Luego de la marcha piquetera que atravesó la jornada, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, hizo un balance de la actuación de las fuerzas federales y destacó el cambio observado durante la manifestación de hoy, en contraste con lo que ocurría hasta este día.
“Es evidente que la mayoría de la gente decidió no concurrir”, dijo la funcionaria, resaltando que el número de asistentes a la protesta fue sensiblemente menor al que los dirigentes de Unidad Piquetera esperaban. “Los que concurrían arrastrados, no han venido y hoy se notó”, agregó.
“Acá que se terminó el vale todo. Es el inicio de una nueva etapa. Respaldamos a las fuerzas de seguridad. También es importante que el Presidente se haya hecho presente en el departamento de Policía, donde estaba el Comando Unificado de las 5 fuerzas federales”, señaló Bullrich. En efecto, el presidente Javier Milei se presentó en el departamento de policía del barrio porteño de Monserrat, desde donde ambos monitorearon el control de la movilización.
Bullrich también señaló que la cantidad de denuncias contra dirigentes fue récord. El gobierno habilitó la línea 134 para que los beneficiarios de planes sociales señalen a quiénes les exijan la presencia en la manifestación, bajo amenaza de darles de baja el beneficio. “Los que se quedaron en sus casas van a poder mantener el beneficio que el Estado les da por estar en situación de pobreza”.
“Hago una mención especial para los miles de argentinos que no se dejaron extorsionar: tuvimos más de 10 mil denuncias, y no hubo más porque la capacidad no lo da, que llamaron al 134 para denunciar aprietes y extorsiones. Muchos de ellos han dejado los nombres de las personas que los extorsionan, eso va a tener un canal muy claro de respuesta de parte nuestra y esperamos de parte de la Justicia que actúe”, dijo la ministra de Seguridad.
Luego destacó: “Hoy hubo libre circulación en todo el país. Esto es algo que no veíamos hace muchos años. Hoy no se cortó la 9 de Julio, no se cortó el Puente Pueyrredón, hoy no se cortó el Metrobus, accesos y rutas; la gente puedo ir a su trabajo con tranquilidad, y circular sin problemas. Hoy lo manifestantes no llevaron palos, piedras ni estuvieron encapuchados. No vinieron en colectivos porque iban a ser revisados. Tampoco hubo niños en la manifestación, no se usaron los niños como escudos humanos, algo que habíamos pedido. Se tiene que terminar la participación de los niños en los piquetes”.
En otro pasaje de la conferencia de prensa, la ministra Bullrich resaltó que los dirigentes de Unidad Piquetera reconfiguraron la organización de la marcha en función de la baja concurrencia. “Cuando vieron que los acompañaba poca gente cambiaron, hicieron una mini marcha, y se los pudo encausar en la vereda, porque eran pocos”, afirmó la funcionaria.
La ministra insistió en que “fue una movilización muy chica de militantes, y eso cambió el escenario”.
Luego, ante una consulta, la ministra explicó cuáles son las diferencias - desde su punto de vista - entre la marcha de esta jornada y las movilizaciones contra la cuarentena que la tuvieron como protagonista. “Cuando yo salí a la calle no había nadie, estaba prohibido salir, estábamos bajo el encierro, bajo la cuarentena eterna de Alberto Fernández y estábamos planteando que la Argentina se estaba fundiendo. Era sábado y todo auto podía pasar y, en general, se hacían dentro de la plaza del Obelisco. Incluso circulaban los manifestantes en autos”, argumentó.
El jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires , Jorge Macri, se expresó en su cuenta de X minutos después de la finalización de la marcha piquetera que atravesó la jornada en la Capital Federal y se reprodujo también en otros puntos del país.
Macri hizo una lectura positiva del despliegue que realizaron las fuerzas de seguridad, coordinadas entre Nación y Ciudad, y le agradeció al presidente Javier Milei el entendimiento.
