La Confederación General del Trabajo (CGT) se reunió este martes con los senadores del Frente de Todos, que comanda José Mayans, y pidió “mayorías” en el Congreso para “frenar” el mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que desregula la economía. En la previa del encuentro, que se realizó en el segundo piso de la Cámara alta, el titular de la central sindical, Héctor Daer, manifestó que “el objetivo” es que la medida empujada por el Gobierno de Javier Milei “no siga su curso”, y ratificó que el jueves se definirá un eventual paro general junto a un plan de lucha.
Al término del cónclave, Daer advirtió que el DNU “tiene dos partes: un contenido absurdo y una forma autoritaria, al dejar de lado al Parlamento”. En tanto, Mayans dijo que la medida adoptada por la Casa Rosada “vulnera el estado de derecho y altera el sistema republicano”, y agregó que el Gobierno “actúa de forma incorrecta” y que la normativa sirve “para casos especiales, no para derogar 300 leyes”. El formoseño pretende que el tema se debata en los tiempos legales para “que la gente se entere sobre los cambios en leyes laborales y lo que van a hacer con las empresas públicas”.
Del lado de los senadores participaron Mayans y la camporista Anabel Fernández Sagasti (Mendoza), el ex mandatario de San Juan Sergio Uñac y la ex vicegobernadora de La Rioja, Florencia López, junto a otros compañeros de bancada. En tanto, por los sindicatos estuvieron, además de Daer, Gerardo Martínez (UOCRA), Andrés Rodríguez (UPCN) y el diputado Hugo Yasky (CTA Autónoma), entre otros invitados. El último sostuvo que por ahora “no están pensando en un paro”.
Para mañana, la CGT organiza por su cuenta, sin la participación de las agrupaciones piqueteras, una marcha a Tribunales para protestar contra la reforma laboral, tal como revelaron fuentes sindicales a Infobae luego de la cancelación del encuentro que iban a mantener el cotitular de la CGT Pablo Moyano (Camioneros) con el trotskista Eduardo Belliboni, referente de Unidad Piquetera. En la reunión con senadores no se habló de ir en conjunto este miércoles, sino la adhesión libre de cada legislador, con el fin de no teñir de un color político la movilización en cuestión.
El jueves pasado, la CGT se reunió con el bloque kirchnerista en Diputados. Más tarde, lo hicieron las CTA y otras federaciones gremiales. Al término del primer cónclave, la central comandada por Daer expresó: “El Decreto de Necesidad y Urgencia dictado por el Presidente Javier Milei y secundado por todo su gabinete (sumado algún ex funcionario sin cargo) ha decidido subvertir el orden constitucional al pretender legislar arrogándose la suma del Poder Público y, al igual que hizo en su discurso de asunción, dar la espalda al Congreso de la Nación”.
“Cualquier plan de Gobierno que exija de modificación, derogación o creación de leyes debe, imprescindiblemente, pasar por el debate de estos representantes. La posibilidad de gobernar vía Decretos exige estados de situación excepcionales de Necesidad y de Urgencia que, en la inmensa mayoría del plexo normativo que se afecta, no tienen esa condición. Su vicio es de origen y por lo tanto nulo de toda nulidad, tal lo expresa nuestra Constitución y la pacífica jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación”, argumentó la CGT en un comunicado.
El Consejo Directivo Nacional del principal polo sindical del país finalizó: “Una elección de Presidente da legalidad y legitimidad para su cargo. Ejercer ese cargo exige de las mismas condiciones. Ser legal es respetar la Constitución Nacional. Ser legítimo es convencer a las mayorías. Si no se respeta ese esquema se corre el riesgo de no ser respetado”.
Las declaraciones de la CGT van en línea con las bancadas kirchneristas en el Congreso, quienes ya se manifestaron en contra del DNU que aún no entró en vigencia. Sin embargo, las líneas de negociación de algunos jefes sindicales con el Gobierno de Javier Milei, sumado al alejamiento de piqueteros de la marcha de mañana a Tribunales, amortiguan de manera parcial la tensión con la Casa Rosada.