictado del DNU y el envío de la ley ómnibus que se incluyó en el decreto de convocatoria a sesiones extraordinarias, que se encuentra vigente y se extenderá hasta que finalice enero próximo. También le dejaron en claro a Francos que hay disponibilidad de ayudar, pero no de la manera que propone la Casa Rosada. Menos aún, con los ataques verbales usuales de Milei.
Por su parte, Francos dio indicios de entender los reclamos de los senadores, sorprendidos por los gestos de Villarruel en código político. “Parece que llegó y ya conocía cómo funcionaba ‘la casa’”, se sinceró un experimentado representante opositor. El ministro del Interior también reconoció, tal como explicaron participantes del encuentro, que a veces cuesta quitarse el chip de campaña en algunos despachos de la Casa Rosada.
El fin de semana pasado, este medio reflejó el método de confrontación utilizado por el Presidente para exponer a toda la oposición en el Congreso. Sobre este punto, un importante referente libertario aseveró: “Tenemos la sociedad a nuestro lado. Por eso Milei habló a sus votantes y no a la Asamblea Legislativa. Todavía hay muchos políticos que siguen sin darse cuenta que el conflicto nos favorece en este momento”.
Por distinta vía corre Villarruel. “La reunión de hoy la dejó bien parada. Además, ya abrió el Senado y está juntando votos para la Boleta Única de Papel. Tiene una vocación muy distinta a la que nos imaginábamos y no salió a operar críticas al Gobierno por no conseguir todo lo que había pedido. En la era de la queja veloz, cumple con el lema ‘el que se enoja, pierde’”, sugirieron desde un despacho opositor. A ello debe sumarse que la titular de la Cámara tampoco dio entrevistas desde que se inició la gestión.
La vicepresidenta no sólo tiene que atajar este problema. La Libertad Avanza tiene sólo siete de 72 senadores en la Cámara alta y sus propios integrantes agitaron internas en las últimas horas sobre las butacas a ocupar en las comisiones. “Villarruel junta votos para que arranque el auto y desde su espacio le sacan la llave”, manifestó un experimentado cabalgador de cuestiones legislativas al tanto de las negociaciones.
En el encuentro, Francos vio una mejor predisposición en el Senado que en Diputados e incluso quedó pendiente, como una idea en el corto o mediano plazo, que algunos jefes de bloque concurran a la Casa Rosada para reunirse con el propio Milei. En medio de todo este panorama, Villarruel buscaba avanzar anoche con la definición del armado de comisiones.
Un escenario acelerado desde La Libertad Avanza fue frenado por la oposición no kirchnerista: el oficialismo pretendía activar dos comisiones este mismo jueves para dictaminar la Boleta Única de Papel -ya está aprobada por Diputados- y llevarla al recinto la semana próxima. “Ojo con apurar las cosas que los números están finos”, advirtieron.
En cuanto al mega DNU que desregula la economía, algunos bloques que se vieron con Villarruel y Francos quieren evitar a toda costa votar en contra del mismo junto al cristinismo. Rechazan las formas, pero no denostaron el contenido. Ahora podrían sumarse observaciones por la ley ómnibus. La única referencia política aparenta ser, por ahora, la titular de la Cámara alta.