“Lo importante hoy es que cambió la lógica de quién controla la calle. Veníamos de un país y una Ciudad donde los piqueteros hacían lo que querían”, dijo el alcalde porteño.
Luego agregó que “el éxito va más allá del operativo, tiene que ver con un cambio cultural en Argentina, en la Ciudad de Buenos Aires donde vuelve a ser el Gobierno el que decide qué se puede hacer y qué no en el espacio público”, destacó. “Hay una toma de conciencia de la gente de que no es con violencia ni prepotencia”, agregó Macri.
“El orden llegó para quedarse”, finalizó Macri.
Los integrantes de las organizaciones piqueteras que se movilizaron este 20 de diciembre culminaron la jornada difundiendo un comunicado en el que critican las medidas económicas que tomó en sus primeros 10 días de gobierno el presidente Javier Milei, y relacionan directamente al protocolo antipiquetes que anunció la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, como un complemento de esas medidas, que busca frenar la reacción social ante sus efectos.
Alrededor de las 18 y luego de una jornada tensa por la intención de los manifestantes de ocupar la calle en contra de la disposición de las fuerzas de seguridad, los dirigentes sociales emitieron un texto en el que justifican la manifestación de hoy dadas las consecuencias del plan económico que despliega el nuevo gobierno.
“Estamos movilizando todos unidos este 20 de diciembre contra el hambre, en defensa del trabajo genuino, los salarios, las jubilaciones, la salud y la educación, de todos nuestros derechos, contra la represión y el ataque a los planes sociales. En unidad y movilización de los trabajadores ocupados y desocupados, de los organismos de derechos humanos, sociales, estudiantiles, ambientalistas, de género, sindicales y políticos, realizamos la primera gran acción unitaria de lucha contra el ajuste de Milei-Caputo y el protocolo represivo de Bullrich”, afirman los movimientos, reunidos en Unidad Piquetera.
Luego, apuntan contra el “plan motosierra de Milei”, el protocolo de la ministra Bullrich y reclaman, entre otras, las siguientes consignas:
- Reapertura inmediata de paritarias y aumento general de salarios, jubilaciones y planes sociales, con un salario mínimo igual a la canasta familiar, acorde al costo de vida real, con ajuste automático mensual ante la escalada inflacionaria.
- Ningún despido ni suspensiones. Pase a planta efectiva de todos los contratados. No a la precarización ni a la reforma laboral ni jubilatoria. Reparto de las horas de trabajo, sin reducción salarial.
- No al tarifazo de los servicios y el transporte público. Defensa de la educación y salud pública y la ciencia y tecnología. Reestatización con control de los trabajadores y usuarios de las empresas de servicios públicos
Héctor Adolfo Ganzo y Ulises Nicolás Fernández fueron las dos personas detenidas durante la manifestación que se realizó en Plaza de Mayo. El motivo de la detención fue haber agredido a integrantes de la policía que se encontraban trabajando en el operativo que intentó contener la movilización a la largo de todo el día, con el objetivo de evitar que el tránsito sea interrumpido.
En tanto, fueron dos los policías que resultaron heridos, a causa de los enfrentamiento que se produjeron con los manifestantes que se desplazaban sobre la Av. Diagonal Norte, en primera instancia, y luego sobre la Av. Diagonal Sur. El resultado de esto fue que uno de los policías terminó con un corte en el brazo (codo), aparentemente realizado con un arma blanca, mientras que el restante recibió un golpe de puño en el rostro.
En la etapa final de la jornada de protesta, el referente del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, habló con los medios a metros de Plaza de Mayo. El dirigente insistió en cuestionar el operativo desplegado por el ministerio de Seguridad. “En Constitución había un altavoz que decía que no había que ir a la marcha”, se quejó.
Las organizaciones agrupadas en Unidad Piquetera redactaron un documento final, luego de la marcha del 20 de diciembre contra el gobierno de Javier Milei y su paquete de medidas económicas.
