El anuncio sobre la futura venta de los dos aviones de YPF, que utilizaba como propios la ex vicepresidenta Cristina Kirchner para sus viajes a Santa Cruz, es un gesto simbólico en tiempos de ajuste. El Gobierno podría recaudar algo más de 15 millones de dólares. Con tiempo, y bien asesorado, la cifra podría aumentar hasta 19 millones, según tres fuentes aeronáuticas consultadas por Infobae. Esa venta sería solo el primer paso. El Gobierno también analiza reducir la flota oficial y hasta se evalúa vender el nuevo avión presidencial, comprado por Alberto Fernández hace un año.
“Tomamos la decisión de concretar la venta de dos aviones de la empresa YPF haciendo ejercicio de nuestra posición en el directorio. Los dos aviones eran utilizados, casi con exclusividad, por la política”, anunció el viernes el vocero presidencial Manuel Adorni. Por su parte, la empresa sacó un comunicado y justificó la venta “por cuestiones de eficiencia y ahorro”.
Los aviones son un Learjet 60, matrícula LV-BTA, y un Embraer Praetor 550, registrado con la matrícula LV-KGJ.
Adorni no mencionó a la ex vicepresidenta, aunque era la pasajera más frecuente del gobierno anterior. Según publicó el diario La Nación, Cristina Kirchner utilizó esas dos aeronaves 59 veces en los últimos años para trasladarse a Santa Cruz. Por esos vuelos, el Estado le pagaba a la compañía petrolera los “gastos operativos”. A mitad del año pasado, esa deuda ascendía a unos 110 millones de pesos, pudo saber este medio.
Cristina no era la única pasajera. El ex presidente Alberto Fernández se subió en un par de ocasiones al avión más moderno de YPF y también lo utilizaba el ex ministro de Economía Sergio Massa durante la campaña.
Si finalmente se venden las dos aeronaves, implicarían un ingreso para el Estado de entre 15 y 19 millones de dólares. “El Learjet 60 se compró hace diez años en USD 10,5 millones pero hoy vale entre 3,5 y 4 millones. Está bien mantenido, hace un mes está en Estados Unidos por una reparación. El Embraer Praetor 550 es un avión muy moderno, pero no es tan buscado en el mercado”, dijo una fuente del mercado aeronáutico. El precio del segundo avión varía entre 12 y 15 millones.
Cristina Kirchner fue denunciada ante la Justicia en 2022 por el uso indiscriminado de los aviones oficiales. Esa presentación, a cargo de los diputados de la Coalición Cívica Mónica Frade, Maximiliano Ferraro y Paula Mariana Oliveto, en realidad apuntaba a viajes que se habían hecho en tres aeronaves de la flota presidencial y en el Learjet 60 de YPF. El otro avión de la compañía petrolera todavía no estaba disponible.
“Hay un desmedro de los fondos públicos en la utilización de aviones de YPF para viajes con motivos personales de la vicepresidenta de la Nación, considerando que sólo el 51% de las acciones de la empresa pertenecen al Estado y se provocó una erogación que debió ser haber hecho con su propio erario”, sostuvieron los diputados en una ampliación de la denuncia. Sin embargo, la causa se terminó archivando en septiembre pasado, tras un dictamen del fiscal Gerardo Pollicita.
Tras el anuncio de la venta de los aviones de YPF, el Gobierno ahora debe tomar una decisión sobre la flota oficial.
El avión más nuevo, el ARG 01, está hace dos semanas en un taller de Salina (Kansas), a donde viajó para una inspección de los tanques de combustible. El regreso al país se demoró más de lo previsto por cuestiones burocráticas. “Esta semana pudimos destrabar un pago en el Banco Nación”, dijo una fuente de la Secretaría General de la Presidencia, ahora a cargo de Karina Milei. Si no hay nuevas complicaciones, el avión regresaría entre jueves o viernes y estaría disponible para el viaje de Javier Milei a la cumbre de Davos, en enero.
Sin embargo, tal como adelantó este medio, el Gobierno evalúa alquilar un avión privado para trasladar al presidente a Suiza. Implicaría un gasto de unos 170 mil dólares, según la aeronave y la empresa elegida. Al menos dos empresarios del sector ya recibieron pedidos de cotización de otros empresarios que quieren acompañar a Milei a Suiza. Pero hasta ahora no hubo comunicación desde Presidencia.
En el medio, todavía debe definirse qué funcionarios manejarán la flota oficial y si la operatividad seguirá en manos de la Fuerza Aérea. Esta semana hubo reuniones en distintas oficinas públicas pero no se avanzó con designaciones. En esos encuentros, algunos de los emisarios oficiales revelaron la idea de reducir la flota oficial de aviones y helicópteros. Uno de los consultados coincidió con el plan de ajuste pero sugirió que el Estado mantenga el Embraer Praetor 550 de YPF por su “utilidad operativa”.
Además del ARG 01, que se terminó pagando unos 25 millones de dólares (con la entrega del viejo Tango 01), el Estado es dueño de un Boeing 737-500 y un Lear Jet 60. “Por esos dos aviones se pueden conseguir otros 10 millones de dólares”, dijo una fuente del mercado. A eso hay que sumarle unos 18 millones de dólares de los helicópteros oficiales.
En lo inmediato, todas las miradas apuntan al ARG 01 por los altos costos. En dos meses, ese avión deberá realizar una inspección mayor y estará al menos 60 días parado. Infobae reveló que la gestión anterior impulsó una contratación millonaria para esos trabajos, apenas una semana antes del recambio. El abogado Pablo Nocetti, ex funcionario de Patricia Bullrich, hizo una denuncia penal y pidió que se investigue la responsabilidad de todos los funcionarios involucrados.
La millonaria contratación es para cambiar el sistema de internet y para la inspección general. Los dos trabajos costarían al menos 5 millones de dólares.
La decisión de avanzar con una reducción de la flota oficial implicaría, si se concreta, volver a un modelo similar al que se implementó durante el gobierno de Mauricio Macri, cuando se priorizaron los alquileres. Según un informe publicado por el gobierno anterior al momento de comprar el nuevo avión presidencial, entre 2015 y 2019 se gastaron unos 10 millones de dólares en alquileres. “Al Estado siempre le conviene alquilar, el viaje a Davos yendo en el ARG 01 sale el doble que en un avión privado”, asegura un empresario aeronáutico.
Los más memoriosos recuerdan que en plena campaña, Milei había respaldado la compra del ARG 01 por “cuestiones de seguridad”. “(Alberto) No se lo lleva a la casa…. quien sea el próximo presidente lo va a usar”, dijo en una entrevista con TN. Eran otros tiempos. Ahora tiene que dar señales de ajuste “a la casta”.