Con un mensaje crítico hacia el rumbo del gobierno de Javier Milei, la dirigente de la Coalición Cívica (CC), Elisa Carrió, reapareció hoy para cuestionar la falta de medidas que “alivien” la situación de los jubilados y se mostró crítica con la “constitucionalidad” del decreto de necesidad y urgencia (DNU) de desregulación de la economía, aunque abrió la posibilidad de apoyar algunos artículos de la norma.
“Hoy, una de las peores emergencias que atravesamos, es el padecimiento de los jubilados. El proceso inflacionario los está empujando al hambre y la pobreza”, arranca el posteo de Carrió que hizo en su cuenta personal de la red social X. En un tono muy duro, el texto advierte que “hasta ahora no se mencionó ni una sola propuesta concreta por parte del Gobierno que alivie esta situación” y manifestó que “como en todo proceso de ajuste, le pedimos al Poder Ejecutivo nacional que evite las injusticias absolutas”.
“No se trata de congraciarse sólo con un sector mientras la pobreza avanza sobre los más vulnerables”, subraya el comunicado, que también fue firmado por el presidente de la Coalición Cívica y diputado nacional, Maximiliano Ferraro.
Otro de los reclamos apuntaron hacia el mega DNU firmado esta semana por Milei, que cosechó fuertes reproches de abogados y especialistas del derecho por su presunta inconstitucionalidad. “Como ya lo hemos manifestado con relación al DNU, con varias medidas estamos de acuerdo, pero no con la forma ‘constitucional’ con que pretenden ser implementadas”, reiteraron los referentes de la Coalición Cívica.
Sin embargo, aún hecha esa crítica, evitaron rechazar de plano el decreto del Presidente cuando sea debatido en el Congreso. “Es por tal motivo que vamos a proceder a realizar un análisis exhaustivo de la forma y contenido, con seriedad, rigurosidad técnica y profundidad”, agregaron. “Lo que nos une a los argentinos es la Constitución Nacional. Sin Constitución no hay libertad”, concluye el mensaje de Carrió y Ferraro.
La Coalición Cívica fue el primer partido de Juntos por el Cambio (JxC) que decidió tomar distancia de apoyar a Javier Milei. En la previa al balotaje, Carrió cuestionó duramente el “pacto de Acassuso” que selló el apoyo de Mauricio Macri y de Patricia Bullrich a la lista de La Libertad Avanza (LLA), y acusó al fundador del PRO de promover la “ruptura” de JxC. Durante la campaña electoral, la ex diputada nacional había rechazado las ideas del ahora jefe de Estado, al considerarlas autoritarias. “Si Javier Milei llega a ser presidente, yo posiblemente me exilie”, dijo en una entrevista con Infobae de comienzos de año.
Con el resultado de la segunda vuelta del 19 de noviembre, Elisa Carrió bajó el perfil, pero la Coalición Cívica continuó dando señales. Nuevamente, fue el primer partido que dejó el bloque de Juntos por el Cambio y decidió reagruparse en una bancada propia para tener independencia para evaluar las políticas del gobierno de Javier Milei.
En el recuento de voluntades en el Congreso, hasta ahora, el mega decreto de desregulación económica y laboral de Javier Milei enfrentaba un panorama incierto. Junto al rechazo inmediato del peronismo, la Coalición Cívica y la izquierda, luego se sumaron voces críticas del radicalismo y los partidos provinciales, que si bien aclararon que comparten algunos de los objetivos de fondo, rechazan la forma en que decidió avanzar el gobierno libertario. Por el contrario, proponen que la norma sea discutida en el ámbito legislativo. Mientras que los sectores no peronistas y aliados al Gobierno optaron por proponer una negociación para preservar reformas clave, y el peronismo del Frente de Todos plantearon su repudio completo.
Si este presunto veto parlamentario al DNU se consolida, la oposición se acerca a alcanzar la mayoría de votos para para anularlo en el Poder Legislativo. Pero el escenario permanece abierto.