Durante la mayor parte de la jornada en la que se produjo la marcha del 20 de diciembre, las vías de circulación estuvieron liberadas, con los manifestantes desplazándose hacia Plaza de Mayo sin interrumpir el tránsito ni bloquear las calles. Sin embargo, minutos después de las 16, cuando emergieron las columnas encabezadas por los principales dirigentes de Unidad Piquetera, esa orden del ministerio de Seguridad se vio alterada. Así, en las arterias de acceso a Casa Rosada, Diagonal Norte y Diagonal Sur, se produjeron enfrentamientos y golpes de puño entre piqueteros y uniformados.
Fotos: Ariel Torres, Maxi Luna, Nicolás Stulberg, Franco Fafasuli y Adrián Escándar
El presidente Javier Milei dejó las instalaciones del departamento de policía, ubicado en el barrio Monserrat, en la Ciudad de Buenos Aires, desde donde siguió por espacio de una hora el momento más tenso de la jornada, cuando el grueso de las columnas de piqueteros ingresaron a Plaza de Mayo.
El jefe de Estado estuvo acompañado por la primera línea de su gabinete. Junto a él, observaban la actuación de las fuerzas policiales, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, de Capital Humano, Sandra Petovello, la Secretaria General de la presidencia, Karina Milei, entre otros funcionarios.
El presidente Javier Milei supervisó esta tarde junto a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, el inicio del primer operativo antipiquete que implementó el Gobierno para tratar de garantizar la circulación del tránsito, en medio de una protesta que se dirigía a Plaza de Mayo.
Durante la mayor parte de la jornada en la que se produjo la marcha del 20 de diciembre, las vías de circulación estuvieron liberadas, con los manifestantes desplazándose hacia Plaza de Mayo sin interrumpir el tránsito, ni bloquear las calles. Sin embargo, pasadas las 16, cuando emergieron las columnas de gente encabezadas por los principales dirigentes de Unidad Piquetera, esa orden del ministerio de Seguridad se vio alterada. Así, en las arterias de acceso a Casa Rosada, Diagonal Norte y Diagonal Sur, se produjeron enfrentamientos y golpes de puño entre piqueteros y uniformados.
El saldo fue de dos detenidos, ambos mayores de edad. Ambos fueron aprehendidos por agredir al personal policial. El hombre que fue apresado en Diagonal Norte, en la intersección de Maipú, hirió con arma blanca en el brazo a un Policía de la Ciudad, según informaron fuentes de las fuerzas de Seguridad.
Integrantes de los partidos de izquierda MST y PTS irrumpieron en la intersección de avenida Belgrano y Diagonal Sur, marchando hacia Plaza de Mayo por la calle. La policía intentó forzarlos a que circulen por la vereda y se produjeron enfrentamientos. “Estamos derrotando el protocolo antipiquetes”, dijo la diputada nacional Vanina Biassi, quien junto a Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero, avanzaron por ese sector.
En diagonal sur, en tanto, otros partidos políticos de izquierda, que también forman parte de la Unidad Piquetera, ocuparon de la misma manera la calle. De esta forma, el objetivo del gobierno nacional, que apuntaba a que el tránsito no sea interrumpido, se vio momentáneamente frustrado.
Desde el departamento policial situado en el barrio Monserrat, el presidente Javier Milei y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, observaban los hechos.
Como consecuencia de los disturbios, al menos una persona fue detenida.
“El balance es positivo”, dijo el secretario de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Diego Kravetz, en un breve diálogo con la prensa durante la manifestación que tiene como objetivo realizar una protesta en Plaza de Mayo. Kravetz destacó que, a diferencia de obras movilizaciones, no hubo cortes de tránsito en la avenida 9 de Julio, en el metrobús ni dificultades para la utilización de las líneas de subtes.
Tampoco hubo personas detenidas durante el fuerte operativo que desplegó el ministerio de Seguridad de la Nación, en coordinación con esa área del gobierno porteño. “Están acatando”, destacó Kravetz, en relación a la actitud de las personas que participan de la manifestación.
La posición del gobierno ha sido a lo largo de la marcha de este 20 de diciembre, que los piqueteros protesten pero sin alterar el tránsito.
Los dirigentes de las distintas organizaciones, agrupados en Unidad Piquetera, anticiparon que, pese a las restricciones que impusieron las fuerzas de seguridad, la convocatoria alcanzará las 50 mil personas frente a la Casa Rosada.
Mientras los manifestantes intentan desplazarse hacia Plaza de Mayo ocupando las calles, generando empujones y tensión con efectivos policiales, el presidente de la Nación, Javier Milei, llegó al departamento de policía ubicado en el barrio porteño de Monserrat. Allí se reunió con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, responsable máxima del operativo que las fuerzas federales despliegan en la jornada.
El presidente llegó a las 15:43 a la sede policial. Bullrich lo esperó en el ingreso y ambos se dieron un abrazo, en un claro gesto de apoyo del jefe de Estado hacia la funcionaria, en la primera marcha de magnitud que enfrenta el gobierno nacional, a 10 días de haber asumido.
Los grupos piqueteros alteraron el recorrido previsto para poder lograr el objetivo de llegar a Plaza de Mayo. Para eso, evitaron dirigirse hace la avenida 9 de Julio, punto de encuentro tradicional, y se desplazaron desde Avenida Belgrano por Diagonal Sur. La policía se dirigió a ese nuevo punto de encuentro, buscando imponer el criterio anunciado: que las personas caminen por la vereda, sin interrumpir el tránsito.
Esto generó algunos disturbios menores, con insultos de parte de la gente a los uniformados. Durante esta marcha, no fueron cortados los puentes ni se cortaron, hasta el momento, las vías de circulación.
A falta de una hora para el inicio de la movilización convocada por organizaciones sociales y políticas que confluyen en Unidad Piquetera, las fuerzas federales realizan presencia en los puntos neurálgicos de acceso a la Ciudad de Buenos Aires, con el objetivo de disuadir a los manifestantes, en función del protocolo establecido por el ministerio de Seguridad.
En la estación Constitución, por caso, se encuentran realizando controles la policía Federal - en el interior - la policía de la Ciudad de Buenos Aires, en los alrededores, y en la esquina de la calle Lima marcan presencia miembros de Infantería.
El despliegue es parte del operativo dispuesto por la cartera de Seguridad para la jornada. La actividad extendió los controles a los medios de transporte, como trenes, colectivos y subtes, en los que se puso especial hincapié en impedir que se trasladen personas encapuchadas, con palos o consignas para la manifestación.
El gobierno busca que la protesta se realice sin cortar calles ni interrumpir el tránsito. Los grupos piqueteros, sin embargo, consideran que por el volumen de gente, las calles estarán bloqueadas.
El área a cargo de Bullrich informó los resultados del operativo hasta el mediodía. Las novedades se dieron en el peaje Pilar, donde se liberó un colectivo para que continúe sin pasajeros, al detectar que eran “posibles piqueteros” quienes se trasladaban allí, según el reporte de Seguridad.
En tanto, la línea 134 que el gobierno dispuso para receptar denuncias de aprietes para asistir a la movilización recibió casi 10 mil llamados, según informó el gobierno, de los cuáles 660 fueron “denuncias con relevancia”.
Hasta el momento, el efecto disuasión y control desplegado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y la aplicación del Protocolo Antipiquetes está dando sus resultados. Los dirigentes de izquierda cambiamos la cita de la movilización que ya no será en el Congreso de la Nación. La cabecera central se ubicará en Diagonal Sur y Belgrano y desde allí marcharán a Plaza de Mayo, un segunda columna lo hará por Diagonal Norte y otras organizaciones y organismos de derechos humanos se movilizarán desde el obelisco porteño.
El referente del Polo Obrero Eduardo Belliboni atacó al periodista Alan Ferraro durante el inicio de la marcha piquetera, en momentos en que llegaron a la estación de transbordo de Constitución para, desde allí, movilizarse hacia la Plaza de Mayo. “Te van a echar, gil”, le gritó el dirigente al cronista, luego de que lo interpelara sobre los motivos de la protesta. Además, quedó registrado cuando golpeó el micrófono de la señal de TN.
Para eludir los operativos de las fuerzas federales en colectivos que transitaron por los accesos a CABA, el líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, y el dirigente de izquierda Gabriel Solano llegaron en subte a la estación de transbordo de Constitución. Desde allí planean movilizarse hacia la Plaza de Mayo.
“Vamos a movilizarnos por la calle”, amenazó Belliboni pese a la orden impartida por el Ministerio de Seguridad para evitar piquetes.
El dirigente piquetero anunció además que habrá menores en la marcha. “La patria potestad la tienen los padres, no Patricia Bullrich”, desafió.
Luego de hacer estas declaraciones, Belliboni atacó violentamente a un periodista del canal Todo Noticias.
El Ministerio de Seguridad nacional activó a las 8 de la mañana de este miércoles un mega operativo con el despliegue de todas las fuerzas de seguridad federales: Policía (PFA), Gendarmería, Prefectura Naval y Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). La intención, tal como lo manifestó la titular de la cartera, Patricia Bullrich, es hacer valer el protocolo antipiquete para garantizar la libre circulación de los ciudadanos: “Si bajan de la vereda, se activa”, anunció en las últimas horas.
Desde primera hora, integrantes de las cuatro fuerzas federales suben a colectivos y otros transportes de pasajeros a realizar inspecciones. “Están buscando alguna señal de piedras o de otros elementos que estén transportando los manifestantes”, aseguraron fuentes oficiales a Infobae.
Pese a algunas denuncias que circularon en redes sociales, desde la PSA aclararon ante la consulta de este medio: “No se sube a los colectivos a buscar personas, sino que se revisa que esté todo en orden y que no haya elementos para incumplir con el protocolo”.
“Tampoco estamos bajando a pasajeros”, agregaron.
La provincia de Buenos Aires no aplicará este miércoles el protocolo antipiquete que diseñó el gobierno nacional y que pondrá en marcha en la jornada de protesta que llevarán adelante organizaciones piqueteras de izquierda para garantizar la libre circulación. Fuentes del ministerio de Seguridad bonaerense confirmaron a Infobae que no se ha hablado formalmente del protocolo en cuestión y que no hay mayores detalles del alcance de la medida. Todo eso se hablará en los próximos días en una reunión de gestión entre la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich y su par bonaerense, Javier Alonso.
Desde la organización Polo Obrero, emitieron un comunicado este mediodia, en el que modifican el centro de concentración para la movilización de este este miécoles a Casa Rosada, por iniciativa del Ministerio de Seguridad.
“Con el fin de asegurar tanto la realización del acto en Plaza de Mayo y sortear las provocaciones que ha montado el gobierno nacional y su ministra Patricia Bullrich, suspendemos la salida de Congreso y la movilización saldrá de dos puntos. La cabecera central, de Diagonal sur y Belgrano, y la otra cabecera, de Florida y Diagonal Norte”.
Y agregan: “Luego marcharemos a Plaza de Mayo para realizar el acto acordado entre decenas de organizaciones populares, piqueteras, sindicales, y estudiantiles y de derechos humanos”.
Esta acción del Polo Obrero, también la comunicó el Ministerio de Seguridad de la Nación, pero aclaró que “la movilización hacia Plaza de Mayo, desde ambos puntos de encuentro, se realizará sin que los manifestantes puedan cortar el tránsito y con el ordenamiento del Gobierno de la Ciudad. Del mismo modo, el transporte público va a estar funcionando con normalidad”.
Asimismo, desde el organismo oficial repasaron los puntos a tener en cuenta por los manifestantes:
Este miércoles, la Gendarmería también actuó en el puente que une la ciudad de Cipolleti, provincia de Río Negro, con Neuquén. La protesta la llevó adelante el Frente Popular Darío Santillán en reclamo por alimentos en comedores.
Los efectivos se apostaron en el enlace vial, bajo la aplicación del protocolo antipiquetes anunciado por la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich. Asimismo, por instrucciones del Dr. Zanona, Fiscal Federal de Río Negro, y siguiendo la orientación del Dr. Villanueva, Juez Federal de Neuquén, se dispuso la permanencia de los efectivos en el Puente Cipolletti-Neuquén.
De hecho, la titular de la cartera de Seguridad destacó la intervención de las fuerzas, mediante una publicación en sus redes sociales. “Puente Cipolletti-Neuquén completamente liberado. Ley y Orden”, escribió Bullrich.
A pocas horas del inicio de la marcha piquetera, el vocero presidencial, Manuel Adorni, apuntó contra el Polo Obrero, una de las organizaciones convocantes, y denunció que maneja una caja de $5.461 millones en la intermediación de los planes sociales. “Se va a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para pulverizar este tipo de acciones”, aseguró el funcionario en el marco de su habitual conferencia de prensa.
Gendarmería Nacional detuvo a un micro escolar que transitaba por la Panamericana a la altura de Pilar. Trasladaba a 30 pasajeros, que no pudieron explicar su destino, por lo que los identificaron como “posibles manifestantes”.
El micro pudo continuar con su recorrido, pero las personas fueron obligadas a descender y continuar por otros medios.
Por su parte, la Gendarmería también actuó en el puente que une la ciudad de Cipolleti, provincia de Río Negro, con Neuquén. La protesta la llevó adelante el Frente Popular Darío Santillán en reclamo por alimentos en comedores.
Los efectivos se apostaron en el enlace vial, bajo la aplicación del protocolo antipiquetes anunciado por la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich.
El dirigente de Barrios de Pie, Daniel Menéndez, hizo referencia este miércoles a la marcha organizada contra las medidas del Gobierno nacional y al DNU que prepara el presidente Javier Milei.
“Creo que el Gobierno está sobregirado y piensa que ganar las elecciones fue tener un cheque en blanco”, manifestó el dirigente en comunicación con radio 10.
Asimismo, sostuvo: “Todos proyectamos que vamos a estar peor. A lo mal que estamos se le suma la angustia”.
“El Gobierno va a 200 kilómetros por hora a estrellarse contra una pared en breve. Parece que disfrutan con el dolor de la gente”, concluyó.
El Gobierno aplicará este miércoles el protocolo de actuación dispuesto por el Ministerio de Seguridad para desalentar las protestas y los cortes de tránsito. Se trata un procedimiento controversial que ya cosechó críticas de organismos de derechos humanos, que lo cuestionan por su validez e inconstitucionalidad por impedir el derecho a la protesta. La nueva normativa se pondrá a prueba con la movilización convocada por Unidad Piquetera.
El dirigente gremial, Rubén “Pollo” Sobrero, se pronunció este miércoles sobre la marcha del 20 de diciembre y la protocolo antipiquete que dispuso el Ministerio de Seguridad de la Nación.
“El Gobierno va a intentar desviar la discusión del plan económico, agarrándose de la marcha si llega a haber algún incidente. Para nosotros el éxito es que en la marcha no pase nada”, manifestó Sobrero en comunicación con radio Perfil.
Y agregó: “Si no nos dejan llegar a Plaza de Mayo, sería como un Estado de Sitio. Es imposible que 40.000 personas caminen por la vereda”.
“En el Gobierno de la Ciudad no veo ánimos de que haya hechos violentos, si lo veo en la Ministra”, concluyó.
Las fuerzas de seguridad custodian los accesos a la Ciudad de Buenos Aires, las inmediaciones a la Casa Rosada y el Congreso Nacional. Está previsto también que armen un dispositivo especial para frenar micros e identificar piqueteros en estaciones de trenes.
Se trata de lugares con jurisdicción federal, por lo tanto, intervendrán las fuerzas federales. La Gendarmería dará soporte a la PFA en ese sentido. En tanto que la Policía de la Ciudad actuará para disuadir y evitar que los manifestantes interrumpan el libre tránsito, o hagan bloqueos o daños en la vía pública.
La Unidad Piquetera, que agrupa a organizaciones de izquierda y movimientos sociales, ratificó que se movilizará por el centro porteño con destino hacia la Plaza de Mayo. El eje de la protesta se concentrará frente a la Casa Rosada.
“Lo de hoy será el termómetro de cómo está la calle”, le contó a Infobae una fuente vinculada a la seguridad de la Casa Rosada. La sede del Gobierno nacional amaneció vallada preventivamente, aunque la presencia policial todavía era muy discreta a primera hora de la mañana. Como prevención ante la posibilidad de que se produzcan desmanes o actos de descontrol en la Plaza de Mayo, la seguridad estará reforzada a medida que se acerque la hora 16, cuando se espera una movilización de organizaciones sociales y de partidos de izquierda que partirá desde el Congreso y que culminará frente a Balcarce 50 para conmemorar la trágica jornada del 20 de diciembre de 2001. día en que renunció el presidente Fernando de la Rúa.
A pocas horas de la primera movilización desde la asunción de Javier Milei, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, afirmó hoy que se saturó el sistema implementado por el Gobierno para que beneficiarios de planes sociales denuncien por amenazas a dirigentes piqueteros, y que ya recibieron más de 5.000 llamados.
Este miércoles, en la cartelería de la Estación Constitución, se pueden leer mensajes del Gobierno nacional, dirigido a las personas que participarán de la marcha piquetera de este 20 de diciembre,
“El que corta, no cobra”, es la frase principal de los carteles que aparecieron en la jornada de hoy. No obstante, los mismos también aclaran que “si te están obligando, podés denunciar anónimamente al 134”.
En otro de los carteles, se puede leer: “El Ministerio de Seguridad de la Nación Informa: si va a ejercer su derecho de protestar, tome en cuenta que solo lo puede hacer en lugares habilitados. Recuerde que cortar una calle, una avenida o una ruta, es un delito penado por ley”.
Y aclara; “Si sufre alguna extorsión para concurrir a una manifestación, recuerde que puede denunciarlo anónimamente llamando al 134″.
Asimismo, el vocero presidencial Manuel Adorni, compartió las imágenes en la Estación Constitución en sus redes sociales y escribió: “Hay que terminar con los intermediarios en los planes sociales: utilizan la pobreza para su propio beneficio, sin importarles ni las necesidades ni la dignidad de aquellos que menos tienen”.
El presidente Javier Milei encabeza una nueva reunión del gabinete nacional en la Casa Rosada, por octava vez consecutiva desde que asumió y a horas de que dé a conocer el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que desregula sectores claves de la economía, El mandatario nacional y sus ministros están reunidos en el Salón Eva Perón.
Este miércoles, en la previa de la marcha piquetera contra las medidas del Gobierno nacional, un llamado al 911 de una voz masculina alertó sobre un presunto artefacto explosivo en la Estación Constitución, sin aclarar si se trató de la terminal ferroviaria o de subte.
Fue notificado al comando de la Policía Federal Argentina y en cuanto al área subte acudió personal de la Comisaría Vecinal 1C de la Policía de la Ciudad y el Escuadrón Antibombas.
El líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, se pronunció este miércoles sobre el protocolo antipiquetes que dispuso el ministerio de Seguridad y la movilización que llevarán adelante hoy las organizaciones sociales.
“Estamos con preocupación por las declaraciones que se hacen y sobre el despliegue de las fuerzas que se anuncian, como si estuviéramos en guerra. En Argentina prohibir las marchas es como prohibir a la selección nacional”, manifestó el dirigente piquetero en comunicación con radio Provincia.
Además, sostuvo: “Es un Gobierno insensible, antidemocrático y debería haber un paro nacional. Los primeros días tiraron una bomba y se fueron al country a dormir. Es un error esperar más tiempo. No sirve no reaccionar ante la primera agresión”.
“La conmemoración de lo ocurrido el 19 y 20 de diciembre de 2001 es un buen motivo, tuvimos 39 muertos. Y la gente más buena es la que masacra la policía en las movilizaciones porque son los que pelean por los que menos tienen, como Maxi y Darío o el Pocho Lepatri”, añadió.
Y agregó: “Pero también se hace en el marco de un ajuste brutal que está arrasando con los salarios. Denunciamos una transferencia de recursos al capital concentrado. Y en favor de los libertades democráticas que hoy están amenazadas por el protocolo de Patricia Bullrich”.
El dirigente del Partido Obrero y exdiputado nacional, Néstor Pitrola, hizo referencia este miércoles al protocolo que utilizará el Gobierno nacional frente a la movilización piquetera y apuntó contra el presidente Javier Milei.
“Me pregunto si Milei sabe en qué régimen político estamos, hoy con este golpe hiperinflacionario se está quitando el derecho al salario y los planes sociales. Prohibir el derecho a la manifestación va configurando un régimen dictatorio”, aseguró Pitrola en comunicación con radio Splendid.
Y agregó: “Nosotros creemos que se ha puesto a Patricia Bullrich afuera de la ley, no se rige el estado de sitio y una persona que se manifiesta sufriría el protocolo impuesto. Esto de hacer espionaje con los servicios de inteligencia para identificar es violar la ley de inteligencia”.
Son más de 25 años de cultura piquetera. Pero poco quedó de lo que se inició a mediados de los ‘90, cuando surgieron en la meseta patagónica los primeros cortes como reacción improvisada y espontánea ante el hambre y el desempleo en Cutral Co y Plaza Huincul. Se originó desde ahí un fenómeno social que se convirtió en político y que instauró una cultura surgida de grupos partidizados que vienen articulando de manera privada planes y recursos para asistir a los más pobres. Una cultura que terminó siendo reconocida y alimentada por un Estado que desde hace más de 20 años vienen manejando la asistencia social con las mismas caras y los mismos jefes. “Si Evita viviera”, exclamó una vez Cristina Kirchner, cuando el Movimiento Evita de Emilio Pérsico la cuestionaba políticamente a ella.
La Unidad Piquetera, junto a organizaciones multisectoriales, se movilizarán hoy por primera vez contra las políticas económicas y sociales anunciadas por el gobierno de Javier Milei, a diez días de haber asumido. La movilización partirá a las 16 horas hacia Plaza de Mayo. Se dividirán en dos columnas (iban a sr tres pero reconfiguraron el plan): una marchará por Diagonal Norte y la otra por la Sur.
Con voz ronca, ajada, tal vez cansada, ejerció, o quiso ejercer, un poder que ya no tenía. “¿Se quieren correr que no me puedo concentrar?”, dijo mientras miraba a sus ministros y a algunos otros funcionarios. La escena era la de un velorio. Algunos de sus allegados no podían contener las lágrimas. Sólo quien era su canciller, Adalberto Rodríguez Giavarini, se mantuvo a su lado, por si hacía falta alguna sugerencia al breve texto que ya había empezado a escribir en el papel timbrado en el que se leía: “Presidente de la Nación Argentina”. Después, con mano acaso firme escribió: “Al Señor Presidente Provisional del Senado, Ing. Ramón Puerta: Me dirijo a usted para presentar mi renuncia como Presidente de la Nación”. No hizo falta ninguna sugerencia del canciller. Escribió luego un par de conceptos antes de sellar el texto con un: “Pido a Dios por la ventura de mi Patria”. Después firmó: “De la Rúa”, sólo el apellido, la D alta, redondeada, con un rulo continuo que enlazaba el resto de las letras, el acento firme en la U, la A final alargada en un trazo recto.